La selección española de baloncesto se clasificó este viernes para la segunda final de su historia de una Copa del Mundo y decimocuarta contando las de EuroBasket y Juegos Olímpicos, y se aseguró su decimonovena medalla.

La victoria ante Australia tras dos prórrogas por 95-88 permitirá a los de Sergio Scariolo volver a un partido por el título cuatro años después de hacerlo por última vez en el Europeo de 2015, donde ganó el oro ante Lituania. Desde esa fecha, había caído en las semifinales de los Juegos de Río de Janeiro ante Estados Unidos y las del último Campeonato de Europa en 2017 ante Eslovenia, aunque en ambos caso conquistó el bronce.

Para España, la del domingo en Pekín será la segunda final de su historia en un Mundobasket después de la histórica de 2006, también en Asia, en Japón, y donde ganó el oro ante Grecia (47-70), y la decimocuarta en total, ya que se une a las nueve disputadas en EuroBaskets (1935, 1973, 1983, 1999, 2003, 2007, 2009, 2011 y 2015) y las tres olímpicas (Los Angeles’84, Pekín 2008 y Londres 2012).

Además, a falta de saber el color, el combinado nacional se aseguró ya su decimonovena medalla en un gran torneo internacional. El oro o la plata del domingo se unirán a las cuatro preseas olímpicas (tres platas y un bronce), el oro mundial de 2006 y las trece continentales (tres oros, cuatro bronces y seis platas).