El paso de la pandemia no solo ha modificado los planes de millones de personas, sino que también ha obligado a muchos sectores del entretenimiento a actualizarse a una versión 2.0. En esa dirección, muchos desarrollos técnicos han tenido lugar en este tiempo, abriendo una nueva era para pensar la vida nocturna y el ocio. Desde bares, recitales, casinos y salas de juegos y mucho más han adelantado su actualización al siglo XXI.

Si bien la pandemia de Coronavirus aún no ha terminado, es momento de comenzar algunas primeras conclusiones de lo que ha sucedido para empezar a mirar hacia el futuro de una buena vez por todas. Mientras los planes de vacunación en España y en gran parte del mundo avanzan a paso firme, un horizonte hacia algo parecido a la normalidad comienza a asomarse, por lo que es el tiempo indicado para sacar los primeros balances y barajar de cara a lo que vendrá, sobre todo dentro del sector económico, el cual aún acusa el recibo de una crisis sin precedentes en este mundo globalizado en el que vivimos en la actualidad.

En esa misma dirección, muchos sectores de productos y servicios se han visto forzados a reinventarse en este contexto, sobre todo aquellos vinculados al entretenimiento y a la nocturnidad. Sin ir más lejos, tras 15 meses de cierre, muchas ciudades españolas han reabierto sus discotecas y bares. ¿Cómo se reinventaron en todo este tiempo? Muchas grandes firmas ofrecieron sets de DJ vía streaming, acompañados de un delivery de bebidas para recrear el ambiente de la pista de baile en las salas de estar. Lo que se pensaba como una medida transitoria, terminó siendo un éxito comercial y no se descarta que esta modalidad sobreviva a pesar de la reapertura de los establecimientos.

Algo similar ha ocurrido con los casinos, los cuales también fueron de los primeros locales en cerrar con la llegada del Covid-19. Sin embargo, al contrario de lo que sucedía con las discotecas, sí había una costumbre mucho más fuerte dentro del sector online. Sin ir más lejos, el sector de los casinos online es una de las industrias más pujantes dentro de lo que es el entretenimiento en línea, con años de sostenido crecimiento de usuarios y de facturación.

Ahora bien, eso no los salvó del huracán del Coronavirus, ya que también tuvieron que buscar nuevas estrategias para seducir y fidelizar clientes. Entre marcas que daban sus primeros pasos en internet y las firmas más reconocidas del sector, el usuario se encontró con una gran vastedad de oportunidades para vivir lo mejor de la adrenalina de las apuestas y la diversión que cada juego conlleva dentro de sí mismo. En esa misma línea, las facilidades en los sistemas de pago y en los sistemas de cobro también han sido un gran acercador de clientes para el sector del juego y las apuestas deportivas.

Dentro del sector cultural, uno de los casos más notorios es el de los recitales en vivo. Atrás quedaron los viejos eventos multitudinarios donde se podía ver a un mar de gente bailando y saltando mientras una banda sonaba en vivo. Esta industria multimillonaria ha buceado por diversas estrategias para no perder terreno: el primer caso es, claro el de los shows vía streaming, en donde se armaron propuestas multimedia más que interesantes, generando al mismo tiempo un tono de intimidad entre las estrellas musicales y su público. Muchos asistentes han marcado que estas experiencias han sido de las mejores dentro de la pandemia.

En segundo lugar, la industria musical también probó nuevas variantes al hacer recitales con aforo reducido y un sistema de burbujas que permita al espectador rodearse únicamente de un grupo reducido de personas –preferentemente de su círculo de confianza-, lo cual también dio buenos resultados y generó que bandas acostumbradas a recitales más eléctricos se pasaran a un sonido más lento y relajado, sorprendiendo tanto a sus seguidores como a la crítica musical y alcanzando resultados más que sorprendentes. Después de todo, como reza el proverbio chino: toda crisis representa una oportunidad.

El teatro debió afrontar una postura bastante similar y con menos recursos, por lo que tanto las grandes salas como los circuitos alternativos también volcaron sus propuestas a plataformas en línea, con la intención de recrear la experiencia del teatro en casa. Con resultados disímiles, el sector pudo dar cuenta del talento de sus protagonistas, al mismo tiempo que muchos escritores e intérpretes pudieron dar cuenta de su poder de adaptación al crear obras pensadas de manera 100% digital, adaptándose a la coyuntura y brindándole compañía a esas personas que pasan gran parte de sus noches en la oscuridad de una sala.

Por último, la industria de las películas también debió barajar y dar de nuevo. Mientras que algunas grandes cadenas decidieron retrasar estrenos, otras apostaron a lanzar sus contenidos en las plataformas de streaming, como es el caso de Disney con su reciente Disney Plus. Por otro lado, muchos títulos esperados de películas y series debieron posponer sus filmaciones debido a la falta de protocolos existentes en su momento. Sin embargo, este sector fue uno de los primeros en poder volver al ruedo, prometiendo un 2022 lleno de grandes estrenos para toda clase de pantalla, tanto para la sala de cine como para un smartphone.