Tres cristianos que fueron detenidos por manifestarse pacíficamente cantando canciones al aire libre durante la pandemia del COVID-19 han salido airosos después de que el gobierno llegara a un acuerdo para poner fin a la demanda.

Gabriel Rench y Sean y Rachel Bohnet habían presentado una demanda civil contra el gobierno de la ciudad de Moscow (Idaho) y algunos empleados municipales tras ser detenidos por cantar himnos religiosos en septiembre de 2020. Los cargos estaban relacionados con la violación de las normas de uso de mascarillas y distanciamiento social impuestas durante la pandemia.

“Según los términos del acuerdo, ICRMP [Programa de Gestión de Riesgos de los Condados de Idaho] pagará una cantidad total de 300.000 dólares y todas las demandas contra el gobierno municipal y los empleados de la ciudad mencionados serán desestimadas sin perjuicio, junto con una exoneración de toda responsabilidad”, señala un comunicado de prensa de la ciudad del 14 de julio.

El comunicado explica además que “el ICRMP determinó que un acuerdo financiero en el caso era el mejor curso de acción para deshacerse de la demanda y evitar un procedimiento de litigio prolongado” y dice que “proporciona el cierre de un asunto relacionado con la pandemia sin precedentes del COVID-19 y los esfuerzos de la Ciudad para proteger al público durante un tiempo excepcionalmente difícil”.

Rench, que es miembro de la Iglesia de Cristo, además de consultor de relaciones públicas y comentarista conservador, dijo en un comunicado de prensa del 17 de julio que está “contento de que esta vergonzosa historia haya terminado”, al tiempo que lamentaba el alto coste del litigio y el acuerdo para los contribuyentes.

“La secta liberal que dirige Moscow ha tergiversado el código de la ciudad y ha elaborado órdenes sanitarias de emergencia inconstitucionales que actúan como modernas leyes de Jim Crow dirigidas a acosar a los miembros de nuestra comunidad cristiana, y esta discriminación debe terminar”.

El comunicado explicaba además que “las detenciones se produjeron el 23 de septiembre de 2020, en una protesta de Salmo canta en el estacionamiento del edificio. La protesta había sido organizada por la Iglesia de Cristo, en la que Gabriel Rench era diácono, y la consiguiente cobertura informativa se extendió por todas partes”.

“Muchos en todo el país se indignaron por la decisión del MPD de detener a manifestantes pacíficos, mientras que otros se ensañaron con la Iglesia de Cristo por comportarse, según ellos, de forma ilegal e insegura. Desde entonces, la Iglesia de Cristo ha demostrado tener razón acerca de la ciencia defectuosa detrás de las órdenes del COVID en Moscow, y ahora han demostrado tener razón en la ley también”.

Mientras se argumentaba que los mandatos eran “necesarios” para prevenir la propagación del virus e incluso salvar vidas, los datos confirmaban lo contrario. En julio de 2021, LifeSiteNews recopiló 47 estudios que desacreditaban la afirmación de que las mascarillas eran beneficiosas y 32 que probaban su impacto negativo.