Alerta por el auge entre los jóvenes españoles del karkubi, la droga barata llegada de Marruecos
La Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) ha alertado durante el 30º Congreso Nacional de Medicina General y de Familia sobre la proliferación y consumo en nuestro país de varias sustancias psicoactivas y drogas sintéticas entre los jóvenes españoles.
En especial han hecho hincapié en el caso del karkubi, una droga alucinógena originaria de Marruecos que se fabrica con clonazepam o fenobarbital, unos medicamentos de uso y disponibilidad en farmacia, a los que también se pueden añadir otras sustancias, como hachís o pegamento.
El clonazepam es un fármaco antiepiléptico que pertenece al grupo de las benzodiazepinas, medicamentos que actúan sobre el sistema nervioso central produciendo un efecto ansiolítico, hipnótico (favorecen el sueño) y de relajación muscular con acción anticonvulsivante.
Por su parte, el fenobarbital es un barbitúrico que también se usa para controlar las convulsiones y la ansiedad.
Puede provocar psicopatías
Este tipo droga, cuyas cápsulas son conocidas en el mercado negro como “cartucho”, “recarga”, “ampolla roja” o “Guadalupe”, es muy adictiva y puede provocar alucinaciones y psicopatías.
Su ingesta puede provocar, además, como alertan los médicos de familia, amnesia, confusión, mayor agresividad y puede derivar en intoxicaciones graves e incluso estados de coma. Su uso está muy extendido debido a su bajo coste y fácil acceso, ya que las mafias consiguen los medicamentos para elaborar las drogas con recetas ilegales.
Chemsex
Los expertos de la SEMG también han destacado el auge de las drogas utilizadas en la práctica del Chemsex, o consumo de drogas con fines sexuales. Estas sustancias principalmente son tres: mefedrona (mefe), el GHB/GBL (G) o la metanfetamina, así como otros derivados del éxtasis que se mezclan con otras drogas, como el alcohol y la cocaína.
Otra de las drogas que se ha puesto de moda entre los jóvenes son las catinonas, un estimulante similar a la anfetamina derivado de la planta Catha edulis (khat), un arbusto cultivado en el este de África y en la península arábiga. Conocida como la cocaína africana, se ha extendido como una plaga en Alemania y también ha llegado a nuestro país, con unos derivados pueden ser muy peligrosos para la salud. Las catinonas sintéticas se conocen comúnmente como “sales de baño”.
Por otra parte, los médicos también alertan del consumo en nuestro país de la psilocibina, una sustancia alucinógena que se obtiene de ciertos tipos de hongos comestibles oriundos de las regiones tropicales y subtropicales de Sudamérica. Su consumo produce alucinaciones visuales y auditivas y alteraciones profundas de la conciencia después de unas cuantas horas de haberse ingerido.
En este caso, esta sustancia también se está investigando para el tratamiento de enfermedades psiquiátricas.
Jarabes de uso común para drogarse
Además de todas estas drogas “nuevas”, los médicos han puesto el foco en los fármacos de abuso, en concreto de las ‘nuevas benzodiacepinas’ que ya no pasan por el sistema farmacéutico, sino que se venden a través de internet y de contrabando para uso recreativo. En este grupo también se encontrarían fármacos de uso cotidiano, como anestésicos, anticatarrales y jarabes para la tos, o el fentanilo y sus derivados y la ketamina, que son fármacos utilizados e indicados para el dolor y cuyo consumo está causando estragos en otros países.
La Razón