Ataque frontal en Reino Unido a los barceloneses que protestan contra el turismo
“Ungrateful Squirts” (en castellano, “chorros desagradecidos”). Así tituló el Daily Mail la imagen principal de su reportaje, acerca de la manifestación contra el turismo masificado que se produjo en Barcelona, en la que se pudo ver como muchos de los participantes portaban pistolas de agua y las usaban contra los turistas que comían al aire libre.
El rotativo británico se hizo eco de esta protesta multitudinaria en la Ciudad Condal, en la que participaron personas integrantes de asociaciones vecinales, ecologistas y vecinos, que expresaron su hartazgo ante las consecuencias que acarrea el modelo turístico actual, entre ellos, las dificultades en el acceso a la vivienda. “Barcelona no está en venta”, “vecinos en peligro de extinción” o “Barcelona no es Disneylandia” fueron algunos de los múltiples mensajes que pudieron leerse.
También otros más directos y escuetos, como “Tourists go home” o “Tourism kills the city”. La Guardia Urbana cifró en casi 3.000 los participantes en la manifestación. En el manifiesto, expusieron lo siguiente. “La ciudadanía sufre directamente las consecuencias del turismo con el aumento de los costes de la vida, de los alquileres, de los servicios públicos y la pérdida de la identidad local de la ciudad”.
“Suprimiremos más de 10.000 pisos turísticos”
A través de X, el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, insistió en el compromiso firme del ayuntamiento para limitar la masificación turística. Un problema que sufren otras ciudades costeras españolas, como Málaga, Palma de Mallorca y Tenerife. “En el marco del Plan Vivir de vivienda, suprimiremos más de 10.000 pisos turísticos para que vuelvan a ser de uso residencial”, dijo.
También mencionó la intención de su gobierno municipal de aumentar el recargo del impuesto turístico a 4 € por noche, y limitar el número de cruceristas que no pasan noche en la ciudad. “Hemos puesto en marcha un plan pionero de gestión de 16 Espacios de Gran Afluencia, incluyendo zonas como la Sagrada Família y el Park Güell”.
El objetivo es que “a partir de 2029 desaparezca la figura de piso turístico” tal y como se concibe actualmente y se cese completamente la actividad de uso turístico en pisos residenciales, una propuesta que primero deberá ser aprobada con el resto de grupos del Consistorio.
Protestas en Tenerife y Málaga
Barcelona no ha sido la única ciudad en decir “basta” al turismo masificado. En diferentes ocasiones, también lo ha hecho Tenerife. Allí, a partir del próximo año, todo turista que no sea residente en la isla deberá abonar una tasa para entrar en algunos espacios naturales protegidos. En sus siete capitales, además de en La Graciosa, se dieron cita más de 57.000 personas (100.000 para los organizadores) para protestar contra los efectos del actual modelo turístico.
En Málaga, las protestas de los vecinos contra el turismo masivo también han jugado un papel fundamental para que el ayuntamiento limitara el registro de más viviendas de uso turístico. El equipo de gobierno liderado por Francisco de la Torre estableció con la nueva ordenanza municipal que solo los inmuebles con entrada independiente podrán ser destinados a uso vacacional.
Lo que le pase a Barcelona, nos importa un bledo al resto de los españoles…
No pluralice porque eso no es cierto.
A mí sí que me importa y mucho. Es parte de mi patria como cualquier otra provincia.