El presidente de Adif, Ángel Contreras

El actual presidente de Adif, Ángel Contreras, aparece señalado en un informe policial del «caso Koldo» como una de las personas que pudo participar en el supuesto amaño de la adjudicación de contratos de infraestructuras vinculadas de la empresa pública. Según se infiere del escrito, las actuaciones de Koldo García con el entorno del Ministerio de Transportes habrían continuado hasta fechas muy recientes, teniendo en cuenta que algunas de las escuchas que recoge el documento datan de febrero de este año, pocos días antes de las detenciones.

El documento detalla una serie de conversaciones telefónicas intervenidas entre García, exasesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos, con el empresario Daniel Fernández Menéndez, administrador de la empresa Obras Públicas y Regadíos SA (OPR), y con su hermano, Antonio Fernández Menéndez. Tal como detalla, Daniel se habría hecho previamente con un contrato de Adif y, según deducen los agentes de las conversaciones captadas el 19 de febrero de 2024, este empresario quería que García influyera en la adjudicación de un nuevo contrato de emergencia por un deslizamiento.

Después, confirmó con Antonio Fernández que su hermano Daniel le había enviado un mensaje sobre el contrato que quería que le adjudicaran, haciendo hincapié en que le había dado todos los detalles. «Cuando digo todo es todo», subraya. Después, en otra conversación con Daniel Fernández, García indica que «Ángel sabe que nos ha quitado 600.000€ en esa obra y debe ayudarnos pero ya sabes».

El informe de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) data del 14 de mayo y entró en la Audiencia Nacional (AN) ayer 20 de mayo. Allí, el juez Ismael Moreno instruye el procedimiento judicial del «caso Koldo» que investiga una trama para el cobro de comisiones ilegales en nueve contratos de emergencias que se adjudicaron durante la pandemia con distintas administraciones. Los dos primeros se concedieron en el entorno de Transportes, cuando Ábalos era titular de esa cartera, y Koldo, su hombre de confianza. Los dos primeros contratos de Soluciones de Gestión –la sociedad de la trama- fueron de Puertos del Estado y Adif, dependientes del Ministerio de Transportes.

El hermano del empresario, Antonio, quedó de encontrarse con Koldo el 21 de febrero de 2024. Ese mismo día, el exasesor de Ábalos también habría intentado reunirse con el que pudiera ser Ángel Contreras, el presidente de Adif. Koldo le habría propuesto reunirse antes, el 16 de febrero, mediante un mensaje: «Muy buenas marqües yo ando en Madrid se que será difícil verte pero si puedes dime ó comer o cenar o sin no 5 m. Pero si no es posible dime un día de la semana; que viene si puedes por fa lili».

La respuesta de Ángel fue: «Hoy me resulta Imposible, la semana qué viene que día te va mejor?». Y después le indicaba: «Solo tengo hueco el miércoles 10:15-11:00», a lo que Koldo García respondió: «Perfecto».

Según los agentes, «la importancia de esta reunión radica en que Ángel es en la actualidad el Presidente de la E. P. E. Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (en adelante Adif)». Y recuerdan que en el momento de los hechos del procedimiento del «caso Koldo», es decir, cuando se adjudicó el contrato de emergencia a Soluciones de Gestión, era el director general de Conservación y Mantenimiento de Adif, que adjudicó un contrato por un total de 12,5 millones de euros.

Los vínculos de Adif con la sociedad de la que Daniel Fernández es titular es que esta empresa se adjudicó un contrato de obra pública de la que habló con Koldo García. Pero quería hacerse con otro más. Tal como se desprende del informe, García parece ser el nexo entre los dos hermanos y la empresa de Transportes. Que los dos encuentros se produjeran el mismo día –el de Koldo con Ángel Contreras y el de Koldo con Antonio Fernández– «resulta reseñable». «Sigue en pie miércoles? Por si hay novedades?», preguntó Antonio Fernández, y Koldo confirmó. Al día siguiente, Fernández volvía a interesarse: «A qué hora quedamos miércoles?». García contestó: «Sería antes no». Después, envió un segundo mensaje que fue eliminado.

Al finalizar la conversación, Koldo explica: «Este lo tiro ahora eh», aludiendo a deshacerse del móvil. Con estos antecedentes, el 20 de febrero se incautó el teléfono de Antonio Fernández por «ser de interés para esta causa» por contener indicios relevantes.