Los Mossos detienen a la eurodiputada golpista Clara Ponsatí tras volver a España: “No he venido a pactar con el Estado, sino a plantar cara”
Los Mossos d’Esquadra han detenido a Clara Ponsatí, una de las principales voces del núcleo duro del independentismo catalán, prófuga de la justicia desde hace más de cinco años. Durante este periodo fugitivo, ha vivido en Bélgica, donde se ha ocupado un escaño en el Parlamento Europeo por Junts, que obtuvo en los últimos comicios en la candidatura encabezada por el también huido Carles Puigdemont.
Convencida de su inmunidad como europarlamentaria, Ponsatí ha decidido regresar a Barcelona para antagonizar con las autoridades estatales. Un gesto destinado a estirar la cuerda en lo que el propio secretario general de su partido Jordi Turull, ha catalogado de “confrontación inteligente”. Recién llegada a suelo español, la exconsejera ha participado en una ponencia organizada por el Colegio de Periodistas de Cataluña.
En los términos más efusivos y encendidos, ha retado a las fuerzas del orden a detenerla, ya que, según dice, está protegida por el blindaje de su escaño. A su primera charla tras el regreso han acudido pesos pesados del movimiento, entre ellos la actual lideresa de Junts y presidenta del Parlament Laura Borrás. Ponsatí no ha dejado demasiadas dudas sobre la motivación del retorno, y ha asegurado que no reconoce la autoridad de la justicia española.
Sin pena de cárcel
No obstante, su detención es, en principio, únicamente para tomarle declaración, ya que el delito que se le imputa no acarrea pena de cárcel. Está acusada de desobediencia. Inicialmente pesaba sobre sus hombros el mucho más grave de sedición, pero la última reforma del Código Penal, pactado entre el Gobierno y ERC, ha eliminado esta situación para poder suavizar las penas de los independentistas involucrados en la organización del referéndum ilegal.
La polémica ha servido como un ruidoso altavoz para Ponsatí, que, sin embargo, no tendrá que enfrentarse, seguramente, más que a una multa o a algún otro castigo más leve que las rejas. El modo en el que se desenvuelva este caso podría, en un futuro, dejar la puerta abierta al regreso o no de los demás escapados, entre ellos el expresident Puigdemont, que se autodenomina como un “exiliado político” y también ocupa un escaño en la cámara europea.
Ponsatí: “No he venido a hacer ningún pacto con el Estado, sino a plantar cara”
La eurodiputada de JxCat ha afirmado este martes que ha regresado a Cataluña no para hacer “ningún pacto con el Estado”, sino para “denunciar la vulneración sistemática” de los derechos de los catalanes y para “plantar cara”.
Ponsatí, exconsellera del Govern de Carles Puigdemont que huyó tras la declaración unilateral de independencia de 2017, ha cruzado este martes la frontera francoespañola para regresar a Cataluña, sin entregarse a las autoridades, pese a su orden de detención.
“Soy eurodiputada y tengo inmunidad en toda la Unión Europea; sólo en España no se me reconoce”, ha asegurado Ponsatí en una rueda de prensa en el Colegio de Periodistas Cataluña, en Barcelona, en la que ha asegurado que continuará ejerciendo como eurodiputada.
Hasta la rueda de prensa se ha acercado la presidenta de JxCat, Laura Borràs, el diputado de Junts en el Parlament Francesc de Dalmases y el abogado Gonzalo Boye.
Ponsatí ha dejado claro que no reconoce “la competencia del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena”, por lo que cree que sería “una inconsistencia” que la detuviesen.
Según ha dicho Ponsatí, su residencia continuará entre Estrasburgo y Bruselas, aunque estará en Barcelona “de forma frecuente y regular” si se confirma que puede “circular libremente” por territorio europeo.
Con su regreso, ha dicho, pretende “visibilizar más intensamente” el combate del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y el resto de huidos en Bruselas, si bien ha dicho que no “sabe ver” una “relación directa” entre su retorno y el de sus compañeros.
También ha asegurado que no ve “ninguna contradicción” entre criticar la actitud del Gobierno de la Generalitat y los pactos con el Estado y aprovechar un momento favorable, tras la reforma del Código Penal, para su retorno a Cataluña.
Vaya pinta.
Parece un chorbo
Esta señora, independentista consumada, parece no escarmentar de lo que le ha pàdsado a los que organizaron la “suspendencia” de 2017. Ellos opinan que van a “volver a hacerlo” en cuanto se les presente la ocasión. Es tanta la inquina que sienten hacia España que harían cualquier cosa con tal de vivir separados de una Nación que nos une. Desgraciadamente,su fanatismo y sus ocurrencias no tienen límite.
Esta vieja conocida como Sor Citroen….
https://www.elmundo.es/espana/2023/03/29/64240ccffdddff68598b457b.html
Desviando la atención de la corrupción y la actuación política los medios oficiales con portadas de Ana Obregón.
Así se desvía la atencion del caso mediador ,de la directora de la guardia civil y su marido… ,de la crisis bancaria…
Esta todo controlado con El Mundo,20 minutos,ABC,el país…
¿Y que pasó con lo de la bonoloto imposible del otro día …?
Todo corrupto y controlado.
Y España parece una democracia y un estado de derecho. Y los jueces españoles parecen europeos.