Reivindicando a Federico García Lorca
Desde aquellas lecturas colegiales de “Bodas de sangre” o “La casa de Bernarda Alba”, hasta ya en tiempos universitarios al comprar una antología, y no hace mucho con otra nueva antología regalada por un ilustre paisano con esos extractos del “Libro de poemas y canciones”, “Poemas del Cante Jondo”, “Romancero Gitano”, “Poeta en Nueva York”, “Diván del Tamarit” y “Llanto por Ignacio Sánchez Mejías”, he confirmado mi devoción por tan eximio artista, también recordado en la música de Paco Ibáñez y en algún retazo de Ana Belén.
Con mucha hipocresía, creo que se menta mucho a Lorca para no sé qué, pues parece haber mucho interés en su sexualidad o en su política, cosas por las que nuestro autor nunca “se dejó llevar” aunque todo el mundo sabía lo que era y cómo era. Se habla mucho de Lorca pero de lo muy poco que realmente se habla es de su grandiosa obra poética, de sus estudios y amor sobre el flamenco, de su sensibilidad artística, de su inspiración, de su prolija capacidad, del maderamen de su cultura.
A decir verdad, poco me importa con quién gustaba Lorca de acostarse y levantarse, y poco me importa su ideología, que por otra parte, aun reconocido hombre de izquierdas, jamás fue un “apólogo pertinaz”. Por eso mismo fue tan injustamente asesinado, como injustamente asesinados fueron otros tantos españoles. Por ejemplo Pedro Muñoz-Seca y Ramiro de Maeztu, asesinados bajo la responsabilidad de Santiago Carrillo, el carnicero de Paracuellos, ése mismo que siempre fue despreciado por Enrique Líster por traidor y que en laicas procesiones ha sido tan paseado por la oligarquía y la farándula; o su coetáneo y amigo José María Hinojosa, también andaluz, y fusilado por ser tradicionalista. Lorca, amigo de Salvador Dalí, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, y tantos buenos gerifaltes de las artes, no debería ser “clasificado” con esquemas paupérrimos de manipuladores baratos que apenas lo han leído y que no le llegan ni a la suela de los zapatos; máxime cuando en España la retaguardia y el cambio de chaqueta parecen ser tan rentables. Por otra parte, los cuentos de alcoba se los dejo a quien gusten de la prensa rosa o amarilla, o entrambas juntas y revueltas.
Lorca es universal, escribe en una lengua universal con estilo propio. Lorca es la poesía del desgarro, de la angustia, del tipismo, de lo exótico, lo mundano y lo del más allá. Un artista completo, un dramaturgo insaciable, un buscador fructífero, un fenómeno innato. Fue mostrando, pues, sus versátiles rasgos desde que se formó en la Residencia de Estudiantes. La belleza simbólica, el lirismo descarnado, el cualitativo ritmo…. A lo largo y ancho de su carrera García Lorca va a demostrar que nació para ser una gloriosa figura mundial de las letras.
Cierto es que hay alguna “fase surrealista” de la que no gusto demasiado, al menos en cuanto a producto artístico se refiere; empero, no deja de sorprenderme siempre ora como maestro de la rima ora como maestro del verso libre; maestro, sí, maestro aventajado de la esplendorosa Generación del 27. Exprimiendo sentimientos, martilleando soledades, motivos como el limón, la sangre, la miel; pellizcos de romanticismo, tradición y vanguardias florean en la obra del que, como dice mi ilustre paisano el Sr. D. Manuel Fernández Alvarado, si no lo hubieran matado, cuánto más (Y bueno) hubiera escrito… Que eso es lo importante de Federico García Lorca, al que siempre hay que reivindicar pero abandonando ya los morbos estúpidos, por favor.
Para usted.D.Antonio una de mis humildes poesías a los siempre poetas. Saludos —————– Nada ha cambiado, Don Federico, -Nada ha cambiado, Don Federico, seguimos, naciendo de carne sin sentidos. Creciendo, entre las babas de los paridos. Creemos, saber de la vida, controlar las emociones, y toda sangre bebida arrojamos a los halcones-. Su hechizada sombra briosa, brotó, en Fuente Vaqueros (Granada), con parto en suertes y la noche izada; Con todo el deber hecho en suerte, letra, poesía y muerte… Fusilado por no permutar las dicciones, cruel fue su suerte. Entre bandos opuestos a devociones amputado, fue su presente. Aquella… Leer más »