El Tribunal Supremo de Australia absuelve al cardenal Pell y le pone en libertad
El Tribunal Supremo de Australia ha absuelto y puesto en libertad este martes al cardenal George Pell, quien cumplía una sentencia de seis años de prisión por abuso sexual de menores impuesta por un tribunal de Melbourne en 2018 y confirmada por un tribunal de apelación del estado de Victoria en 2019. El largo proceso comenzó en 2015.
La noticia ha sido recibida con alivio en el Vaticano, donde la Congregación para la Doctrina de la Fe se ha estado ocupando del caso «según los modos y los plazos establecidos por las normas canónicas», según un comunicado de febrero de 2019.
En la misa de las siete de la mañana en Casa Santa Marta, el Papa no ha citado el nombre del cardenal Pell, pero se ha referido implícitamente: «En estos días de Cuaresma hemos visto la persecución que sufrió Jesús y cómo los doctores de la ley se ensañaron contra él: fue juzgado con dureza, con saña, siendo inocente».
Francisco ha añadido: «Me gustaría rezar hoy por todas las personas que sufren un juicio injusto a causa de la persecución».
Según un comunicado de su Oficina de Prensa, «la Santa Sede, que siempre ha confiado en la autoridad judicial australiana, acoge con satisfacción la sentencia unánime dictada por el Tribunal Supremo en favor del Cardenal George Pell, que lo absuelve de las acusaciones de abuso a menores, revocando su condena».
El comunicado en español añade que «el Cardenal Pell -al someter su caso a la magistratura- defendió siempre su inocencia, atendiendo que la verdad fuera acertada» y reitera que «la Santa Sede se vale de esta ocasión para reafirmar su compromiso en la prevención y persecución de cualquier tipo de abuso a menores».
Los siete jueces del máximo tribunal australiano han considerado que, debido a la insuficiencia de pruebas, el jurado del primer tribunal en Melbourne no debía haberle declarado unánimemente culpable «más allá de toda duda razonable».
El cardenal australiano, ahora inocente y libre, ha manifestado que «no guardo rencor contra la persona que me ha acusado, y no deseo que mi absolución aumente el dolor y amargura que tantos sienten, pues ya hay bastante». Pell ha dado las gracias a todas las personas que le han ayudado con la oración, mensajes o manifestaciones de apoyo.
El arzobispo Mark Coleridge, presidente de la conferencia episcopal australiana, ha manifestado que el desenlace del caso «será bienvenido por muchos, incluidos quienes creyeron en la inocencia del cardenal durante este largo proceso. También nos damos cuenta de que la decisión será devastadora para otro. Muchas personas han sufrido mucho durante el proceso que ahora ha terminado». Coleridge ha reiterado el empeño de la Iglesia de Australia en erradicar los abusos de menores.
George Pell, antiguo arzobispo de Melbourne y de Sídney, fue durante cinco años secretaria de Economía del Vaticano y formó parte del grupo de nueve cardenales consejeros del Papa Francisco, reducido actualmente a seis.