Detienen por primera vez a un sospechoso de pornografía infantil “en el metaverso” en España
La Policía española ha detenido en el marco de la ‘Operación Suzaku’ a un joven de 18 años por explotación sexual de menores de edad y distribución de pornografía infantil en Internet. Según la prensa local, se trata del primer arresto por un delito cometido “en el mundo del metaverso”.
El detenido, residente de la provincia de Madrid y sin antecedentes policiales, es sospechoso de engañar a una veintena de menores mediante una aplicación en línea, por la que le enviaban voluntariamente fotos y videos sexuales explícitos que posteriormente remitía a otras personas. No se menciona el nombre de la aplicación, como tampoco se menciona si es un metaverso de por sí.
Los medios locales se limitan a indicar que la ‘app’ en cuestión, disponible para Android y iOS, apareció recientemente y está “centrada en la creación de comunidades de usuarios interesados en el metaverso”. Desde la Dirección General de la Policía señalaron en una nota de prensa que la plataforma goza de popularidad entre la juventud y es promocionada a través de TikTok o YouTube.
‘Modus operandi’
Se cree que el joven detenido creó un perfil o un avatar bajo la identidad de una chica bisexual de 19 años para enganchar a otras con las mismas preferencias e intereses.
El portavoz de la Policía Nacional en Aragón, Rubén Nido, comentó a los medios que al ganarse la confianza de sus víctimas, junto con sus imágenes pornográficas explícitas, el acusado luego compartía los archivos obtenidos con otras menores, presentándolos como propios. Así conseguía darle credibilidad a la conversación y obtener a cambio que más víctimas le enviaran material.
Investigación
El Grupo de Delitos Tecnológicos de Zaragoza empezó a investigar los hechos en mayo de 2022, tras la denuncia de los padres de una niña de 11 años “engañada”, que había enviado en el chat de una aplicación sus fotos y videos explícitos.
Durante el registro en el domicilio del detenido, los agentes incautaron un disco duro de 1 TB y un celular utilizado para delinquir con imágenes de menores.
Como el joven tenía 17 años en el momento de recopilar e intercambiar las imágenes íntimas, será puesto en libertad una vez que finalicen los trámites policiales correspondientes, según dispuso la Fiscalía de Menores de Madrid.