A pocas horas del cierre de la campaña electoral en Madrid, una nueva polémica afecta de lleno a las filas de Unidas Podemos, después de que este sábado se diese a conocer que al menos uno escolta de Pablo Iglesias ha sido detenido por agredir a la Policía en el acto que Vox celebró en el barrio madrileño de Vallecas. También se ha dado a conocer que otro de los detenidos tiene un vínculo familiar con una persona de máxima confianza del que fuese vicepresidente del Gobierno hasta hace unas semanas.

La presencia del partido de Santiago Abascal en la Plaza Roja de Vallecas marcó un antes y un después en la campaña electoral madrileña, después de que el acto político quedará relegado a un segundo plano por los diferentes conatos de violencia que grupos de extrema izquierda protagonizaron contra el dispositivo policial allí desplegado. A pesar de que se produjeron pocas detenciones en aquel momento, las imágenes registradas permitieron a las autoridades policiales crear una línea de investigación que permitió poner a los autores de estos ataques a disposición de la justicia.

En este sentido, este mismo sábado se ha dado a conocer que el escolta de Iglesias estuvo involucrado en estas agresiones a los agentes de seguridad. La Policía ha detenido a un hombre que pertenece al núcleo personal de seguridad de Pablo Iglesias. Otro de los detenidos es Daniel, hermano de El Pícaras, uno de los líderes de Bukaneros y un hombre de máxima confianza de Iglesias, pero sobre este último no hay constancia de que trabajase como escolta del líder de Unidas Podemos.

El silencio de Iglesias durante la campaña

Sobre este asunto, Iglesias ha guardado silencio y ha sido este sábado, durante la manifestación del Día del Trabajador en la Puerta del Sol, cuando ha reconocido que se habían producido estas detenciones, en concreto el candidato de Podemos ha señalado que se trata de una persona contratada por el partido, y ha defendido que “el hecho de que esto salga hoy revela la preocupación que tienen algunos”.

El acto en Vallecas se produjo a comienzos de este mes de abril y las detenciones tuvieron lugar el pasado 15 de abril. Durante toda la precampaña y campaña, desde Podemos no se ha hecho ninguna referencia a que una o varias personas de su entorno estaban involucradas en detenciones por los actos violentos en el mitin de Vox en Vallecas. En contra posición, el discurso del líder de Podemos se ha centrado en denunciar la provocación que, a su juicio, supuso la presencia de Abascal y Rocío Monasterio en este barrio madrileño, para después centrarse en denunciar las amenazas que él mismo y otros miembros del Gobierno han recibido esta semana.

Desde la formación morada, según explica ‘ABC’, se defiende que esta persona no pertenecía al núcleo de seguridad de Pablo Iglesias, y que se trata de una figura que se encarga de labores logísticas. En concreto, conducir la furgoneta que utilizan los líderes del partido y prestar otros servicios para el equipo de dirigentes. Desde Podemos se defiende que ha sido identificado como escolta de Iglesias porque también realiza el control de acreditaciones en la sede del partido. “No fue allí como militante de Podemos, sino como vecino de Vallecas”, explican fuentes del partido morado. Los detenidos están acusados de un delito de atentado a la autoridad, ya que las cámaras registraron la participación en los incidentes.

El dispositivo oficial que realiza la escolta de Iglesias está cubierto por policías y guardias civiles, pero además cuenta con un dispositivo complementarios organizado desde Unidas Podemos, en el que participan personas asalariadas por el partido y que son expertos en la protección de personalidades relevantes. Aquí es importante destacar que este dispositivo propio fue ampliado durante las manifestaciones que se realizaron en las inmediaciones del chalé de Galapagar en la primavera del pasado año.

Este domingo, el diario ‘El Mundo’ explica que desde el Ministerio del Interior se decidió mantener silencio sobre estas detenciones, al mismo tiempo que se denunciaban las amenazas a través de cartas que han recibido los miembros del Gobierno y Pablo Iglesias en las últimas jornadas. Desde el entorno policial preocupa el silencio que se ha producido respecto a estas detenciones en comparación con el esfuerzo que desde el Gobierno se ha hecho para destacar las amenazas que han sido detectadas en las últimas jornadas.

Denuncias desde los partidos de la oposición

Las reacciones no se han hecho esperar, desde Vox se ha pedido la dimisión de Grande-Marlaska y también del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En un mensaje de Twitter, ha acusado a Iglesias de “enviar” al acto “a sus matones a sueldo para atacar a la Policía”.

Por su parte, Pablo Casado ha pedido a Sánchez que haga una condena rotunda de lo sucedido: “Qué vergüenza. Los que se juegan la vida por nosotros pateados por los matones de Pablo Iglesias. No solo le pagamos a la niñera, sino a escoltas que patean a la Policía. Ya está bien”.

Por último, desde Ciudadanos han solicitado a Iglesias que condene públicamente las agresiones de los detenidos a los agentes. “Condenamos la agresión de los dos miembros de Podemos a los policías, y exigimos a Iglesias que condene esta agresión y que dejen de soñar porque no van a trasladar a la Comunidad de Madrid ese modelo de enfrentamiento”, ha señalado Inés Arrimadas en un acto electoral.