Las políticas de encierro de COVID-19 han causado un daño social que pocos son capaces de comprender. Los jóvenes, que han sido aislados de sus círculos sociales y obligados a soportar indignidades insondables, son posiblemente los que más están sufriendo, y su fibra moral está disminuyendo como resultado.

Según el Wall Street Journal, los adolescentes están recurriendo a la objetivación sexual para encontrar gratificación durante los bloqueos. La aplicación de seguridad en línea Bark descubrió que el volumen diario de media de los mensajes de texto de los niños con contenido sexual ha aumentado un 37% desde antes de la pandemia.

Un meta-análisis realizado en 2019 en la revista JAMA Pediatrics mostró que 1 de cada 7 adolescentes ha enviado mensajes de texto sexuales y fotos de sus partes del cuerpo desnudas, 1 de cada 4 adolescentes ha recibido estos mensajes de texto sexuales, y 1 de cada 8 adolescentes ha reenviado estos mensajes de texto sexuales sin informar a la persona que los envió.

Big League Politics ha informado de cómo los proveedores de redes sociales y los medios de comunicación animaron a los menores de edad a crear pornografía infantil durante el apogeo de la pandemia en 2020:

«El Centro Nacional de Explotación Sexual (NCSE) está poniendo en el punto de mira a Snapchat y Teen Vogue por supuestamente animar a los niños a hacer pornografía durante la pandemia de coronavirus.

El centro imploró a Snapchat y a Teen Vogue que se abstengan de alentar a los adolescentes «a crear material de abuso sexual infantil (pornografía infantil) mediante el envío de mensajes sexuales durante la cuarentena». Le dicen a Snapchat que deje de presentar contenido de Teen Vogue, una publicación que ha promovido el sexo anal y el comunismo totalitario a los niños en el pasado.

«Snapchat y Teen Vogue están haciendo el juego a los depredadores sexuales», dijo la directora ejecutiva de NCSE, Dawn Hawkins.

«Con el probable aumento de espectadores jóvenes en Snapchat debido a la cuarentena, es socialmente irresponsable que Snapchat Discover anime a los menores a autoproducir pornografía de menores (es decir, materiales de abuso sexual infantil), aumentando así su vulnerabilidad ante los depredadores sexuales», añadió.

La NCSE cree que instruir a los niños para que creen y distribuyan material sexualmente obsceno es un error en todos los casos.

«Los depredadores en línea utilizan las plataformas de medios sociales para hacerse pasar por compañeros y preparar a los niños para que les envíen material sexualmente explícito (es decir, “sext” con ellos) que luego pueden distribuir y/o utilizar para chantajear al niño con otras formas de explotación sexual», dijo el NCSE.

«Lo que Teen Vogue está haciendo al promover el sexting a los adolescentes es insidioso y dañino», dijo Hawkins a la Daily Caller News Foundation.

Algunos de los contenidos censurables que Teen Vogue ha publicado para los niños son: «How To Sext: Los mejores consejos y trucos», «Aquí hay 7 cosas que quizá no sabías sobre el sexting» y «El sexting debería hacerte sentir bien». Han promovido constantemente el sexting entre los niños durante toda la pandemia de coronavirus.

«Teniendo en cuenta lo que sabemos sobre el desarrollo del cerebro de los adolescentes, está claro que hablar de «la importancia del consentimiento» mientras se promueve el sexting para los menores no protege a esos menores de los peligros del sexting, incluso del sexting coaccionado. En general, la ley no reconoce la capacidad de consentimiento de los menores», dijo Hawkins.

Hawkins dejó claro que cualquier tipo de sexting que involucre a niños es siempre inaceptable, incluso cuando se trata de dos niños que comparten fotos pornográficas entre sí sin que haya adultos involucrados».

Estados Unidos se está deslizando hacia Gomorra, y la generalización de la sexualidad infantil y la pedofilia son una gran parte de esta marcha nacional hacia el Hades. Si los cristianos no se levantan para derrotar esta plaga LGBT, perderán todo lo que aprecian.