Marcelo Duclos.- No es una novedad que Cristina Fernández de Kirchner sea una de las máximas referentes que tienen los militantes podemitas. Lejos de tomar nota del fracaso de la economía con la cuarta inflación más alta del mundo, con la mitad de los niños del país por debajo de la línea de pobreza, la agrupación izquierdista europea se limita a repetir el relato mentiroso de los Fernández. Esta semana, con una nueva peligrosa y voluntarista iniciativa, quedó en evidencia que el denominado partido morado pretende destruir a España, como sus pares políticos hicieron con Argentina.

A contramano de todo el sentido común económico y de las experiencias políticas latinoamericanas, los socios del PSOE buscan forzar a la coalición de izquierda para que se implemente una “Renta garantizada” que reciban todas las personas dentro del territorio español. En sus delirios, consideran que, una vez que se ponga en funcionamiento la medida, dejarán de existir los pobres en España. Todo como por arte de magia.

¿En qué consiste la denominada “Renta garantizada”? En que los hogares de las familias españolas que hayan registrado ingresos menores a 2100 euros reciban automáticamente 1400 euros más. Si el grupo familiar tiene más de dos hijos, de la misma forma se agregará un plus de 100 euros por menor. Según los referentes podemitas que buscarán la concreción del proyecto, se trata de una idea que garantice “vivir” en lugar de “sobrevivir”.

Desde sus redes sociales, Pablo Echenique aseguró que su espacio político «tiene la valentía suficiente» como para impulsar una iniciativa como esta, pero que además es «la única fuerza» con la capacidad de aguantar «los ataques» para hacerla realidad.

El resultado de estas medidas destructivas ya es bien conocido: incremento del gasto público (por ende de los impuestos, lo que genera menor productividad en la economía y más bajos salarios del sector privado), atracción de inmigración que llega por los beneficios al país, más dependencia del Estado y malos incentivos para el trabajo registrado con la finalidad de garantizar los subsidios gubernamentales. La película para los argentinos ya es bien conocida, así como también el final.

Al igual que Ecuador se salvó por no tener moneda propia al momento de la llegada de Rafael Correa, España ha sido muy afortunada de estar en la eurozona durante la actual administración populista izquierdista. ¿Se imaginan el resultado de la coalición PSOE/Podemos con la maquinita de imprimir pesetas? Al menos la restricción monetaria ha servido para aminorar un desastre que de por sí ya es bastante notorio.