El pasado neoliberal de Echenique: era de Ciudadanos y apoyaba la guerra de Irak
Pese a haber sido recientemente destituido de la secretaría de organización de Podemos, Pablo Echenique continúa siendo uno de los hombres fuertes de la formación morada, además de ser una de sus caras más representativas.
Sin embargo, pocos saben cuál fue el pasado de este físico y político aragonés. Antes de que Podemos se construyese como partido en el año 2014, Echenique tenía un blog en el que hizo una sorprendente confesión: fue de Ciudadanos y apoyó la guerra de Irak. Ni siquiera él da crédito ante tan sorprendente caso de «chaqueterismo»: «Me cuesta trabajo imaginarme a mí mismo pensando eso, pero es un hecho. Lo pensaba».
En el artículo, escrito en agosto de 2013, explica que tuvo un pasado neoliberal, que fue evolucionando progresivamente con el tiempo: «Mi amigo me conoce hace mucho y sabe que yo antes era neoliberal (en mi etapa de Ciudadanos ya me estaba moderando)». Echenique comienza preguntándose cómo puede haber personas de nivel económico bajo que pueden votar a «partidos capitalistas» como el PSOE, el PP o UPyD para después admitir que no solo votó al partido de Albert Rivera, sino que estuvo afiliado al mismo.
Además, reconocía que estuvo a favor de la invasión de Estados Unidos en Irak, desmarcándose en aquel momento del famoso «No a la guerra» que enarbolaba la izquierda. «Me parecía apropiado que EE.UU. invadiese Irak, pensaba que la “libertad” estaba por encima de todo, y creía en todos esos eslóganes que los asesores capitalistas le susurraban a ZP en el oído».
Echenique continuaba el escrito ligando este cambio ideológico tan radical con una evolución en su alimentación que sufrió en paralelo: «No me gustaba casi nada, y, en un mes o dos, pasé de ese estado (que me había acompañado 27 años de mi vida) a comer absolutamente de todo». Sin embargo, el ahora político no consigue explicar el porqué de esta mutación que nos recuerda otros nombres como el de Jorge Verstrynge –que pasó de secretario general de Alianza Popular a defender las máximas del comunismo–, y explica que «no es nada sencillo estar seguro de los motivos de un cambio radical en un cerebro humano».
No obstante, para cerrar este artículo de confesiones, atribuye su pasado pensamiento de derechas a falta de cultura y conocimiento: «Un joven físico, racional pero que nunca había estudiado […] historia o economía, que, cuando leía, leía física o ciencia ficción, era la carne de cañón óptima para comerse el guiso ideológico de la chistera». Siempre se ha dicho que «los extremos se tocan», y Echenique puede ser un claro ejemplo que corrobora este dicho popular después de evolucionar del neoliberalismo al comunismo en tan solo unos años.