Estanislao de Kostka.- Entender porque la coalición de izquierdas, de extrema izquierda y nacionalista, van a llegar a un acuerdo sí o sí, aunque hagan el pertinente teatro de toda negociación política, tiene mucho que ver con la alfombra roja, con haberla pisado y no querer dejarla de pisar.

Unos cuantos de los que están en el Gobierno y alrededor de éste, nunca en su vida imaginaron una situación como ésta: poder, escoltas y jets privados… Y miles y miles puestos de designación política, unos 40.000 en toda España, que no se pueden perder; y centenares de chiringuitos, en lo que importa son los sueldos de los/las integrantes y no el objetivo para el que se crearon. Véase las asociaciones de violencia de género o las entidades feministas ultras.

Ninguno de los actores llamados al acuerdo de Gobierno, en ninguna otra situación electoral, alcanzarán un poder de decisión igual al que tienen ahora y, si no alcanzan el acuerdo, todos saldrán perdiendo ostensiblemente. Luego todos están interesados en llegar a un acuerdo de gobierno y que no haya nuevas elecciones.

Si hay elecciones el único beneficiado puede ser el Partido Popular, en un contexto en el que Vox se desinfla y pierde electorado, que vuelve al partido del que se fue. Su gestión interna está siendo nefasta.

El acuerdo lo será en el último momento. Más allá de la amnistía y el referéndum, lo que preocupa a los catalanes son las transferencias de competencias, la gestión de la pela. Y a los vascos, la libertad de los presos. Lo demás es propaganda para los suyos y de uso interno.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                        *Abogado jefe de AD y politólogo