Sexta noche de disturbios en Cataluña
Los Mossos d’Esquadra han disparado decenas de proyectiles de precisión ‘foam’ para abrir espacio para que los bomberos pudieran acceder a una barricada incendiada en la calle Pau Claris de Barcelona, en uno de los momentos de más tensión de esta noche en la capital catalana.
Algunos radicales encapuchados han arrancado sombrillas y han cruzado contenedores en la vía para levantar una barricada, a la que han prendido fuego en la calle Pau Claris, muy cerca de la plaza Urquinaona, donde centenares de manifestantes llevan horas concentrados, con momentos de tensión, ante un cordón de la Policía Nacional.
Tras encender pequeñas barricadas en la zona, un grupo de incontrolados ha originado un incendio de mayores dimensiones en plena calle Pau Claris, tras arrancar algunas sombrillas que han arrojado al fuego.
Paralelamente, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, no ha cogido el teléfono al presidente de la Generalitat, Quim Torra, que le ha llamado este sábado, y a través de un comunicado le ha dicho que “debe condenar rotundamente la violencia”, y reconocer el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Mossos, y solidarizarse con los policías heridos.
“El Gobierno de España siempre ha estado a favor de dialogar dentro de la ley. Primero Ley y luego diálogo”, ha sido la respuesta del Gobierno a la llamada de Torra, según han informado fuentes del Ejecutivo.
En este sentido, el Gobierno ha subrayado que para que el diálogo sea efectivo, Torra “debería reconocer a la otra parte de catalanes, que no son independentistas, y que le están reclamando reconstruir la convivencia dañada por el independentismo”.
Finalmente, el Gobierno reitera que “el problema de Cataluña no es la independencia, que no se producirá, porque no es legal, ni la quiere la mayoría de catalanes, sino la convivencia”.
El Ejecutivo en su respuesta dice que “su propuesta de referéndum no la quiere ni la mayoría de catalanes ni, al parecer, la mayoría de su propio Govern. Lo primero para restaurar la convivencia es condenar la violencia, algo que no ha hecho el señor Torra”.