Extraña muerte, por coincidente: Muere el traductor de Benedicto XVI al día siguiente que el Papa cautivo
Muere el traductor de Benedicto XVI AL DÍA SIGUIENTE que el Papa. Giulio Colombi, eminente teólogo e intelectual que hablaba más de seis idiomas ¡oh casualidad! fallece el 1 de enero. ¿A quién hubiera dejado sus escritos el Papa cautivo? Otra casualidad.
Se hace difícil no tener fundadas sospechas. Este sabio teólogo llevaba años con el antiguo Cardenal Ratzinger. Se manejaban en varios idiomas, y si alguien sabía demasiado y tenía las claves de lo que el Papa dejó escrito, era él: sobre todo, el por qué de su renuncia al Papado.
Quien crea que Colombi murió de muerte natural está en otro mundo.
¡Al día siguiente! ¿Para que no le diera tiempo a escapar ni difundir nada?
Estos judeo-masones cada dia disimulan menos. Al final habrá que darles una lección.
DEP.
Francamente, muy curioso.
¿Qué pudo dejar escrito Benedicto XVI, como mensaje póstumo, después de haber sufrido tantas afrentas y humillaciones de Francisco, además del rumbo al desastre de la Iglesia Católica, que más parece CATÓDICA, que otra cosa…?
Excuso decirles que esos documentos habrán desaparecido.
Faltaría más.
El humo de Satanás no es que está entrando en el Vaticano, como decía Pablo VI, es que ya está instalado en él.
Incluso como posibilidad es escalofriante.
Más que raro es que se haya muerto al día siguiente del fallecimiento del Papa emérito.
Muy interesante análisis del profesor Damián Galerón en el canal telegram del mismo nombre