¡Triste España! El fin de un mundo
LTY/R.- “Un mundo descompuesto, tambaleándose y hundiéndose como el viejo mundo romano cuando la medida de la iniquidades fue colmada; los abismos, los diluvios superiores y subterráneos reventando por todas partes, y en ese caos furioso de claridades macilentas, todas las estrellas del firmamento borradas. Apenas una estrella en el cielo que el ojo humano pueda ahora divisar. Las nieblas pestilenciales, las impuras exhalaciones vueltas incesantes, excepto sobre las más altas cumbres, han apagado todas las luces del firmamento. Unos fuegos fatuos que corren aquí y allá han tomado el lugar de las estrellas. Sobre el páramo salvaje del caos, en el aire plomizo, ya no hay más que los resplandores bruscos de rayos revolucionarios; y después nada más que tinieblas, con las fosforecencias de la filantropía -ese vano meteoro.” (“Historia de la Revolución Francesa”, 1837, Thomas Carlyle).
Así habla el historiador británico Carlyle, intentando pintar el fin de un mundo en el que todos los elementos del Pasado están en disolución, sin que nada aparezca de lo que constituirá el Porvenir, sin que un Monte Ararat eleve una cima verdeante por encima del diluvio universal.
Todos los pensadores han sentido esa impresión del caos y del universal desorden cuando se han esforzado en analizar las fases que atraviesa una sociedad que cae en delicuescencia. Para saber bien qué condiciones son necesarias para que viva una Patria, hay que observar atentamente cómo muere un mundo que ha formado poco a poco en esa Patria como una aglomaración de bacilos, de qué manera ha dejado instalarse el mal en su interior.
Nada hay más instructivo como la búsqueda del origen primero de las enfermedades que, lentamente pero con seguridad, usan, degradan y arruinan poco a poco el organismo. El término de muerte súbita no significa nada, e ignoramos demasiado a menudo las elaboraciones enormes que son necesarias para generar eso que llamamos una catástrofe repentina. La descomposición se desarrolla progresivamente, pero sin prisa, y en la sociedad, confederación de hombres así como el hombre es una confederación de tejidos, los inicios del mal son siempre lejanos, desconocidos y oscuros. Caemos por el lado del que nos inclinamos: esa es la ley. Primero es algo insignificante, una perturbación casi insensible, un grano de arena en el engranaje, después el desorden parcial, y por fin los resortes rotos y la parada definitiva.
Por lo demás, los hombres y las sociedades no mueren de la misma manera. El cuerpo humano se apaga y se descompone después. En cambio, en las sociedades la corrupción precede a la muerte, la descomposición llega antes la parada definitiva.
A veces el cadáver social continúa caminando sin que nos percatemos de que ya es cadáver, hasta el día en que el más ligero golpe rompe esa supervivencia ficticia y muestra la ceniza en lugar de la sangre. La unión de los hombres crea la mentira y la entretiene: una sociedad puede esconder durante tiempo sus lesiones y enmascarar su agonía, hasta hacer creer que está viva cuando está muerta y sólo queda ya inhumarla. Las sociedades, por otra parte, no mueren todas de la misma manera. Algunas veces, los pueblos se apagan en una agonía insensible que gustan como un descanso dulce y agradable; algunas veces perecen en medio de fiestas, cantando himnos de victoria y creyéndose inmortales.
España, en lugar de resignarse, o mejor aun de recogerse (de entrar en sí misma), de tratar de sanar, ya que Dios, nos dice la Escritura, ha hecho las naciones sanables, parece querer terminar en el apoteosis teatral: magnifica su decadencia con una ostentación vanidosa, una desfachatez charlatanesca y delirante que no tenía en los días felices de su fuerza y su esplendor.
Recibimos afrenta tras afrenta. Marruecos nos humilla a placer y escupe sin cesar en nuestra dirección, Francia y Alemania nos dan coces a diario, Europa se reparte los despojos de nuestra perdida jerarquía, la invasión está a nuestras puertas (¡qué digo, la tenemos en casa, tomando posesión de lo que ya considera suyo!), la bancarrota se va a instalar en nuestro hogar, el país se va en pedazos, las fábricas cierran, nuestra agricultura amenaza ruina, nuestros industriales ven progresivamente todos los mercados del mundo escapárseles…, y en cualquier ciudad española ya están echados los cimientos de Chinatown, Soweto, la cashbah de Tánger o los suburbios de Tombuctú, ghettos y pudrideros étnicos y raciales, mafias de todo color y pelaje, y pronto los campamentos de chapa y cartón del Tercer Mundo, la confusión y la discordia, el salvajismo y la barbarie, la vida ruin y la cloaca universal.
