Jonathon.- “¡Esto es Francia!” Emmanuel Macron alardeó de X mientras se desarrollaba la ceremonia de apertura olímpica en París. Desgraciadamente, esto era lo que temía todo el mundo.

La ceremonia contó con una representación blasfema de la Última Cena, con drag queens como las discípulas y Barbara Butch, una DJ lesbiana con sobrepeso, como el Señor Jesucristo. El Comité Olímpico Internacional ya emitió una pseudodisculpa y eliminó el video de su canal de YouTube, pero Butch fue bastante claro en que se trataba de una inversión deliberada .

Hubo más, pero baste decir que después de esa ceremonia, no sorprende que el Comité Olímpico haya aprobado para competir como “mujeres” a dos atletas masculinos que previamente fueron descalificados del Campeonato Mundial de Boxeo Femenino en marzo de 2023 en Nueva Delhi. India, por tener “cromosomas XY”: Lin Yu-Ting de Taiwán e Imane Khelif de Argelia. En aquel momento, el presidente de la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), Umar Kremley, anunció que varios boxeadores estaban siendo descalificados después de que “una serie de pruebas de ADN ” realizadas “descubrieran a atletas que intentaban engañar a sus colegas y hacerse pasar por mujeres”. ”

La IBA emitió una declaración pública anunciando que “un boxeador de Argelia, Imane Khelif, fue excluido del Campeonato Mundial de Boxeo de la IBA debido a que no cumplió con los criterios de elegibilidad de la IBA”. El Comité Olímpico de Argelia calificó la decisión de la IBA como una “conspiración” para negarle a Argelia una medalla de oro y señaló en ese momento que esperaban que Khelif pudiera pelear en los Juegos Olímpicos de París.

Después de la descalificación, la boxeadora mexicana Brianda Tamara publicó sobre su experiencia boxeando con Khelif en el campeonato en X. “Cuando peleé con él me sentí muy fuera de mi alcance”, dijo Tamara. “Sus golpes me dolían mucho, creo que nunca me había sentido así en mis 13 años como boxeador, ni en mis sparring con hombres. Gracias a Dios ese día salí sano y salvo del ring y que bueno que finalmente se dieron cuenta”. Ahora existen serias preocupaciones de que Khelif y Yu-Ting puedan lesionar a las boxeadoras. Aquí está Khelif peleando en un combate anterior, claramente mucho más fuerte que su oponente:

La taiwanesa Lin Yu-Ting, que previamente ganó cinco medallas de oro en torneos de boxeo femenino, también fue descalificada y despojada de una medalla de bronce. Ahora, en los Juegos Olímpicos de París, Khelif tiene previsto pelear contra Angela Carini de Italia el 1 de agosto, y Yu-Ting será emparejado con una luchadora al día siguiente.

Marshi Smith del Consejo Independiente de Deportes Femeninos (ICONS) habló con Reduxx sobre el tema:

“La decisión del COI de poner fin a los controles de verificación de sexo en 2000 ha causado desconfianza y confusión en los deportes femeninos desde entonces. Su decisión de 2021 de traspasar la responsabilidad de los criterios internacionales de elegibilidad a organismos deportivos individuales ha resultado en estándares variados y un caos generalizado entre los atletas, entrenadores, funcionarios y el público. En el boxeo, la reciente división polémica entre la IBA y el COI ha puesto ahora el poder de elegibilidad olímpica en manos de las federaciones nacionales de boxeo, permitiendo a países como Argelia y Taiwán establecer sus propios estándares y continuar colocando a los boxeadores masculinos en el ring con las atletas femeninas en el ring. combate por las medallas olímpicas femeninas”.

Esto, afirmó Smith, ha llevado a un escenario realmente desagradable. “El abuso físico de las mujeres en un escenario olímpico elimina la integridad de todos los eventos olímpicos y pone en riesgo de lesiones de por vida o incluso la muerte para las atletas. No se puede permitir que este engaño continúe”. Un estudio de 2020 realizado por la Universidad de Utah concluyó que el golpe de un hombre es, en promedio, entre un 160 y un 170% más poderoso que el de una mujer.