Mientras Ucrania cuenta con el apoyo descomunal de Occidente, algunos líderes lamentan en la ONU que se haya ignorado durante décadas otros conflictos
Discurso tras discurso, los líderes mundiales abordaron en sus intervenciones en la 77ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas la guerra en Ucrania, pero no como se esperaba.
Algunos, como el presidente nigeriano Muhammadu Buhari, instaron al mundo a no olvidar otros conflictos. “La guerra en curso en Ucrania está haciendo que sea más difícil nuestra seguridad alimentaria”, lamentó el presidente de Nigeria en un discurso en la ONU. El presidente nigeriano ha pedido a la comunidad internacional abordar todos los conflictos perennes que se presentan cada año en las deliberaciones de la Asamblea General de la ONU. “Hay otros temas que hay que abordar como la desigualdad, el desarme nuclear, el conflicto israelí-palestino y los más de 1 millón de refugiados rohingya de Myanmar que han estado viviendo en el limbo durante años en Bangladesh”, dijo Buhari.
Esos “murmullos” son lo suficientemente audibles como para que la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, hiciera un avance de los planes de Washington para abordar el cambio climático, la inseguridad alimentaria, la salud y otros temas durante la principal reunión anual de la comunidad diplomática internacional organizada por la Casa Blanca al margen de la Asamblea General de la ONU. “Hay países que han expresado su preocupación de que mientras nos enfocamos en Ucrania, no estamos prestando atención a lo que está sucediendo en otras partes del mundo, eso no es así”, lamentó Thomas-Greenfield. Aún así, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, se quejó en una reunión del Consejo de Seguridad días después de que la guerra de Ucrania está distrayendo a la ONU de trabajar en otros asuntos importantes.
Ciertamente, a nadie le sorprendió la atención dedicada a un conflicto con ecos de la Guerra Fría, amenazas de guerras nucleares, bombardeos que han puesto en peligro la planta de energía atómica más grande del continente europeo y efectos económicos de gran alcance.
En este contexto, Andrzej Duda, presidente de Polonia, país fronterizo con Ucrania, subrayó en su discurso que “no debemos mostrar ninguna ‘fatiga de combate’” con respecto al conflicto en curso en Ucrania. Pero también señaló que durante un viaje reciente a África lo dejó reflexionando sobre cómo Occidente ha tratado otros conflictos.
“Mientras condenamos la invasión de Ucrania”, agrega Duda, “¿le damos el mismo peso a la lucha contra el terrorismo que amenaza con desestabilizar el Sahel y muchos otros estados en África?”, se pregunta.
A lo largo de siete meses de la guerra de Ucrania, se han producido observaciones puntuales de algunos sectores sobre la rapidez y la amplitud con que las naciones ricas y poderosas movilizaron dinero, ayuda militar, votos de la Asamblea General para apoyar a Ucrania y ofrecer refugio a sus residentes, en comparación con la respuesta global a algunos otros conflictos.
Naledi Pandor, ministra de Exteriores de Sudáfrica, declaró por su parte que la ONU debe tratar a todos los conflictos en el mundo con la misma indignación sin importar el color o credo de la gente afectada, y no puede ignorar las décadas de lucha por la autodeterminación del pueblo del Sáhara Occidental y de Palestina. “Debemos tratar a todos los conflictos con la misma indignación sin importar el color o credo y no podemos ignorar las décadas de lucha del pueblo del Sáhara Occidental”, subrayó Pandor.
El mes pasado, la ministra de Relaciones Exteriores de Sudáfrica dijo a los periodistas, tras recibir al secretario de Estado de EE.UU, Anthony Blinken, que si bien la guerra es horrible, “deberíamos estar igualmente preocupados por lo que le está sucediendo al pueblo de Palestina y el Sáhara Occidental como lo estamos con lo que le está sucediendo al pueblo de Ucrania”.
En la Asamblea General, Pandor agregó que, desde el punto de vista de Sudáfrica, “nuestros mayores desafíos globales son la pobreza, la desigualdad, el desempleo y la sensación de ser completamente ignorados y excluidos”.
Por su parte, el primer ministro de Tuvalu, Kausea Natano, dijo en una entrevista con la AP al margen de la Asamblea General de la ONU que la guerra no debería “ser una excusa” para que los países ignoren sus compromisos financieros con una de las principales prioridades de su país: la lucha contra el cambio climático.
Mientras, el presidente boliviano Luis Arce comparó los incalculables miles de millones de dólares gastados en combates en Ucrania en cuestión de meses con los 11 mil millones de dólares, con los designados para el Fondo Verde para el Clima patrocinado por la ONU durante más de una década.
