El gobierno británico endurece su discurso y recomienda no viajar a ningún lugar de España
Inmediatamente después de que el gobierno de Boris Johnson anunciara de forma sorpresiva el pasado sábado su decisión de desaconsejar todos los viajes no esenciales a España continental, una recomendación de la que estaban exentas las islas, y estableciera la obligatoriedad de la cuarentena de 14 días para quienes ingresaran desde toda España, bajo riesgo de sanciones con multas de más de 1.000 libras (unos 1072 euros), el gobierno español se dio a la tarea de negociar que Canarias y Baleares quedaran fuera de la cuarentena. Sin embargo, y pese a que según la prensa británica ambos países están manteniendo negociaciones al respecto, el ejecutivo británico no solo no cedió, sino que endureció la norma este lunes, diciendo que recomienda no viajar a ninguna parte del territorio español, incluyendo las islas, destino favorito para millones de británicos que las visitan cada año.
Fuentes del gobierno confirmaron que no está previsto que las nuevas reglas vayan a relajarse en el corto plazo. La nueva decisión de Londres llegó después de que algunos medios indicaran que el ministro de Transporte, Grant Shapps, está dispuesto a eliminar la cuarentena obligatoria para quienes regresen al Reino Unido desde las islas Canarias y Baleares a partir de la próxima semana y que su intención es conseguir el establecimiento de un corredor aéreo, pero el ministro de Exteriores, Dominic Raab, entre otros, no estaba dispuesto a dar su brazo a torcer.
El propio Shapps tendrá que cumplir con el aislamiento, una vez que regrese el miércoles a territorio británico tras anunciar que decidió interrumpir sus vacaciones en España, adonde voló el sábado antes de que se hiciera pública la decisión. Shapps aseguró que «no se siente bien» de estar de vacaciones “cuando otros están interrumpiendo las suyas” debido al cambio, aunque su esposa e hijos continuarán en España. Shapps defendió ante los demás ministros que los casos de Covid-19 son mucho más bajos en los archipiélagos y que por tanto el establecimiento de un corredor aéreo debería ser una posibilidad. No obstante, aprovechando además su ausencia, Raab no solo defendió la necesidad de la cuarentena para evitar la propagación de la enfermedad, sino que además decidió comunicar que tampoco las islas son seguras para vacacionar en ellas. El ministerio de Exteriores aclaró, sin embargo, que “no recomienda acortar su viaje” a quienes ya están en territorio español.
El jefe de gabinete, Michael Gove, explicó que la decisión del sábado se tomó “basándonos en la evidencia”, y aunque se discutieron “diferentes opciones”, finalmente se acordó “por unanimidad” que era necesaria una “cuarentena completa y general”. Gove también canceló sus vacaciones, que pretendía pasar en Ibiza: “El hecho de que ahora tenga que alterar mis planes de vacaciones es irrelevante para esta decisión. Es un inconveniente para mí, pero eso no es nada en comparación con la importancia de priorizar la salud pública”, detalló.
El embajador del Reino Unido en España, Hugh Elliot, aseguró en declaraciones recogidas por la agencia Europa Press que «hoy por hoy» la cuarentena de 14 días afecta a todo el territorio nacional, de manera que no habrá ni corredores ni excepciones con las Islas Canarias y Baleares.
Miles de británicos que ya tenían contratadas sus vacaciones en las costas españolas, se han mostrado contrarios a la decisión del gobierno de Johnson y han criticado que la medida se tomara de un momento a otro.
(ABC)