Nosotros, sufridos y dolientes hijos de España, quisiéramos que nuestra Madre tuviera al menos una actitud digna ante estas adversidades. Los vendepatrias cosmopolitas, los agentes del Nuevo Orden Internacional, los servidores de todo lo ajeno, los paniaguados a sueldo del enemigo, los adalides de la antiEspaña que se han sustituido a nosotros no lo entienden de esa manera.
Están empeñados en que España se cubra de ridículo ante el universo: esta nación tan cruelmente humillada, debe ser grotesca por añadidura, y que declare, ante la rechifla de todos los que aún no están cegados por la ideología y la propaganda del régimen imperante, que nunca fue tan grande, tan potente, tan impresionante y tan rica: un modelo para el mundo y un hito para la Historia.
Ese vanidoso delirio, al cual sigue a veces el coma, es una de las formas históricas de la agonía de las sociedades. La España actual, tan fina y perspicaz antaño, parece no darse cuenta de lo que hay de increiblemente burlesco en el espectáculo de un país librado a los elementos más ineptos e inmorales de la sociedad, unas nulidades incapacitades para la obra positiva, y en la representación grotesca del continuo homenaje a los más esperpénticos personajillos de las “élites” actuales entregadas con un imbécil entusiasmo al rechazo de toda excelencia y al abrazo de todo lo inferior, en medio de la indiferencia y la pasividad de la mayoría durmiente o bostezante. Esto corresponde a un estado de espíritu general, a un acuerdo tácito, a una suerte de resolución inconciente de no razonar para no entristecerse, para no estar obligado a hacer un esfuerzo.
En el aspecto cultural, esta época legará al Porvenir documentos inestimables acerca del periodo de locura declamatoria y blasfematoria que atraviesan algunos pueblos antes de desaparecer. Con su estúpida cara de cretino integral, Sánchez es el icono perdurable de este tiempo. Si cada época puede identificarse con un rostro, nunca uno como este hablará, sin necesidad de palabras, acerca de estos años, con mayor acierto y elocuencia… Ha sido el hombre de estas pompas, estas pompas fúnebres: ha enterrado a España, envuelta en un trapo remendado, en el ofensivo cacareo de esa fraseología propia de la especie zapateril, y todos nuestros enemigos saquearán al unísono los despojos de nuestra sagrada Patria y seguiremos oyendo en el aire, por encima de los lamentos de un pueblo traicionado y vendido a las alimañas, los ecos de los rimbombantes discursos, los estribillos de esa grandilocuente oratoria de innegable sello masónico que todavía resuena en la atmósfera cargada de los putrefactos olores de la descomposición: la Fraternidad de los Pueblos, la Alianza de Civilizaciones, la Jerusalén Terrenal, la Paz Perpetua, la Nueva España del Patriotismo Constitucional y del Pluralismo étnico-cultural, la Meca del Buen Rollo, Shangri-Lá en Primavera…
En medio de las fanfarias y los fuegos de artificio de una época indigna celebrada como el alba de un Nuevo Sinaí, un rebaño desnortado y balante que corre a su perdición está llevando a cabo una obra de destrucción largamente esperada y pacientemente planificada por los amos del momento. La marea de aguas corrompidas que amenaza con anegar la casa de este desventurado pueblo dejará la tierra envenenada y estéril durante mucho tiempo. Bajo un cielo mortecino languidecerá un mundo roto y disperso, sin rumbo ni destino.
El reino de la inferioridad, el triunfo de la mediocridad al que hoy asistimos no será sin embargo eterno. A fuerza de correr hacia el abismo, llegaremos pronto a él. La caída no es dudosa. Vendrán otros hombres y harán otra historia. A esa muerte inevitable sucederá otra vida no menos segura. Y algún día, cuando la naturaleza inmutable de las cosas, que aguanta cualquier violencia con la impasibilidad de lo eterno, haya vuelto a poner orden en este desconcierto y justicia entre tanta iniquidad, las generaciones futuras se asomarán a esta época terminal y se preguntarán, entre el asombro y la reprobación, por los motivos de esta despreciable decadencia, esta deshonrosa claudicación que transformó sin remedio, entre la aprobación de unos, el rechazo de otros y la impotencia de todos, una nación vertical en un teatro de guiñol. ¿Cómo fue posible tan poco respeto por los muertos y tan poca inteligencia entre los vivos? Si nuestros antepasados levantaran la cabeza, no quisieran quedarse ni un minuto entre tanta negación y renuncia. El asco por la vileza y la nulidad de sus descendientes no sería superado por el horror de la victoria enemiga.
