El jefe de la policía suiza advierte de que la «población se rebelará» este invierno
Mac Slavo.- Un jefe de policía en Suiza está advirtiendo que la gente se rebelará este invierno cuando se vean obligados a pagar precios de energía ridículamente altos o enfriarse. Jan Flückiger, secretario general de la Conferencia de Directores de Energía, advirtió que una vez que se produzca la escasez de energía, «la seguridad interna se convierte en un problema».
En una entrevista con el diario suizo en alemán Blick, Fredy Fässler, jefe de policía de uno de los cantones más grandes de Suiza, advirtió que la gente puede rebelarse y recurrir a los saqueos si la nación alpina se ve afectada por una severa crisis energética este invierno. Incluso si hay algo de energía, es poco probable que todos puedan pagarla. Los problemas de oferta forzarán los precios a subir a medida que la demanda se dispare.
«Imagínese, ya no puede retirar dinero en el cajero automático, ya no puede pagar con la tarjeta en la tienda o repostar su tanque en la estación de servicio. La calefacción deja de funcionar. Hace frío. Las calles se oscurecen. Es concebible que la población se rebele o que haya saqueos», dijo, y agregó que las autoridades del país deben tomar medidas para prepararse para escenarios tan extremos. –Blick
Los ejercicios que se llevaron a cabo en 2014 se realizaron para prepararse para un escenario de apagón. Esos ejercicios revelaron importantes deficiencias, incluida la falta de generadores de emergencia para la policía, los hospitales y otras infraestructuras y servicios críticos, dijo Fässler.
«Estas deficiencias se han corregido en los últimos años», señaló el jefe de policía, y agregó de manera bastante ominosa que ahora «las fuerzas de seguridad están armadas» y su agencia incluso está preparada para proporcionar efectivo a los suizos si no pueden usar tarjetas en las tiendas, dado que se han firmado acuerdos relevantes con los bancos.
«Hago un llamamiento al gobierno federal para que solo ordene medidas que puedan ser implementadas y, sobre todo, controladas. Ciertamente no nos convertiremos en la policía de la sauna”.