El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha respondido hoy al Gobierno de Pedro Sánchez cuando dice que un concierto catalán es imposible que “la amnistía, de pronto, ya es constitucional” y antes no lo era, de modo que “somos más creíbles nosotros”.

“Será una realidad si aprovechamos la capacidad de influencia y el compromiso del Gobierno del Estado de abordar esta negociación como se firmó en los acuerdos de investidura”, ha señalado Aragonès en referencia a este nuevo sistema de financiación para Cataluña basado en la negociación bilateral con el Estado, al margen de otras autonomías.

“Tenemos tres años, en esta legislatura, en la que será posible, serán muchas las votaciones en las que serán necesarios nuestros votos. El presidente se comprometió en su investidura a abordar esta negociación, tendrá que cumplir los acuerdos de investidura. Si se van cumpliendo los acuerdos, podrá haber nuevos acuerdos”, ha advertido.

Aragonès ha hecho estas declaraciones en un desayuno informativo en Madrid, en el que ha continuado la exposición que ya hizo su consellera de Economía, Natàlia Mas, quien ayer propuso que Cataluña recaude el 100% de sus impuestos y después negocie con el Estado central el cupo que consideren a la caja común.

Este concierto catalán, similar al vasco o navarro, prevé, además, otra partida para “contribuir a la equidad entre territorios”, pero mediante un mecanismo “limitado en el tiempo”, lo que podría suponer que durante un tiempo no se hiciera realidad el cupo para compensar el déficit fiscal “que sufren los ciudadanos de Cataluña”.

Pere Aragonès ha presentado hoy ¿una propuesta de financiación singular para nuestro país”, el mismo que existe en el País vasco y Navarra, y que dé “un paso más en el fin del conflicto político” que deberá tener como final la autodeterminación.

En este sentido, ha dejado claro que el referéndum de autodeterminación sigue siendo su objetivo: “una vez conseguida la Ley de Amnistía, hay que abordar el fondo del problema”, que es un problema ¿de soberanía”, porque una mayoría de catalanes quiere decidir su futuro y hay unas instituciones españolas que hasta el momento lo han impedido.

“En un referéndum sobre la independencia se vota sobre la independencia. Estoy dispuesto a pactar las condiciones bajo las cuales consideraríamos asumible el resultado. Estoy dispuesto a hablar de la fecha, de cómo gestionar los resultados, que si fueran por la independencia generarían grandes cambios”, ha señalado.

Soberanía fiscal

Sobre el nuevo sistema fiscal, ha dicho también que “nos dirán que es imposible, será la respuesta del Gobierno del Estado, del PP o de VOX, de esos barones del PSOE que nunca fallan, movidos por el temor a que España se rompe. Pero en Cataluña no entendemos de imposibles, hay muchas cosas que nos dijeron que eran imposibles y que hoy son realidad”, ha señalado.

Esta soberanía fiscal debe basarse en la bilateralidad: “No voy a negociar con otros territorios, pero no voy a aceptar que se condicione por parte de otros territorios”.

Aragonès ha defendido asimismo que Carles Puigdemont se presente como candidato a las elecciones autonómicas y ha considerado que tanto Junts como el PSC deberían incorporarse a su propuesta de financiación porque así lo quieren sus electores.