Carta a la Policía
Parece que fue ayer cuando «Nosotros» nos enfrentamos a la turba que os quería echar de los hoteles catalanes como a perros y casi nos rompen la cara. Ayer, en Callao, nos la rompéis vosotros. Porque sois vosotros ¿no? ¿O es gente disfrazada de policías nacionales?
¿Sois vosotros los mismos a los que sólo «Nosotros» defendimos cuando os dejó tirados todo el mundo en Cataluña, empezando por el gobierno y siguiendo por los mismos mandos políticos que ahora os ordenan cercenar cualquier atisbo de disidencia, de protesta, de libertad? Porque es la libertad de pacífica manifestación lo que estáis reprimiendo con una audacia que ya nos gustaría ver contra los que insultan, agreden y quieren expulsar de Alsasua a vuestros compañeros de la Guardia Civil. Cómo nos gustaría ver esa audacia, ese celo en el cumplimiento del deber contra los okupas que dejan en el llanto y la desesperación a ciudadanos honrados, o contra los que agreden a pobres ancianos indefensos para robarles lo poco que tienen entre las manos. Nos gustaría ver que no nos equivocamos cuando «Nosotros», más allá del deber y de lo que aconsejaba la prudencia (porque también tenemos hijos) fuimos a defenderos allí donde ninguno de los que os dan las órdenes lo hicieron.
En Callao intentaron manifestarse unos españoles que disienten de la política liberticida y arruinadora orquestada al amparo de una pandemia de miedo alimentado por toda la clase política y los medios de comunicación. Como en las peores dictaduras, no pudieron hacerlo porque lo impedisteis vosotros con una saña completamente desproporcionada. La misma que no mostráis contra los que disientes de otras cuestiones. Porque seguís órdenes políticas y no el simple mandato de la ley. Y lo hacéis porque tenéis hijos y no podéis enfrentaros al poder mafioso que arruina vidas allí donde le estorban. Como nosotros también teníamos hijos cuando os defendimos. Y los tenemos ahora cuando salimos a defender la libertad frente a esas mismas bandas mafiosas que os pagan la nómina con nuestro dinero y a las que no podéis enfrentaros.
¿Tenéis órdenes? Nosotros no teníamos ni órdenes ni obligación cuando fuimos a defenderos., ni las tenemos ahora cuando salimos a defender la libertad y la prosperidad de todos, también de vosotros y de vuestros hijos.
En Callao estuvieron miembros de Nosotros. Viven en Madrid, son jóvenes, ilusionados, respetuosos. Y hoy están indignados por lo que vieron y vivieron allí. Pero, también, más decididos a luchar por la libertad que fuisteis a detener.
Hay una dictadura. Los controles democráticos como la oposición, la justicia, las fuerzas del orden, los medios de comunicación, los sindicatos, las asociaciones empresariales… todos sin excepción han sido neutralizados o se han sumado con entusiasmo al proceso totalitario en el que estamos ya hundidos hasta el cuello. Por eso lo que pasó ayer en Callao no es una anécdota sin importancia. Lo sería en condiciones de normalidad democrática. Hoy, sin embargo, es un signo de opresión que se va a convertir, lo vamos a convertir, en un símbolo de resistencia, de esperanza, de lucha por la libertad y los derechos humanos más elementales, esos con los que se les llena la boca a quienes ahora los pisotean con órdenes o con botas que se han vuelto contra el pueblo que los respeta.
Ayer vimos la infamia y la prepotencia de un régimen caído en el fango de la opresión. Pero también vimos el miedo. No el de los pobres ciudadanos asustados por la pandemia china, sino el de ese régimen tambaleante, sabedor de que todo depende de una gran farsa, que no se atreve a soltar las bridas ni los bozales para que no se conozca la verdad de lo que ha sucedido en nuestro pobre país en el que se ha dejado morir sin atender a nuestros mayores, primer puesto mundial en muertes/habitantes, en destrucción económica y, ahora, en destrucción democrática. Vimos miedo en vuestra desproporcionada, injusta y desagradecida agresión rodeados de gritos de ¡libertad! cuando os llevabais detenida a una pobre muchacha. Sí, las imágenes causan náuseas a cualquier ciudadano de bien.
Ahora sabemos que los dictadores, los que gobiernan y los que colaboran con ellos, tienen miedo. Y eso nos ha dado alas.
«Nosotros», como partido y como personas, vamos a impulsar todas las iniciativas que surjan en el seno de la sociedad española para detener esta deriva totalitaria que nos lleva a la ruina y a la tiranía de unas bandas políticas convertidas, sin excepción, en promotores de la farsa sobre la que se están destruyendo las conquistas democráticas que no estamos dispuestos a perder. Aquí encontrarán todos los que no han perdido el amor por la libertad su refugio, su voz y, llegado el caso, la misma presencia que tuvimos para defender a costa de nuestra integridad a los que ayer nos detuvieron por ejercer de ciudadanos libres y honrados.
Gracias por abrirnos con ingratitud y prepotencia los ojos para que viéramos con claridad el miedo de los tiranos a que hagamos lo que vamos a hacer: ser libres y luchar por la libertad. Ahora más que nunca.
* Presidente Nacional de Nosotros – Partido de la Regeneración Social