Las 12 provincias clave para decidir el 23J en las elecciones generales
La batalla del 23J está centrada de forma especial en 12 provincias. Territorios donde PP, PSOE, Sumar y Vox se juegan el grueso de sus escaños. En buena parte se reparten entre tres y seis asientos. Además, el último podría estar bailando entre varios partidos, así que unos pocos votos decantarán cuál ocupa esa silla en el Congreso.
En España las elecciones generales son la suma de 52 elecciones en circunscripciones, 50 provinciales y 2 correspondientes a Ceuta y Melilla. Por lo que no hay una circunscripción única como sucede en las elecciones al Parlamento Europeo.
Los diputados se ganan provincia a provincia. Todas cuentan con 2 escaños como mínimo, independientemente de su población, a los que se suman 1 por Ceuta y otro por Melilla. Por lo tanto podemos hablar de 102 escaños fijos. Los otros 248 escaños hasta completar los 350 diputados se asignan provincia a provincia en función de su población, dándose el caso de que la provincia de Soria queda con 2 diputados y la de Madrid con 37.
Doce provincias acumulan 171 escaños, el 48,9% del total, mientras que los restantes 179 parlamentarios, el 51,1% se reparten en 40 circunscripciones.
Las dos provincias en donde más escaños hay en juego son Madrid y Barcelona, con 37 y 32, respectivamente. En total 69, el 19,2% del total de diputados. PP+Vox están entre 28 y 30, PSOE+Sumar aspiran a 29, y los separatistas a 11.
Le sigue Valencia con 16; 7 para la izquierda y 9 para la derecha. Después Sevilla y Alicante, con 12 cada una: con 10/11 escaños para PSOE/Sumar y 13/14 para PP/PSOE. Málaga es la sexta provincia, con 11 diputados: 4/5 para la izquierda y 6/7 para la derecha. Murcia en la séptima con 10 parlamentarios, estimados 3 para la izquierda y 7 para la derecha.
La octava es Cádiz, con 9 escaños: 4/5 para la izquierda y 4/5 para la derecha. Las cuatro siguientes, que completan la docena de grandes provincias son La Coruña, Baleares, Las Palmas y Vizcaya, con 8 cada una de ellas y cuya distribución será 12/13 para PSOE+Sumar, 13/16 para PP+Vox y 5 para independentistas.
El grupo de circunscripciones medianas, con 5, 6 o 7 diputados son 19 Santa Cruz, Pontevedra, Asturias, Granada, Zaragoza, Almería, Toledo, Tarragona, Guipúzcoa, Gerona, Córdoba, Ciudad Real, Castellón, Cantabria, Badajoz, Huelva, Jaén, Navarra y Valladolid y atesoran 111 parlamentarios. Las derechas PP+Vox se harán con 55/57 diputados, mientras que PSOE+Sumar conseguirán 41/43, CC obtendrá 1 y los separatistas 12.
Un total de 68 diputados se reparten en las 21 circunscripciones menos pobladas con 4 o menos escaños: las provincias con 4 escaños son 10, con ventaja para el PP de 3 a 1 en Burgos, Lugo, Orense, La Rioja. De 2/3 a 1/ 2 en las de León y Salamanca. Mientras hay empate de 2 a 2 en Albacete y Cáceres, y 1 a 1 en Álava y Lérida, aunque en estas dos los partidos separatistas obtienen 2 en cada una.
En las 8 circunscripciones de 3 escaños, el PP en solitario se impone por 2 a 1 al PSOE en siete: Ávila, Cuenca, Guadalajara, Huesca, Palencia, Segovia y Zamora. El caso de Huesca es especial, y precisamente esta es la razón por las que Pedro Sánchez alteró su agenda en la cumbre UE-Iberoamérica para volver en avión a un mitin y volver rápidamente a Bruselas.
Huesca es una circunscripción pequeña que reparte tres diputados. Sánchez hizo este «esfuerzo» por un escaño: aquí en 2019 fueron 1-1-1. Es decir uno para el PSOE, otro para el PP y otro para Ciudadanos. Ese último escaño está en juego, aseguran que por 200 votos para que se incline la baraja por el PP o por el PSOE.
En Teruel se da un reparto de 1-1-1 PSOE, PP y Teruel Existe. Soria cuenta con 2, 1 PSOE y 1 PP, y Ceuta y Melilla con 1 escaño cada una para el PP. Se da la circunstancia que ni Vox ni Sumar obtendrán representación en las circunscripciones de 4,3, 2 y 1 escaño.
Las circunscripciones pequeñas y algo más elevadas suponen la designación del 30,5% de las Cortes. Un dato que será clave para ganar los comicios del próximo domingo. Analizando los resultados que hubo en las últimas generales, de los 107 escaños distribuidos por esas pequeñas y pequeñas-medianas provincias, 42 los consiguió el PSOE, 37 los logró el PP, y Vox se hizo con 9. El resto fueron a parar a agrupaciones locales y dos a Unidas Podemos. Esto deja entrever que los dos grandes partidos se disputan la victoria electoral en estas zonas. Frente a ello, PSOE y PP consiguieron 31 y 21 en los grandes enclaves de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Alicante. La suma entre ambas localizaciones, en definitiva, supone un 60% del total de 120 escaños socialistas actuales y el 70% de los 89 populares, lo que hace que la posibilidad de vuelcos recaiga en estas zonas. En esta convocatoria de generales más todavía, dado que se percibe un repliegue del electorado hacia las propuestas bipartidistas. Por lo tanto, tendrán mucho que ver en el pulso entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo por la Moncloa.
Esta distorsión de la representación electoral viene dada por varios factores, pero el más importante es el número de escaños que se reparten por provincia o circunscripción. La Ley D´Hondt, a la que en ocasiones se culpa de todos los males, tiene una influencia limitada y a veces nula. Lo cierto es que cuantos más escaños se reparten, el resultado es más proporcional y la apelación al voto útil, en cierto modo, puede perder algo de sentido.