Todo lo que hay que saber sobre el mantenimiento de cerraduras
Si se desea que las cerraduras tengan una mayor vida útil de muchos años y que no solo duren, sino que trabajen de forma eficiente a lo largo del tiempo, se debe tener en cuenta que estas requieren un buen mantenimiento de forma periódica.
Esto es importante sobre todo si se nota que la cerradura se pone dura o le cuesta accionar para abrir o cerrar, si la llave ofrece resistencia para entrar o si el bombín o cilindro no gira de manera fluida.
En todos estos casos, lo ideal es buscar a un cerrajero Sant Feliu de Llobregat o en la zona más cercana al domicilio que verifique el estado de la cerradura, si se le puede hacer mantenimiento para arreglar el problema que presenta o si, en cambio, se requiere una nueva.
Son los cerrajeros los más idóneos cuando se trata de los inconvenientes mencionados o de asesoramiento integral en todo lo que tiene que ver, no solo con cerraduras, sino con sistemas de seguridad, persianas de puertas o ventanas y su instalación, reparación o automatización o instalación de alarmas.
¿Por qué es importante hacerle mantenimiento preventivo a las cerraduras?
Mantener las cerraduras en buen estado es fundamental. Estas son un signo de seguridad en los hogares o centros de trabajo. No hay nada mejor que volver a casa tras un día agotador para disfrutar de la tranquilidad y la paz que se siente en el hogar.
Mucha gente no le presta atención a las cerraduras y no suele hacerle mantenimiento hasta que es muy tarde y sucede lo indeseable: no poder entrar a la casa o a la oficina. Entonces, se debe contactar con cerrajero de confianza para que se encargue del problema.
El asunto es que la cerradura averiada puede tener solución, pero también puede que no y se requiera de una nueva.
Es por eso que, de tanto en tanto (y de acuerdo al uso y ubicación de la cerradura) se llame al cerrajero para su mantenimiento rutinario.
En caso de cerraduras sencillas, a la hora de su instalación el cerrajero puede dar consejos elementales como la lubricación y limpieza que se puede hacer por cuenta propia. Pero, si se trata de cerraduras de alta seguridad, electrónicas o equipos complejos como circuitos de alarmas conectados a estas cerraduras, el mantenimiento debe hacerlo un técnico especializado.
En caso de equipos o cerraduras sofisticadas no solo se necesita un cerrajero que trabaje las partes mecánicas, será necesario alguien con conocimientos de electricidad y electrónica.
¿Cuándo necesita mantenimiento una cerradura?
Esta pregunta no tiene una respuesta única. El tipo de cerradura, la marca, las características de esta y si está instalada en una puerta exterior o una interior, así como la cantidad de personas que la usen determinan los lapsos en los cuales se limpian, engrasan o se revisan sus componentes.
Sin embargo, dos veces al año es lo recomendable para mantener las cerraduras en el hogar. Si se trata de zonas industriales o comerciales con muchos usuarios, sistemas de control de acceso o circuitos de alarmas integrales, puede que este tiempo se acorte a tres o cuatro meses.
Lo mismo sucede con puertas externas en climas muy húmedos, fríos o cercanos al mar. El ambiente con humedad o salitre requiere que las cerraduras se lubrican y limpian cada tres meses. En climas calientes o muy secos estos procedimientos pueden hacerse dos veces al año.
Ahora bien, si la cerradura no abre, la llave no entra o no sale, se siente resistencia para meter esta en la ranura o se presenta algún inconveniente, aunque no haya transcurrido el tiempo indicado habrá que llamar al cerrajero.
También hay que considerar el tipo y marca de la cerradura. Obviamente, los dispositivos de las mejores marcas del mercado y más caras ofrecen más tiempo de vida útil y un espaciamiento entre el período de un mantenimiento al otro.
¿Cómo hacer mantenimiento a una cerradura?
Lo aconsejable es que este trabajo lo haga un cerrajero de confianza. Las empresas de cerrajería suelen trabajar las 24 horas para cualquier tipo de contingencias y se encargan de abrir todo tipo de puertas y cerraduras con o sin vuelta de llave, esto lo hacen sin causar daños. Asimismo, hacen cambio, instalación y mantenimiento de cualquier cerradura en viviendas, sitios de trabajo o en coches y se encargan de la instalación, reparación y mecanización de persianas.
Para los “manitas”, los pasos para hacer mantenimiento a las cerraduras tradicionales son los siguientes:
1.- Trabajar siempre con la puerta abierta
Si se desea hacer mantenimiento sencillo como limpiar por fuera y lubricar la ranura de la cerradura, hay que abrir la puerta y aplicar aceite en aerosol en la rendija, meter la llave, girar varias veces y después limpiar todo varias veces con un paño seco.
2.- Desarmar el mecanismo
Esto solo debe hacerlo quien tiene experiencia o ha hecho esta labor varias veces con antelación. Hay que desmontar todo el mecanismo. Dependiendo del tipo de cerradura, habrá que quitar la champa, el aplique o embellecedor y sacar uno a uno los tiradores con un destornillador.
Cada mecanismo es diferente, pero al irlo desmontando, los tiradores quedarán a la vista y se deben ir quitando uno a uno. Es recomendable ponerlos todos en una superficie en el orden en el cual se van sacando para, al armar todo nuevamente, seguir la misma concatenación.
3.- Limpiar con alcohol
Teniendo todos los componentes sobre la mesa, se debe tomar un paño seco, limpio y que no deje fibras o residuos y embeberlo en alcohol. Con mucho cuidado hay que limpiar cada una de las piezas hasta que el paño salga limpio.
Es posible que se necesiten varios paños y varias pasadas con él hasta que todo esté reluciente y sin grasa o polvo. Tras esto hay que dejar secar las piezas, lo cual sucederá rápidamente gracias a la evaporación del alcohol.
4.- Lubricar las piezas
Esto se hace con lubricantes aerosoles especiales para cerraduras y en la medida correcta. Una a una se van engrasando cada uno de los mecanismos y se van colocando en el orden inverso a como se extrajeron.
5.- Armado completo y comprobación
Tras armar toda la cerradura se debe comprobar (con la puerta abierta) si abre y cierra de manera no forzada y correcta. Si esto es así todo ha sido un éxito. De lo contrario, hay que llamar a un cerrajero.