Subsecretario del tesoro de EE.UU: el sufrimiento de los ciudadanos estadounidenses y europeos es el precio de aplastar a Rusia
En una entrevista con la corresponsal de CNBC en la Casa Blanca, Kayla Tausche ayer, el subsecretario del Tesoro, Adewale “Wally” Adeyemo, se jactó del “significativo dolor” que las sanciones de Estados Unidos y de Europa han infligido a Rusia y al pueblo ruso, mientras que salía con la mentira de que habían tenido un “efecto mínimo” en Estados Unidos y sus aliaos europeos. Cuando Tausche señaló algunos aspectos negativos de las sanciones, como el alza en los precios de minerales críticos o la mayor inflación en los precios de los combustibles, Adeyemo repitió que Estados Unidos y sus aliados “están dispuestos a pagar el costo para defender la libertad”, y agregó que, por supuesto, “vamos a mitigar el costo todo lo posible”.
Tausche le preguntó que si eso quería decir que el costo de bloquear las exportaciones de esos minerales desde Rusia, o impedir a los buques rusos que entren en aguas internacionales (lo cual sería un acto de guerra) “¿es demasiado alto?”. No, “de ninguna manera”, dijo Adeyemo. Solo quiere decir que cuando se tomen esas medidas, “lo hacemos pensando en la mitigación”, de tal modo que “restringir la economía rusa tenga un efecto mínimo en nuestra economía”. Adeyemo, pieza del Partido Demócrata desde hace tiempo, ha dominado ya el arte de utilizar muchas palabras y no decir nada. Cuando se le preguntó si Rusia podría acceder a sus reservas en poder de China, respondió que “China no puede dar a Rusia lo que no tiene”, e hizo una referencia a los semiconductores, evitando responder de ninguna manera al asunto de las reservas.
Recordando las amenazas del Asesor de Seguridad Nacional Jack Sullivan el 13 de marzo, de que China sufriría duras consecuencias si se atrevía a ayudar a Rusia de alguna manera, Adeyemo repitió que China “no puede dar a Rusia lo que no tiene. China no tiene tecnología de punta China no los puede rescatar financieramente”, y dicho sea de paso, China “va a tener que vivir dentro de los límites” de las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea.
Repitió el mantra de que la economía rusa está destruida, está “en un punto muerto”, y contestó con galimatías a la pregunta de Tausche sobre la posible suspensión del impuesto federal a la gasolina; qué está haciendo la Casa Blanca para enfrentar la inflación creciente y por qué está intentando producir más petróleo cuando se supone que está reduciendo su dependencia de los combustibles fósiles. No hay que preocuparse, dijo. Todas las opciones están en el tapete. La economía estadounidense está en un auge, y el futuro luce brillante.
Un hijo de puta con botas…
El único país que sale ganando es USA, que ni pone los muertos, ni la destrucción.
Ellos ganarán muchísimos millones de dolares, miles de millones, vendiendo armas a la vieja Europa, que e4stá acojonada, al tener una guerra en las puertas de casa…
¡Y, de paso, destruyen a la UE, que queda como lo que es: UNA MIERDA de los mercaderes, los judíos y la masonería!
Además, creo que USA se equivoca de enemigo: SU ENEMIGO ES CHINA, y del mundo libre y civilixzado, no RUSIA, que es un gran país que sólo exige el respeto que se merece, como toda gran potencia…
¿O es que USA permitió la existencia de bases rusas en CUBA, en tiempos de Kennedy, que estuvieron a punto de entrar en guerra?
Ningún gran país, o, simplemente, que se precie, quiere estar sitiado y rodeado por sus enemigos…
El futuro de USA y la UE tienen el mismo color que tú, ¡ pura materia oscura !. No habéis doblegado a países insignificantes como Cuba, Corea del Norte o Venezuela y vais a torcerle el brazo a la despensa del mundo. El globo de Chaplin os va a estallar en la cara y se os va a quedar cara de pringaos espantados. Sabes cual es la mejor arma de destrucción masIVA en manos de Rusia…; lo que fue, IVA y vendrán para esquilmar a vuestros ciudadanos en nombre de la distópica de la libertad de las cadenas. No tendréis… Leer más »
Estos son los mismos que decían en 2015 cuando Rusia intervino directamente en Siria, que no aguantaría ni un año allí.