Pero no debemos entristecernos cuando hablamos de los desaparecidos. En el fondo ellos han sido afortunados por haberse ido a tiempo. Ellos no verán lo que nosotros si veremos: el estado más y más miserable en el que caerá esta España que fuera tan grande, tan noble y tan generosa. ¡Triste España! Haber subido tan alto entre las naciones con el sólo impulso del esfuerzo y el valor de los hijos de una estirpe irrepetible, ahora echada a los cerdos en un inmundo cenagal de traición, y caer víctima de una conspiración de polichinelas, recibir todos los agravios y las injurias y no poder responderlos, perder cada día algún resto de su gloria pasada y escuchar aún, de manera sombría y desencantada las palabras de los demagogos, de los cínicos, de los podridos, de los cabrones hijos de la gran puta que nos mentirán hasta el último minuto.
¿Por qué esta caída? ¿Qué causa dominante asignará la Historia a este fin que parece inevitable? Una desviación del sentido del Ideal, un mal camino emprendido en algún momento, una senda errada en la que nos hemos obstinado aun después de no haber hallado en ella más que desilusiones, catástrofes y vergüenza… ¡Qué miseria! ¡Líbranos Señor de esta penosa agonía! ¡Miserere mei, Domine!
Brillante artículo que refleja la situación de España, la cual -tal como señalan algunos comentarios- no es un caso particular, aunque a nosotros nos toca vivirla en primera persona. ¿El motivo de esta caída en el abismo? Sin duda, la respuesta figura también en varios comentarios: “nuestro alejamiento de Dios y abandono del mensaje cristiano”. Todo ello provocado por el predominio de la influencia de una de esas dos fuerzas a las que alude Goethe. Mirado desde una perspectiva cristiano-católica, esa fuerza crecientemente dominante ejerce un efectivo poder coactivo sobre las personas, a las que seduce y tienta a través de… Leer más »
Solve, et coagula. Disolver todo primero, para que solidifique más tarde. Este proceso es terrible. Los metales se fraguan gracias los terribles martillazos del herrero. Así serán fundidas, y solificadas después, las sociedades occidentales, a golpes. El objetivo es transmutar casi todas las magnitudes que dotan de sentido la sociedad actual. Su dureza (valores cristianos), su densidad (calidad de sus valores morales), su coducción térmica (capacidad de cambio moral), su pureza (respeto a los ancestros y oposición a la multiculturalidad globalista), y sobre todo su forma (humanidad) y maleabilidad, van a ser modificados drásticamente a voluntad del más nigromante de… Leer más »
Un alquimista…ni siquiera un demiurgo en su inconsciencia puede imaginar que es posible fundir y moldear “a martillazos” al cristianismo.que ha demostrado su resistencia, que es divina, a lo largo de más de dos mil años. Son “ellos” los que han pasado, los que han desaparecido como se ha evidenciado en su diversos, pero fallidos, intentos .”El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán (Mateo 24, 36) Palabras de Jesús. Lo dicho : Que el cristianismo tiene una fuerza que es sobrenatural porque desciende del cielo y que en su soberbia no calibran adecuadamente todos estos patéticos… Leer más »
Las palabras de Jesús no pasarán, pero la iglesia fundada en su nombre sí, y las enseñanzas cristianas querrán ser erradicadas por los gobiernos. Se censurarán y se perseguirá al creyente. Muy pocos serán los encargados de mantener la llama encendida. No es un futuro distópico, es China 2020. Ese gobierno globalista chino se extiende ya por todo el mundo. Mi opinión es esta: Los tiranos y malvados nunca van a sufrir ningún castigo divino. ¿Derrotó Jesús a los Fariseos, a los Romanos, o a Herodes Antipas?. Los amos del mundo harán y desharán a voluntad, siempre. Serán encumbrados y… Leer más »
Esto es lo que dice el Evangeliio: “YYo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia y las puertas del infierno no prevqlecerán contra ella” (Mateo 16, 18) “Y he aquí que Yo estoy con vosotros todos los días, hastael fin del mundo”(Mateo 28, 20) “Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy Yo en medio de ellos.”(Mateo 18, 20) Jesús venció al mundo con la Verdad. Realidad sólo hay una : Dios. Nosotros vamos camino a la Realidad, a Dios. Me parece una desmesura inconmensurable , valga… Leer más »
Sabias Palabras las suyas. Gracias por escribirlas. Me reafirmo en sus acertadas expresiones: El mal es la ausencia del bien. Luego el mal, en sí, no existe. El frío no existe, existe la falta de calor. El frío es una percepción humana y temporal. Dios existe plenamente, y no vive en lo se reduce hacia lo inexistente. Lo inexistente es el mal. Si Dios fuera el agua (y lo es físicamente hasta un punto muy literal), la sequedad sería el infierno y el mal. El agua busca lo seco como el amor lo odioso. Me refiero al auténtico amor. Querer… Leer más »
Los rayos del sol cada día iluminan y calientan la tierra, en la que, húmeda por el rocío nocturno, brotarán multitud de plantas cubiertas de flores que atraerán miles de mariposas y de abejas que diseminarán la vegetación hasta cubrir el mundo, y crecerán frondosos árboles que nos darán su sombre cuando su fuerza arrecie Esto y todo lo demás que está en la Creación, Dios, con Su Amor lo mantiene continuamente, Es como dijo San Juan de la Cruz. “ Mil gracias derramando pasó por stos sotos con prsira y yéndolos mirando con sólo Su Figura Vestidos los dejó de Su… Leer más »
Las fosas de la democracia en Mequinenza, Aragón. Más de 100 cadáveres a orillas del Ebro. Probablemente en la mina local hoy convertida parte en museo. Ver canal Santiago Royuela Samit.
