Sindicatos: de convocar una huelga general a Rajoy a los 100 días, al mutismo absoluto
La virulencia con la que los sindicatos mayoritarios salían a la calle a protestar contra el Gobierno de Mariano Rajoy es hoy mutismo absoluto. Si al anterior jefe del Ejecutivo le montaron una huelga general cuando llevaba menos de cien días en el cargo, ahora no han convocado ni una sola protesta tras meses de carestía con una inflación especialmente significativa en la electricidad.
Según el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del mes de marzo, un 49,6 por ciento de los españoles indican la crisis económica como una de sus tres principales preocupaciones. Pero los sindicatos tradicionales guardan silencio. Ni UGT ni CC.OO. han convocado protestas ni movilizaciones contra el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos.
La crisis provocada por la pandemia del coronavirus y agravada por la inflación no ha tenido respuesta sindical. Precisamente, desde el 2012 no se veía una preocupación tan alta por la economía en el CIS, pero la reacción de los sindicatos, ahora con la izquierda en el poder, ha sido diametralmente opuesta.
El Gobierno de Rajoy aprobó entonces la reforma laboral para atajar la crisis heredada del Ejecutivo del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, muy contestada desde el principio por los sindicatos, y encajó muy pronto su primera huelga general. La rápida oposición choca frontalmente con la nula crítica de la actualidad, a pesar de que España acumula meses de inflación con un especial impacto en los precios récord de la luz.
El 29 de marzo del 2012, unos meses después de las elecciones del 20-N, CC.OO., UGT, USO, CGT y Stes-Intersindical llamaron a los españoles a la huelga general. Habían pasado 98 días desde que Rajoy tomó posesión. Antes de que se cumpliese un año desde los últimos comicios, el 14 de noviembre, los sindicatos convocaron otra huelga general en protesta por la reforma laboral, los recortes y los Presupuestos para el 2013. Fue la primera vez que se iba dos veces a la huelga en un mismo año. Entre medias, en el colofón de la protesta social, se llegó a llamar a rodear el Congreso.
Una reforma refrendada
Ese rechazo frontal a la reforma laboral del PP, que en el Congreso solo recibió el apoyo de CiU, también contrasta con el hecho de que los sindicatos, con PSOE y Unidas Podemos en el Gobierno, han participado en un acuerdo histórico con el Ejecutivo y con la patronal para actualizarla. Muy lejos quedó la promesa de derogarla, pero tanto UGT como CC.OO. estamparon su firma en un acuerdo al que se opusieron partidos como ERC y EH Bildu. La ministra de Empleo que lideró la anterior reforma laboral, la popular Fátima Báñez, respaldó públicamente el texto emanado del Consejo de Ministros, que a su juicio consolida lo fundamental de su norma.
(ABC)
Al principio solo existia la nada, despues Dios hizo la luz y los planetas, luego a los animales y al hombre, por ultimo creo a los capitalistas y a los proletarios, entonces Satan se dio cuenta de que los capitalistas y los proletarios no se peleaban lo suficiente o si lo hacian nunca habia muertos y creo a los sindicalistas.
En medio de todo ese caos un buen dia un sindicalista cualquiera se canso de pasar duras jornadas laborales de doce horas arrancando muelas de oro a los cadaveres y entonces invento los cursos de formacion de la Junta de Andalucia.
Por ultimo el mas listo de los sindicalistas viendo que se apellidaba “Iglesias” se adapto, improviso y le puso de nombre “Pablo” a su hijo varon, despues lo entreno desde la cuna para convertirse en el Criptomamavergas Supremo del Gran Capital (CSGC) y capitanear la revuelta del proletariado al frente de un partido politico que les asegurase a todo el clan una vejez dorada en una mansion de lujo en la zona rica de Madrid.