La luz del mundo
ÉLITE MUNDIAL – TENEBRIS MUNDI.- La actual generación de líderes mundiales no tiene nada que ver con sus antecesores, contemplado en términos generales. Y así vemos que la presente camada de mandatarios mundiales parecen cortados todos por un mismo patrón.
Sea cual sea su país de procedencia, todos coinciden más o menos en una serie de puntos cruciales. Por citar solo algunas de estas coincidencias mentaré el apoyo decidido a favor del aborto, facilitar el divorcio o sea la ruptura de las familias, de las disposiciones proLGTB, de una supuesta defensa contra la violencia de género, de su fe ciega en el lucrativo negocio de la religión climática, de sus políticas contra la natalidad, políticas contrarias a los intereses en defensa de la familia natural, constante afán en la creación de pobreza generalizada de los pueblos, creación de súbditos sometidos a la televisión y eliminación de ciudadanos libres e iguales. Por citar solo algunos aspectos.
No obstante, hay un punto universal en el que coinciden todos estos políticos y mandatarios (salvo dos o tres excepciones en todo el planeta), que es una profunda CRISTOFOBIA. Esta malvada élite manifiesta una hostilidad inaudita contra todo lo que signifique religión cristiana o principios morales cristianos. Permanentemente contemplamos y sufrimos un ataque despiadado, descarnado contra todos los valores y virtudes de la Iglesia Católica.
Los inmensos logros de la Iglesia, de todos sus hombres y mujeres son menospreciados, ridiculizados, o en el mejor de los casos, simplemente silenciados. Por el contrario, los errores de la Iglesia son magnificados por los repetidores y altavoces mediáticos y convertidos en primeras noticias en el mundo entero. Los equipos de periodistas muy bien pagados por cierto, no dejan de sorprenderme de lo bien que saben calumniar – difamar – silenciar. Son maestros de la mentira en una sociedad que disfruta al parecer, siendo engañada. Es por eso, que todos esos repartidores de oscuridad atacan a la luz de la Iglesia.
Todas estas medidas implementadas por los líderes de la élite han traído una Gran Oscuridad al Mundo. La gente se halla muy perdida, aunque cuando hablo con los demás, nadie parece darse cuenta de lo que está pasando. O no lo saben, o parece no interesarles en absoluto, o saben algo pero prefieren pasar inadvertidos y seguir sus vidas como si tal cosa. Pero en general, nadie parece preocupado en absoluto por esta continua y creciente privación de derechos y libertades por parte de la ciudadanía. Así pues, muchas veces llego a pensar yo mismo que tal vez sean paranoias mías, o simplemente que exagero. Muy rara vez alguien coincide conmigo; y cuando alguna vez esto sucede y veo a otra persona que abiertamente se atreve a hablar de estas cosas, mi alegría es inmensa, aunque esta situación se produce muy pocas veces.
BENEDICTO XVI – LUMEN MUNDI
Jesucristo nombró a Pedro, el primer papa como su Vicario en la Tierra. Se denomina “vicario” a la persona que ejerce las funciones de otra, en todo o en parte por delegación y nunca con carácter propio; la sustituye por tiempo indefinido o determinado. Se aplica a los Papas de la Iglesia. En nuestro caso, es el Papa el que hace de sustituto en persona del propio Jesucristo.
Jesús les habló otra vez, diciendo: “Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida”.
El Papa, como vicario de Cristo que es, debe arrojar una tremenda luz sobre el mundo, que acorrale a las tinieblas, que las destruya, y que ilumine la Creación para que los hombres vean y comprendan. Para que la gente no vaya perdida, dando vueltas como animales en la noria de agua a la que la han atado los codiciosos. Para que no estén al servicio de malhechores que permanecen en la sombra y que poco a poco se han ido adueñando de todo y le han puesto precio a todo, dejando a la gente sin nada. No existe un Neocapitalismo, sino que lo que han impuesto es una Neoesclavitud.