Sin duda, la mayoría de los líderes mundiales aprovecharon sus discursos para hablar de los problemas más allá de la guerra de Ucrania en los 15 minutos asignados. Y algunos mencionaron la guerra solo de pasada, mientras otros la ignoraron por completo.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, dedicó su tiempo a criticar occidente. El presidente de Kirguistán, Sadyr Zhaparov, cuyo país mantiene estrechos vínculos con Rusia, se centró en la disputa fronteriza con Tayikistán. El rey Abdullah II de Jordania mencionó brevemente los efectos de la guerra de Ucrania en el suministro de alimentos, luego pasó al crecimiento económico sostenible, los refugiados sirios y el conflicto palestino-israelí.
Ucrania es especialmente una preocupación dominante para la Unión Europea. Pero el jefe de política exterior, Josep Borrell, insistió en que el bloque no ha perdido de vista otros problemas.
La guerra de Ucrania es especialmente una preocupación dominante para la Unión Europea. Pero el jefe de política exterior, Josep Borrell, insistió en que el bloque no ha perdido de vista otros problemas. “No se trata de elegir entre Ucrania y los demás. Podemos hacer todo al mismo tiempo”, dijo Borrell en la víspera de la Asamblea General de la ONU.
Sin embargo, la atención diplomática y el tiempo son recursos valiosos y buscados. Así también, la voluntad y el dinero para ayudar.
Las cifras de la ONU muestran que los gobiernos y las ONGs han aportado alrededor de 3.700 millones de dólares para ayudar a Ucrania y a los refugiados ucranianos en cinco meses. Mientras se han recaudado alrededor de 2 mil millones de dólares para para Yemen devastado por la guerra, donde la ONU dice que más de 17 millones de personas están luchando contra el hambre. Solo se han recaudado 428 millones de dólares para Myanmar y para los refugiados rohingya en Bangladesh.
La ONG Egeland se dedica a ayudar a personas necesitadas en todo el mundo, incluso en Ucrania. Pero siente una “necesidad urgente de llamar la atención sobre las caídas en otros lugares”. “La situación se deterioró en el Congo, Yemen, Myanmar o Venezuela porque la situación es difícil en Europa, en Ucrania y sus alrededores”, aclaró Egeland, y añade: “Necesitamos luchar por aquellos que se mueren de hambre en las sombras de esta horrible guerra en Ucrania”.
Finalmente, en uno de los discursos más esperados de la 77ª reunión de la Asamblea General de Naciones Unidas, el presidente de EE.UU., Joe Biden, arremetió contra el líder ruso, Vladimir Putin, por la guerra en Ucrania. El mandatario norteamericano calificó la invasión rusa como “una guerra innecesaria y brutal” de la que responsabilizó directamente a Putin por los últimos seis meses de ataques en territorio ucraniano.
“Es una guerra que escogió un hombre, para ser muy franco. Hablemos con franqueza: un miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU invadió a su vecino y trató de borrar a un Estado soberano del mapa”. Biden pidió al mundo “ver estos actos horrendos por lo que son” y descalificó la justificación de Rusia de que tenía que lanzar una “operación especial” en Ucrania para defender su propia integridad y liberar a los ucranianos de un “gobierno nazi”.
Sera porque en Ucrania se esconde toda la corrupcion de los lideres de occidente?
Porque si no no me explico porque tanta energia en defender a Ucrania por estos psicopatas globalistas.
Es porque hay un INTERES que no van a rebelar.
Temen la caida del nuevo orden mundial.
Nota de humor: Omacron es la variante francesa del Omicron. Un virus troyano anglosionista para llevar a la ruina al pueblo de Francia. La banca pirata lo sacó de becario (y chico para todo…) y lo coló en Francia. Para hundir del todo la Republica y abrazar públicamente el desprecio a la legalidad internacional:
– “Todos los problemas de la humanidad, aun los desastres naturales, guerras, enfermedades y tragedias no son resultado de fuerzas exteriores, sino son el resultado de su desorden mental.” (Carl G. Jung)
https://sputniknews.lat/20220819/suministra-francia-a-ucrania-minas-antitanque-prohibidas-por-los-convenios-de-ginebra–foto-1129586208.html
A los unos y a los otros les importa un carajo la gente que esté muriendo. Están haciendo negocios redondos y muy suculentos con la sangre de gentes inocentes que mueren y sufren sin saber por qué.. Putin es tan criminal como Zelesky y sus amos Sobre todo el tito Klaus. Toda esta banda de criminales van a por nosotros. No se salva ni uno. Desde hace decenas o cientos de años todo es la misma mierda.