Se puede llamar el Réquiem por una Patria, muy buen articulo estoy de acuerdo porque así lo siento.
Mi madre, en su lecho de muerte (falleció hace pocos años) hizo el diagnóstico más breve y certero que he oído: “Todo esto nos pasa por habernos alejado de Dios”.
Basura… y nada más que basura….
Y el único cretino es ese idiota Conspiranoia que cagó esa mierda de artículo. ..
H.de P.
Ya verá el rey mono, si le da tiempo, claro, cuando la basura se lo trague a él también. Llorará como un mono, que seguro que será muy parecido a ese animal, de ahí el nombrecito que se pone.
De todas formas, estoy seguro que a mediano plazo cuando las cosas se calienten bastante más, toda esa gente va a recibir ostias hasta en la partida de nacimiento (ostias sin h, para no confundirla con la consagrada).
Un mundo sin patria, sin raza, sin comunidad nacional. Un mundo en el que sólo eres una pieza tratando de sobrevivir en el materialismo y egoísmo más absolutos. Miseria económica y moral. La soledad más cruel dentro de la masa.
Es interesante ver que lo mismo que pasa en Espana, pasa en los demas paises del mundo. El NOM esta iteresado en acavbar co las culturas, soberanias, religiones, para amalgamar a todos en una sola sub-cultura, y una sola sub-religion, un solo mundo esclavizado y doliente, al servicio del NOM
Se acabaron las religiones
Se acabaron las derechas-izquierdas
Ahora lo que hay es: Amos y Esclavos
Es “trending topic”…
del mundo no ,en Europa y usa
Los cristianos se persiguen en todas partes. Sirva de ejemplo Nigera, o Irak, o la república china. La obsesión del NOM es acabar con el cristianismo en el mundo entero.Porque el cristianismo es dignidad, es respeto, es la verdadera defensa del ser humano en su integridad..Es lo que ha impregnado la cultura, la justicia, la vida social y personal de los valores que lo informan y por los que sus creyentes tanta gloria han dado a la civilización y por ende a la Humanidad..Hay que luchar por ellos.Dios lo quiere.
“¿Por qué esta caída? ¿Qué causa dominante asignará la historia a este fin que parece inevitable?” La misma de siempre. “Dos fuerzas se disputan mi alma”, decía el gran Goethe. La ascendente o de la cultura que, venerando el pasado aspira a un ideal -y que exige disciplina, orden, tensión del espíritu y alerta permanente. Y la descendente o de la disipación que vive exclusivamente en y para el presente y no requiere sino el abandono a la auto-indulgencia y el placer. Y como nos advertía un gran patriota español (José Antonio), ni siquiera las pequeñas cosas buenas de la… Leer más »
Yo me muestro optimista respecto al futuro, porque la semillita ya está plantada a los pies del Monte Olimpo. Es la semilla de la cual germinará el nuevo amanecer dorado de Europa, su raza y su cultura.
Y, por cierto, de una semilla pueden surgir varias plantas. ¿Sabíais que de un solo grano de trigo pueden nacer hasta diez espigas? Pues eso.
AIMA, TIMH, XPY?H AY?H!
Sí, una espiguita negra, otra mora, otra turca, … etc.
Y a ti, cabricano, un buen pollazo en tu orto es lo que te vendría bien. Notas, que eres un notas.
Es mejor que muera este mundo de polichinelas,de mediosimios,de titeres sin cabeza,de hombrecillos y mujercillas,sin merito ni valor alguno,de engendros robotizados,pues de humanos y de humanidad,ya no tienen nada,solo son formas antropomorfas negativas,por ello es mejor que “este mundo” llegue a su fin,acabe. De su fin,emergera un mundo,que debe ser y sera humano,una humanidad real,vivible para los hombres,no para viles homunculos como lo es en la actualidad. En el fin de este mundo,sus fundadores,moriran envenenados por su propio veneno y se cortaran sus gargantas asimismos,con sus afiladas lenguas,que haran de afiladas dagas. La nueva humanidad y la nueva España,despreciara profundamente… Leer más »
Amén, hermano. Esto no merece ser salvado. Hay que empezar desde 0.
Asi sea, solo de esa manera este mundo podra ser recuperado, podra ser un ligar digno en el cual vivir.