Biden sepulta su candidatura en el debate: se abren apuestas para su remplazo
Oriana Rivas.- El esperado debate entre Donald Trump, expresidente y candidato republicano, y Joe Biden, actual mandatario y candidato demócrata, se llevó a cabo este jueves en la noche para dar a los electores —sobre todo a los indecisos y en los estados péndulo— mayor claridad sobre ambas propuestas. Temas como la crisis migratoria, la política exterior y los casos judiciales que rodean a ambos políticos, se pusieron sobre la mesa.
Sin embargo, los momentos más destacados del debate no fueron los argumentos sino aquellos episodios en los que Biden lució confundido o se quedó sin palabras. Trump no desaprovechó la oportunidad para exponer las debilidades de su rival, asegurando incluso que “no entendió” una de las frases del mandatario demócrata. Las redes sociales estallaron e incluso un reporte de la agencia de noticias Associated Press citó una persona “familiarizada con el asunto” que aseveró que Biden estaba pasando por un resfriado. Pero la justificación no fue suficiente.
El desastroso desempeño de Biden abre la puerta para su inevitable remplazo. Tanto así que David Axelrod, estratega que trabajó para Barack Obama, aseguró que la única persona que podría remplazar a Joe Biden como candidato del partido es el propio mandatario. “Solo él puede decidir”, agregó. Por su parte, un panel de la cadena CNN calificó sus respuestas como “poco coherentes”, mientras que la vicepresidente Kamala Harris intentó salir al paso de la críticas considerando al mandatario como “firme, comprometido y valiente”.
A pesar de los intentos por mantener a flote al abanderado demócrata, fue imposible contener los cuestionamientos como los que lanzó el senador republicano Tom Cotton: “Después de solo 13 minutos, este debate ha dejado claro: un voto por Biden es un voto para nombrar presidente a Kamala Harris”, escribió en X.
Sobraron los ataques personales
No hubo apretón de manos al inicio del debate entre Trump y Biden, lo cual asomaba desde el principio un ambiente tenso en los estudios de CNN en Atlanta. Todos los temas importantes estuvieron incluidos, colándose en el medio ataques personales relacionados con el caso judicial contra Trump y los pagos a la actriz porno Stormy Daniels.
Biden aprovechó para llamarlo “delincuente convicto” (el mismo calificativo que semanas atrás pidió usar Álex Soros, el hijo del multimillonario progresista George Soros, a los medios estadounidenses). Pero no tardó en recibir respuesta, ya que el expresidente republicano le recordó el veredicto de culpabilidad sobre su hijo, Hunter Biden, en el caso relacionado con la compra de armas.
El mandatario demócrata dijo “estar animado” minutos antes del debate, como una forma de responder a las acusaciones de Trump sobre un supuesto dopaje que lo ayudara a mantenerse lúcido durante el cara a cara. Aún así, su intención de entrar al escenario proyectando fuerza y energía terminó con críticas de funcionarios demócratas sugiriendo “que no está cumpliendo ni siquiera con las expectativas más bajas”, según citaron medios locales. En otras palabras, si hay un momento para objetar la capacidad de Biden para competir para un nuevo periodo presidencial, es justamente este.
Sobre la política exterior
De todos los tópicos discutidos, la política exterior acaparó gran parte del tiempo. La caótica retirada del ejército estadounidense de Afganistán en el año 2021 dirigida por Biden, la guerra de Rusia contra Ucrania, así como el conflicto entre Israel y el grupo terrorista palestino Hamás son para el candidato republicano responsabilidad del actual inquilino de la Casa Blanca.
“Somos un país fallido. La política militar de Biden es una locura. Esas guerras nunca terminarán con él, nos va a llevar a la tercera guerra mundial”, advirtió en este debate que antecede al que ocurrirá el 10 de septiembre, organizado por la cadena ABC News.
Trump asegura que de llegar a la Presidencia, acabará con todos los conflictos desatados durante la Administración Biden. Mientras él hacía esta afirmación, en la campaña demócrata estaban preocupados. El desempeño de su candidato no fue el esperado.
A mi se me escapa algo, y con el tiempo lo sabremos. Porque aunque Biden sea un terco y quiera continuar, está claro y más que claro, que hay algún poderoso lobby que lo apoya contra viento y marea, para que sea su marioneta. Porque si no, no se entiende que todo un partido Demócrata americano, no pueda disuadir a un viejo chocho que dimita, que no estamos hablando de una monarquía absoluta divina ancestral. Algo hay y si continua este viejo, echémonos a temblar porque cualquiera sabe lo que trama ese poderoso lobby.
Tres cosas
Biden “lució confundido”, o sea, que se ha lucido.
Lo de Kamala Harrir, no tiene nombre.
Y Trump, que se cuide mucho, pero que mucho……