EE.UU. estaría usando inteligencia militar como parte de una guerra de información contra Rusia, incluso cuando los datos obtenidos no son verídicos
La administración del presidente Joe Biden estaría desplegando inteligencia militar desclasificada como parte de una guerra de información contra Rusia, incluso cuando los datos obtenidos no son verídicos, según reportó NBC News, citando a 3 oficiales estadounidenses.
“No es necesario que la información sea sólida”, dijo un funcionario estadounidense. “Es más importante adelantarse a ellos [Rusia], a Putin específicamente, antes de que hagan algo”, agregó.
La idea es adelantarse y desbaratar las tácticas del Kremlin, complicar su campaña militar, “socavar la propaganda de Moscú y evitar que Rusia defina cómo se percibe la guerra en el mundo”, dijo otro de los funcionarios familiarizados con la estrategia.
Las fuentes estadounidenses reconocieron que Washington ha utilizado la información como arma incluso cuando la confianza en la exactitud de los datos obtenidos no era alta.
Según los reportes, el Pentágono ha usado la inteligencia de poca credibilidad para generar un efecto disuasorio en varias ocasiones, como cuando se acusó a Moscú, sin prueba alguna, de pretender usar agentes químicos en Ucrania.
Sin embargo, la estrategia tiene sus peligros, señaló uno de los oficiales estadounidenses. Uno de ellos es que equivocarse sería muy perjudicial para la credibilidad de Washington y beneficiaría a Moscú.
“Es el despliegue más asombroso de la inteligencia como instrumento de poder estatal que he visto o del que he oído hablar desde la crisis de los misiles de Cuba”, dijo Tim Weiner, periodista y escritor estadounidense.
Asimismo, un funcionario estadounidense le comunicó al medio que “el esfuerzo del Gobierno de EE.UU. para analizar estratégicamente los informes de inteligencia y para compartirla con los aliados y el público está respaldado por un riguroso proceso de revisión por parte del Consejo de Seguridad Nacional y la Comunidad de Inteligencia, a fin de validar la calidad de la información y proteger las fuentes y los métodos”. La fuente agregó que “solo aprobamos la divulgación de informes de inteligencia si estamos seguros de que se cumplen esos dos requisitos”.