La representante republicana Nancy Mace, de Carolina del Sur, ha presentado una resolución para prohibir que las mujeres transgénero utilicen los baños y vestuarios designados para mujeres biológicas en el Capitolio de los Estados Unidos. Según el documento, la medida busca restringir el acceso a las «instalaciones para un solo sexo» únicamente al sexo biológico de cada individuo, aplicándose tanto a los miembros de la Cámara de Representantes como al personal.

Mace compartió su propuesta a través de la red social X, donde declaró: «Los hombres biológicos no tienen cabida en los espacios privados de las mujeres. Punto. Punto final. Fin de la historia». Su iniciativa ha provocado un acalorado debate en el Congreso, ya que ha sido presentada pocas semanas de que Sarah McBride, representante demócrata electa por Delaware, asuma el cargo como la primera mujer transgénero en el Congreso.

Ante las preguntas de la prensa sobre si su resolución estaba dirigida específicamente contra McBride, Mace fue contundente: «Sarah McBride no tiene voz ni voto en esto», y añadió que «es un hombre biológico que intenta imponerse en los espacios de las mujeres y no voy a tolerarlo». Estas declaraciones han generado críticas de sectores progresistas que consideran la medida discriminatoria y provocadora.

La resolución presentada por Mace refleja una postura conservadora que defiende la separación estricta de los espacios por sexo biológico en instalaciones públicas. De ser aprobada, supondría una restricción significativa para las personas transgénero dentro del Capitolio, vetando su acceso a áreas como baños y vestuarios, según lo establecido en el texto de la propuesta.