Feijóo se implica en la recta final de la campaña vasca y visitará las tres provincias la próxima semana
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, se implicará de lleno en la recta final de campaña vasca para arropar a su candidato a lehendakari, Javier de Andrés, y visitar las tres provincias del País Vasco antes de la cita con las urnas del 21 de abril, según han confirmado a Europa Press fuentes de la formación.
Así, este domingo 14 de abril, tras asistir ayer a la toma de posesión de Alfonso Rueda como presidente de la Xunta de Galicia, el jefe de la oposición se desplazará a Bilbao para un acto de campaña con el PP vasco.
Los populares subrayan que ahora el PSE es tercera fuerza en Euskadi, igual que en Galicia. “El radicalismo del PSOE ha elevado a Bildu en País Vasco y al BNG en Galicia. Ya quisieran los socialistas empezar el tramo final de la campaña vasca formando un Gobierno autonómico en cualquier territorio”, proclaman fuentes del equipo de Feijóo, que aseguran que el PSOE planteó la campaña gallega como un “plebiscito” que llevaría a la caída de Rueda y del presidente del PP y, sin embargo, han revalidado la mayoría absoluta en la Xunta.
Sin embargo el escenario vasco es diferente. Los populares buscan reeditar el modelo de Durango, como indicaron el pasado viernes donde lograron evitar que volviera a gobernar el partido de Arnaldo Otegi gracias al voto de un solo concejal del PP, el de Carlos García que decantó la balanza al PNV. Por ello, los populares insisten que son la garantía de que Bildu no entre en el gobierno ya que el resto de formaciones no lo pueden garantizar de la misma manera.
Feijóo ha fijado una intensa agenda para los dos últimos días de campaña. Así, el jueves 18 de abril estará por la tarde en San Sebastián (Guipúzcoa). El último día hará “doblete”, ya que el viernes por la mañana estará en Vizcaya y, por la tarde, pondrá el broche final a la campaña con un acto en Vitoria junto al PP vasco, han señalado fuentes del partido.
Feijóo ya estuvo en la capital alavesa el primer día oficial de campaña, el viernes 5 de abril. Volvió al País Vasco tres días después para respaldar a su partido con dos actos, uno de nuevo en Vitoria y otro en Getxo (Vizcaya).
El presidente de los populares está combinando su presencia en Euskadi con sus viajes a Cataluña, que celebra elecciones el 12 de mayo. De hecho, el pasado jueves visitó una cooperativa de Ivars d’Urgell en Lleida junto a su candidato a la presidencia de la Generalitat, Alejandro Fernández, y volverá a recalar dos días en Cataluña la próxima semana.
Hace cuatro años, el entonces presidente del PP, Pablo Casado, optó por la coalición PP+Cs para las elecciones vascas, una suma que se demostró fallida al lograr solo seis escaños, lejos del resultado esperado y finalmente, uno de los diputados naranjas terminó en las filas de los populares. Además, entonces no consiguieron frenar la entrada de Vox en el Parlamento vasco que logró un diputado. Ahora, los populares aspiran a mejorar sus resultados y acercarse a los socialistas vascos, que lograron 10 actas en 2020 y crecer en Vitoria y Guipúzcoa.
En sus mítines, Feijóo presenta al PP vasco como “la única alternativa a todos los satélites políticos de Sánchez del País Vasco”, al tiempo que denuncia que el único proyecto común del PNV y de Bildu es avanzar hacia un “procés a la vasca”. Fue ayer cuando abogó por emular el modelo gallego donde ensalzó la “estabilidad y la unidad” de esa forma de hacer política.
Feijóo ha pedido el voto a todos los votantes del PNV que no quieren que sus votos “avalen todas las políticas de izquierda”. También se ha dirigido a los votantes socialistas que están hartos de que Bildu les marque el paso y su candidato, Javier de Andrés ha centrado la campaña en clave económica.
El líder del PP ha trasladado el mensaje de que su partido es el que puede reunir a todos los desencantados de la política, “los que están hartos de que sus votos al PNV apoyen las políticas de Bildu y Podemos; los socialistas que añoran la igualdad y un partido constitucionalista; y los que buscan una alternativa política y moral a Bildu”, según aseguró en un reciente acto ante cargos de su partido.