Varias personas sostienen banderas de España y de Miguel Ángel Blanco, concejal de Ermua asesinado por ETA en 1997, frente a efectivos de la Policía durante la manifestación en Madrid

La decimosexta jornada de protestas en la calle de Ferraz de Madrid ha reunido a 1.500 personas -según ha informado la Delegación del Gobierno-. En las inmediaciones de la sede del PSOE se ha visto a varias personas portando banderas con el rostro de Miguel Ángel Blanco y la tensión ha ido en aumento entre los manifestantes que han ocupado las primeras filas de la concentración cuando han llegado personas encapuchadas y con la cara tapada.

Estos manifestantes, agolpados en la primera línea como viene sucediendo en jornadas anteriores, han comenzado a llegar a la concentración sobre las 21.30 y, tiempo después, han iniciado el lanzamiento de objetos a la prensa y a la Policía Nacional.

Sobre las 22.00, la Policía se ha puesto en alerta después de que los manifestantes derribaran el vallado de seguridad cortando las bridas que las unían y sobrepasaran los límites dispuestos por los efectivos antidisturbios. Entonces, han llamado a la calma por megafonía y han avisado de una intervención policial inminente si continuaba la lluvia de objetos.

Por otro lado, alrededor de las 21.00, en la calle del Tutor, cerca de Ferraz, un contenedor ha sido quemado provocando una pequeña columna de fuego. Los bomberos han actuado rápido para extinguir el incendio, mientras la Policía ha acordonado la zona.

Horas antes

El ambiente en Ferraz se encontraba tranquilo mientras iban llegando los primeros manifestantes a partir de las 17.30, que han protestado en la propia acera y respetando la circulación de los vehículos del lugar y las calles adyacentes.

Más tarde, alrededor de las 19.00, la Policía Nacional ha comenzado a blindar la zona al crecer la tensión y sobrepasar los límites de la acera, desde la esquina de Marqués de Urquijo, donde se han concentrado este sábado cuando precisamente se cumplen 16 días desde que empezaran las concentraciones.

Los manifestantes portaban banderas de España y pancartas en contra de la amnistía y de Pedro Sánchez, al tiempo que cantan en contra de los pactos del PSOE con los partidos nacionalistas catalanes.

Entre los manifestantes también se observaban banderas carlistas y franquistas y se coreaba ‘Rufián subnormal’ y ‘a Pedro Sánchez le gusta la fruta’, en referencia a las palabras en forma irónica que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, profirió a Pedro Sánchez en la primera sesión del debate de investidura en el Congreso de los Diputados.

Manifestación multitudinaria en Cibeles

Por la mañana, decenas de miles de personas con banderas de España y de la Unión Europea han abarrotado este sábado la madrileña plaza de Cibeles y las calles adyacentes. Convocada por más de un centenar de foros y asociaciones cívicas, el lema de la protesta era ‘No en mi nombre: ni amnistía, ni autodeterminación. Por la libertad, la unidad y la igualdad’.

A continuación, algunos manifestantes han intentado llegar al Palacio de la Moncloa y unas 200 personas han alcanzado hasta el muro más exterior, donde la Policía les ha retenido para impedir su paso.

Como consecuencia de la marcha, la A-6, sentido entrada a Madrid, ha permanecido cortada durante unas dos horas. La protesta ha provocado retenciones a la altura del kilómetro 6,500 de hasta tres kilómetros.

Fuentes policiales ha cifrado entre 300 y 400 el número de manifestantes que desde la Calle Princesa han llegado a la plaza de Moncloa y han rebasado el Arco de la Victoria caminando entre los vehículos que intentaban entrar en la capital.