La Luz es un derecho fundamental de las personas. Esto lo saben perfectamente muchos que atacan a la Iglesia. Saben perfectamente lo que hacen. Los poderosos del mundo atacan a Cristo, y no por CASUALIDAD, sino como una despiadada CAUSALIDAD.
El Papa Benedicto XVI está viviendo, según se nos informa, sus últimos momentos en el mundo. Este Papa, con mayúsculas es un personaje esencialmente bueno, culto y profundo.
Benedicto XVI, de nombre secular Joseph Aloisius Ratzinger, ha sido el 265° papa de la Iglesia católica y séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano. Resultó elegido el 19 de abril de 2005 tras el fallecimiento de Juan Pablo II, por los cardenales que votaron en el cónclave.
Desde el principio, por su origen germano lo tuvo muy difícil en comparación con su antecesor, el queridísimo Juan Pablo II, pero pronto se vio que era un Papa más intelectual que carismático.
Sólo cito los maravillosos libros escritos por Benedicto que personalmente he leído: Jesús de Nazaret, Ser cristiano en la era neopagana, La infancia de Jesús y El Credo hoy.
Su nivel intelectual y moral quedan totalmente acreditados. La lectura dulce y documentada. La invitación a la reflexión permanente. Su preocupación precisamente por esa tendencia a la oscuridad que muestra la sociedad postindustrial y del consumismo hedonista.
Su denuncia de los poderosos traficantes de la Tiniebla y del Satanismo que imperan por todas partes hoy día, incluso en el Vaticano mismo, le han granjeado irreconciliables y mortales enemigos dentro y fuera de la Iglesia.
Nunca han aclarado su prematura sustitución en la persona del cardenal Bergoglio. Se dijo que el papa Benedicto renunciaba a los 8 años de pontificado debido a su avanzada edad y a problemas de salud. Yo no me lo creo.
Quizás pueden entenderse mejor las cosas cuando vemos los precipitados cambios que Bergoglio está realizando en la Sede Apostólica, y no sólo en lo que se refiere a nombramiento de nuevos cardenales, sino a verdaderas pifias en materia de doctrina y de fe. Frente a la dulzura del anciano y muy entristecido Papa Benedicto, me choca mucho el permanente gesto malhumorado y agrio de Bergoglio.
Todos vimos el manotazo que le dio a una mujer en la plaza de San Pedro en Roma, cuando al cogerle ésta la mano, él pensó que le iba a robar el reloj y la apartó de sí con violencia.
En estos momentos trágicos, el Papa Benedicto se nos está muriendo. Pero con él, la Luz del Mundo no se apagará. Alguien surgirá para recoger el testigo que desde los tiempos de San Pedro se han venido transmitiendo entre sí los Papas auténticos. Sólo los Papas verdaderos son portadores de la Luz. El terror y la oscuridad no prevalecerán, porque Jesucristo no lo consentirá en la Creación de su Padre.
Y aunque ahora, lo que más parece preocupar a las Jerarquías Eclesiásticas es saber quién se apuntará el tanto de oficiar la misa de difuntos que se aproxima, nada menos que de este Verdadero Papa, yo pido a mis amables lectores una Oración por el alma y por la salvación eterna de este maravilloso Papa Benedicto XVI, para muchos la verdadera “Lumen Mundi” de Jesucristo en la Tierra.
Acabando este artículo, me llega la noticia del fallecimiento del Papa Benedicto XVI. Precisamente el 31 de diciembre de 2022. Mi más sentido pésame.
Toda la Cristiandad está de luto. Descanse en Paz.
“La tierra estaba confusa y vacía y las tinieblas cubrían la haz del abismo, pero el Espíritu de Dios se cernía sobre la superficie de las aguas. Y Dijo Dios Haya luz y hubo luz. Y vió Dios que era buena y la separó de las tinieblas ( Génesis 1, 2-4)´ Juan, el angélico evangelista con su excelso lenguaje nos habla de la Luz, del que es la Luz, Jesús que nos muestra el Bien, la Verdad, la Belleza de la Creación, que nos da la paz que no es com la que da el mundo, que nos recuerda que… Leer más »