Doctor Robert Malone: “Las vacunas contra el COVID-19 podrían estar reforzando la propia enfermedad”
Las vacunas contra la COVID-19 podrían estar provocando un refuerzo de la enfermedad en sí porque atacan a una versión anterior del coronavirus, según ha dicho recientemente el doctor Robert Malone.
“Los datos muestran que la vacunación en realidad puede aumentar el riesgo de infectarse con la versión ómicron de este virus”, manifestó Malone a The Epoch Times en una entrevista.
Malone se refería a cómo en algunas áreas, incluidas Escocia y Nueva Zelanda, es más probable que los pacientes hospitalizados con COVID-19 hayan recibido una vacuna contra el COVID-19 que no haberla recibido.
Mientras tanto, un estudio reciente concluyó que una dosis de una vacuna aumentó la protección para las personas que se recuperaron de COVID-19, pero dos o tres dosis parecían reducir la protección; los autores dijeron que no estaban seguros de por qué era así. Otro estudio encontró una mayor protección entre los naturalmente inmunes que no estaban vacunados en comparación con los que sí lo estaban.
Las enfermedades reforzadas asociadas a la vacunación (VAED, por sus siglas en inglés) fueron identificadas (pdf) como un “riesgo potencial importante” de las vacunas contra la COVID-19 por los reguladores de medicamentos de EE. UU., al igual que un evento similar conocido como enfermedad respiratoria reforzada tras la vacunación contra la COVID-19. Algunos eventos adversos registrados tras la vacunación contra el COVID-19 “podrían indicar” VAED (pdf), según un equipo de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
VAED se refiere a la enfermedad “resultante de la infección en individuos preparados con respuestas inmunitarias no protectoras contra los respectivos virus de tipo salvaje”, dijeron los investigadores el año pasado cuando establecieron una definición de caso para el término. “Dado que estas respuestas reforzadas se desencadenan por intentos fallidos de controlar el virus infeccioso, el VAED generalmente presenta síntomas relacionados con el órgano objetivo del patógeno de la infección”, agregaron.
“Eso es lo que los datos han estado mostrando ahora durante algunos meses”, dijo Malone, quien ayudó a inventar la tecnología de ARN mensajero en la que se basan dos de las tres vacunas contra COVID-19 autorizadas para su uso en Estados Unidos a The Epoch Times.
En un documento de Pfizer publicado este mes, el fabricante de la vacuna dijo que había 138 casos potenciales con 317 eventos relevantes de VAED reportados desde diciembre de 2020 hasta febrero de 2021. De los 138 casos, 71 fueron médicamente considerables, 16 requirieron hospitalización, 13 pusieron en peligro la vida y hubo 38 muertes.
El evento reportado con más frecuencia de los 317 eventos potencialmente relevantes fue la ineficacia del fármaco (135). Otros eventos incluyeron neumonía por COVID-19, diarrea, insuficiencia respiratoria y convulsiones.
“VAED puede presentarse como manifestaciones clínicas graves o inusuales de COVID-19”, concluyó Pfizer, y agregó que, “basándose en las pruebas actuales, el VAED/VAERD sigue siendo un riesgo teórico para la vacuna” y que continuarán vigilando el síndrome.
Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Un portavoz de los CDC dijo que la agencia, junto con la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), están monitoreando la seguridad de las vacunas a través de sistemas de vigilancia tal como el Sistema de Informe de Eventos Adversos de Vacunas y v-safe.
El monitoreo realizado hasta la fecha “no ha establecido una relación causal entre la vacunación contra el COVID-19 y el refuerzo de la enfermedad asociado con la vacuna”, dijo el portavoz en un correo electrónico a The Epoch Times.
Los CDC dicen que las vacunas son en gran medida seguras y eficaces, pero también alienta a las personas que experimentan efectos secundarios después de recibir una de ellas a reportar los problemas a uno de los sistemas.
Mientras tanto, la FDA, en este momento, no ha identificado una relación entre el refuerzo de la enfermedad respiratoria y las tres vacunas que la agencia ha autorizado, dijo un portavoz por correo electrónico a The Epoch Times.