Lo que en el fondo quiere Vox con su campaña populista e hiperventilada es el regreso del PSOE a la Junta de Andalucía
AD.- Cuando un niño está malcriado, suele recurrir con frecuencia a las rabietas cuando no obtiene lo que quiere en cada momento. Vox está actuando como ese niño malcriado durante la precampaña para las elecciones autonómicas andaluzas y no parece que vaya a cambiar de aquí al 19 de junio. Apena ver a una mujer como Macarena, que en otras circunstancias podría ser brillante, soliviantada y en permanente bronca con todo lo que se mueve. No propone absolutamente nada constructivo, sus intervenciones se limitan a soflamas populistas de libertadora, somo si los andaluces necesitáramos que viniera con las llaves a arrancarnos los supuestos grilletes. ¿Y quién le ha dicho a esta señora que Andalucía necesita que la rescate? Y sobre todo, ¿de quién nos tendría que rescatar Macarena Olona?
Si Macarena Olona escuchara más a los afiliados de base percibiría que lo que a estos les cabrea es sobre todo que Vox se vaya pareciendo más a aquello que Lenin definió como el centralismo democrático. El Comité Central es el que elige y dispone. Triste pero real. Si el Comité Ejecutivo Nacional elimina de repente las primarias internas sin dar explicaciones, lo que está evidenciando es una clara falta de democracia interna en contra de la ley de partidos y de la Constitución. Si el Comité Central decide que el número 1 de la lista por Málaga, Antonio Sevilla, no acuda a un debate televisivo por su cortitud oratoria e intelectual, lo que hacen es tomarle el pelo a los potenciales votantes de Vox. El razonamiento es así de simple: si creéis que vuestro candidato no puede representar dignamente al partido en un debate, ¿por qué en cambio creéis que puede representar a los malagueños en el Parlamento de Andalucía? ¿Acaso os creéis mejores que el pueblo al que decís servir?
“No habrá pacto para los presupuestos”. “Sí habrá acuerdo”. “Cumpliremos con nuestra palabra”. “Damos por roto el pacto con el Gobierno de Moreno Bonilla”. “No dejaremos caer el Gobierno de Andalucía”. “Si Juanma sabe contar, que no cuente con nosotros”. “Seguro que llegamos a un acuerdo en los próximos días”. “Con nosotros no sumarán”. Si quiere que convoque, no pactaremos los presupuestos”. “Daremos estabilidad”. “No seguiremos sosteniendo al PP en Andalucía”. Así, a boca llena, sin miedo a seguir haciendo el ridículo, sin menosprecio alguno al circo que supone el seguimiento de los tres últimos meses de la postura, posturas y antiposturas de VOX ante el Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla, Macarena Olona, repliega alas y se conforma con ser cabeza de cartel en Andalucía.
VOX esta experimentando una caída electoral que no entienden dentro de las siglas y aún menos en torno a la “curia del Conde”. El circo y la “party-convención” no ha servido de revulsivo como pensaban, todo lo contrario. Si bien hay que entender que las tendencias se han estabilizado y corregido con fuertes cambios en los dos últimos meses, la realidad es que los máximos que tocaron el año pasado no parecen repetirse.
¿Y en Andalucía? Peor. Los datos han hecho que la candidatura de Olona pasase de ser una estrategia para no tener sombra alguna en el Congreso para Abascal a ser una necesidad para resistir resultados. Olona, que siempre ha tenido un gran olfato político se revolvió meses atrás para evitar ser candidata en Andalucía llegando a afirmar a su círculo más cercano que ella “no es una política de media tinta” para ir a una región. Su cabeza está puesta, junto a la de Espinosa de los Monteros, en 2023. Ella tiene fuerza suficiente e imagen para ser el número dos del partido y ese futuro no pasaba, hasta hace tres meses, por Andalucía.
Pero los datos han hablado. El juego de Vox en Andalucía no ha logrado calar entre el electorado, más bien todo lo contrario. Primero que seamos leales y nos diferenciemos de Ciudadanos. Luego que todo contra el PP y sin acuerdos. Luego que los presupuestos los pactemos con los principios más difíciles de tragar del Gobierno de Juanma. Luego que no sigamos negociando. Luego que sí y ahora de nuevo que no interactuemos. Nos vuelven locos desde Madrid. Ya no sabemos si nos tenemos que sentar, si levantarnos o directamente ir o no a negociar las cuentas” nos dice un diputado de VOX en Andalucía. Todo un juego de “veletismo” político que ya se ha vivido con anterioridad en España con Ciudadanos y anteriormente con UPyD. Un desastre para cualquier partido que rechaza el elector medio.
