República Dominicana es un lugar paradisiaco, un destino de muchos turistas y aventureros que desean pasar unos días de auténtico disfrute. Sin embargo, hay muchos sitios ocultos que no llegan a ser visitados, ya que se desconoce que existen. Rafael Canó Sacco te cuenta sobre algunos de ellos.

“Hablar de República Dominicana es hablar de playas, islas, aguas azules y transparentes, ballenas jorobadas, corales, selvas, lagunas, cuevas y hasta las cumbres más altas del Caribe. Añade además la gente acogedora y una cultura fascinante”, afirma Rafael Canó Sacco. Al haber tanta oferta de sitios que visitar, es difícil escoger unos pocos.

1. Ciudad Colonial, Santo Domingo

Cuando miras los folletos turísticos de República Dominicana, las playas y los bosques acaparan la mayoría de las imágenes que aparecen allí. Esto es normal, son ellos los que te llaman para disfrutarlo durante días o semanas. Sin embargo, entre los mejores lugares para visitar en República Dominicana, hay uno que no tiene nada que ver con todo esto.

La capital del país, Santo Domingo, aún conserva edificios que formaron parte de la primera ciudad fundada por europeos en América. Hay muchas iglesias, castillos, fuertes, casas de piedra y edificios antiguos que alguna vez albergaron oficinas oficiales españolas en las Américas. Puedes pasar horas o incluso días recorriendo esta zona, que es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

2. Parque Nacional Cotubanama, Higüey

Anteriormente, era conocido como Parque Nacional del Este. Alberga más de 40.000 hectáreas y más de 200 cuevas, incluidas Isla Saona e Isla Catalina. Lo más atractivo de este parque es que tiene dos zonas geográficamente diferenciadas, con la selva subtropical húmeda y la zona seca, lo que significa que vas directo de la selva a la playa.

3. Cayo Levantado, Samaná

Famoso por sus palmeras y su tranquilidad, quienes visitan este animado lugar pueden practicar esnórquel y kayak en sus aguas cristalinas o simplemente relajarse tomando el sol y nadando. También puedes pasar la noche en un hotel de lujo ubicado en la otra mitad de la isla. La región transmite paz a través de sus aguas tranquilas, peces de colores, estrellas de mar y ostras, que se pueden ver gracias a las aguas cristalinas.

4. Península de Pedernales

En la península de Pedernales se encuentran algunas de las atracciones naturales más vibrantes de la República Dominicana. Sin embargo, el porcentaje de turistas en esta parte del país es sorprendentemente bajo. Las hermosas playas de Bahía de las Águilas, Laguna Oviedo (de agua salada), Parque Nacional Jaragua, Bosque Nuboso Cachot y Parque Nacional Sierra de Bahoruco. Este último es uno de los mejores lugares del mundo para la observación de aves.

5. Isla Saona, La Altagracia

La isla más grande que se puede ver en República Dominicana es Isla Saona. Se encuentra frente a las costas de la provincia de Altagracia, dentro del Parque Nacional Cotubanamá. Esta es una de las excursiones más típicas de los visitantes de los balnearios de Punta Cana. Sin embargo, trata de no alquilar una de las visitas guiadas, y prueba Isla Saona de forma independiente.

En 110 kilómetros cuadrados encontrarás bosques semi húmedos, matorrales, manglares y bosques de sal. Además, encontrará una asombrosa diversidad de vida marina, aves y reptiles en lagunas costeras y vastas extensiones de arrecifes de coral.

6. Los 27 Charcos de Damajagua

Al otro lado de Puerto Plata, en las estribaciones de las Montañas del Corredor Norte y detrás de altos tallos de caña de azúcar, hay un paisaje espectacular de veintisiete estanques, entre cascadas y pozos, rodeados de una naturaleza maravillosa. Este lugar, además del fresco y hermoso mar, ofrece visitas guiadas y excursiones. Cada cascada tiene una historia y actividad diferente, por ejemplo, en La Tinajita puedes deslizarte naturalmente a una profundidad de 6 metros. En otra cascada hay dos corrientes de agua, una fría arriba y otra caliente abajo.

La República Dominicana tiene las mejores playas, una fascinante historia y cultura, y es el refugio favorito de muchas, parejas y familias. “Es un lugar que no decepciona y siempre sorprende con nuevos sitios que visitar. Cada año se trabaja muy duro para mejorar los servicios del país y hacerlo accesible al mayor número de personas”, concluye Rafael Canó Sacco.