Un británico recupera su dentadura 11 años después de perderla durante una fiesta en España
Paul Bishop, un turista británico, recuperó a principios de febrero su dentadura postiza, perdida en el 2011 durante unas vacaciones.
El hombre de 63 años se sorprendió al recibir un paquete con su dentadura postiza, que finalmente fue encontrada en un vertedero en España, informó RT.
Las autoridades españolas pudieron rastrear el ADN del hombre, hallado en la prótesis, y se la enviaron al Gran Mánchester junto con una carta en la que le explicaban cómo la recuperaron.
Tras ser descubierta, la dentadura fue enviada a un almacén, ya que estaba clasificada como parte del cuerpo, y las autoridades españolas no permitieron su destrucción.
Al final, hace unos meses un técnico de laboratorio se topó con el objeto y pudo identificar a su propietario mediante el ADN.
Según Bishop, perdió su dentadura postiza mientras estaba de vacaciones en Benidorm, cuando salió a beber con sus amigos.
El hombre acabó vomitando en un gran contenedor de basura, tras lo cual se dirigió al bar, donde alguien le avisó de que le faltaban los dientes. El sujeto y sus amigos trataron de recuperar la dentadura, pero sus intentos fueron infructuosos.
El ciudadano británico estaba registrado en las bases de datos europeas de ADN y eso permitió cotejar la dirección para, al fin, devolverle la dentadura a su propietario.
«Hace quince años la policía me llamó a declarar en el marco de una investigación y me tomaron muestras de ADN», explica para justificar su presencia en esa base de datos. Según los medios británicos, Bishop pudo demostrar que no tenía nada que ver con los hechos que investigaba la policía en aquel momento.
Tantos años después, «cuando recibí el paquete por correo, pensé que alguien me estaba gastando una broma. Me parece increíble que la dentadura haya pasado de la basura a las autoridades, que hayan rastreado mi ADN y mi dirección en los registros británicos y me la hayan enviado.
Luego he sabido que, según la legislación española, una dentadura está considerada como restos humanos y, por lo tanto, no puede ser destruida», asegura.