Francisco Pardo, el segundo por la izquierda, el pasado lunes en Santander. Gobierno de Cantabria

Lo cuenta el periodista de El Español Alberto Morlanes. El director general de la Policía Nacional, el castellano-manchego Francisco Pardo, se llevó un susto el pasado lunes en Santander al ir a acariciar a un perro policía. Todo ocurrió en las instalaciones centrales de la Policía Nacional en Cantabria, ubicadas en el barrio santanderino de La Albericia, justo antes de comenzar el acto de toma de posesión de la nueva jefa superior de los policías cántabros, Carmen Martínez Ruiz.

Pardo, político socialista natural de Albacete que está al frente de la Policía Nacional desde 2018, quiso tener un gesto cariñoso con uno de los canes entrenados por los agentes, en concreto un ejemplar de raza pastor belga malinois, muy utilizada por las fuerzas de seguridad en toda Europa. Al querer acariciar al animal, el máximo dirigente policial se llevó un mordisco en la mano.

Según han explicado fuentes cercanas, el director general de la Policía Nacional no tuvo que ser trasladado a centro sanitario alguno puesto que en la propia Jefatura Superior de Cantabria personal cualificado le desinfectó la zona afectada por el bocado, le aplicó una crema antibiótica y le cubrió con un apósito la herida provocada por la mordedura, que no fue profunda y solo le dejó marcados los colmillos del can en la parte más carnosa de la mano.

Por lo que se refiere al perro, felizmente, el perro no sufrió daño alguno.