Y todavía queda juego. Si Vox tumba al Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla, se habrá pegado un tiro en cada pie. Vox siempre ha jugado con los tiempos y con la crispación en la campaña, pero ningún partido político que, por estrategia o por indecisión, hace caer a un Gobierno, logra apoyos nuevos. Todo lo contrario. Si Vox torpedea, como está haciendo ahora mismo, el cambio que se produjo en Andalucía, habrá cavado su tumba en el sur. Vox juega con fuego y se quemará si sigue tentando al diablo con dejar caer a Juanma Moreno si Olona no logra parasitar al PP. Olona se ha unido al fuego cruzado de “todos contra el presidente andaluz”.
Andalucía es un juego peligroso para este tipo de tensiones y más en Vox o en el PSOE. Las encuestas aúpan a Juan Manuel Moreno Bonilla por encima del 37%, es decir, que podría incluso plantear un gobierno en solitario. El PSOE se enfrenta a su peor resultado histórico en el “antiguo bastión” socialista y Vox, con sus “sí pero no” y su “no pero sí” se juega tener algo que decir. Si la “curia del Conde” ha decidido sacrificar a Olona, no es para quitarse enemigos internos de futuro a Santiago Abascal, que también es uno de los principales motivos de este movimiento, pero lo que ha pesado aún más es por el pánico que le da no tener influencia en Andalucía y sufrir un nuevo desgaste que dilapide todas sus opciones de poder ser necesarios para entrar en un hipotético gobierno nacional presidido por Feijóo.
Da igual las campañas electorales que usan en las redes sociales con “solo queda Vox” o cosas por el estilo. Los volantazos políticos no se perdonan. Les gusta el ruido e intentan tapar sus pifiadas pasadas, pero van tarde. No puedes montar una “automoción de censura” contra Sánchez y después salvarle de tener que convocar elecciones dándole tus votos a favor en el reparto del dinero europeo. No puedes, tras salvar al PSOE de caer, provocar un tsunami político en Andalucía y salir indemne. Olona no es la panacea que Vox necesita en Andalucía. La panacea pasa por entender entre sus filas que son apoyo y parte del cambio de Andalucía. Si continúan con su campaña tremendista e hiperventilada, lo que estarán haciendo es justificar el discurso del miedo de la izquierda.
Lo que quiere evitar Vox es que el PP consolide desde el poder la hegemonía política en la derecha que ahora tiene, y lo que en el fondo quiere es el regreso del PSOE a la Junta de Andalucía.
¿El articulista escribe para tontos? ¿VOX quiere que regrese el PSOE a Andalucía? No será porque espera gobernar en coalición con ellos.
Por tontos nos toma VOX a los andaluces. Me da igual que en los mítines llene (no tanto como en 2018 o 2019…). En VOX solo ven votos y paganinis, y les mola mucho eso de que solo quedan ellos y que el PP hace lo mismo que el PSOE, aunque luego los que votan con el PSOE son los de VOX.
Teniendo en cuenta todas las veces que VOX hace lo contrario de lo que dice, es muy creíble que como poco se encontraran más cómodos con una vuelta del PSOE que con una victoria del PP.
Nunca he leído en Alerta Digital un comentario favorable sobre VOX. En pura lógica no es posible que alguien siempre lo haga todo bien o siempre lo haga todo mal (me refiero a VOX). Y en AD siempre he leído críticas, nunca algún elogio, sobre VOX. Debe haber algún motivo que se me escapa. Lo siento. Saludos.
Cambie de horario amigo y deje al otro administrador que es más simpático.
Los elogios ya se los echa Macarena posturitas. Vienen a salvarnos a los andaluces, porque por lo visto sólo VOX puede salvarnos, aunque ni los andaluces tengamos claro que solo VOX pueda salvarnos ni de qué. Van a conseguir un gran resultado, eso seguro, pero si tratan a sus propias bases como paganinis a los que cuando no interesa se les da la patada, y votan con el PSOE y Podemos para luego acusar al PP, como para no criticar a VOX. No lo sientas tanto y cógete el diario de sesiones del Parlamento de Andalucía que lo vas a… Leer más »
El periodista debe actuar con rigor e imparcialidad; para elogios y artículos sensacionalistas mejor dedicarse a leer otra cosa.
Saludos.
Lógicamente no esperaba aprobación del censor. Mi mensaje era para ustedes y el objetivo ya está cumplido.
ADMINISTRADOR: No, subnormal, hemos tardado 15 minutos en validarle su vómito porque aquí también se come en horario de comida. ¿Ves como es imposible que no se termine odiando a esa derechona malpensada y zafia que usted representa? Largo de aquí, tonto, que es usted tonto.
Hijoputa