La trama de los hidrocarburos utilizaba los mismos sistemas cifrados que los narcos
Unos mensajes en aplicaciones cifradas de difícil acceso. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se enfrentan a un auténtico desafío para interceptar las comunicaciones que mantenían los investigados por la trama de los hidrocarburos, que presuntamente estaría encabezada por Claudio Rivas. Los detenidos en el marco de estas diligencias utilizaban dos sistemas: el Signal y el Zangi, que, curiosamente, también emplean los narcos en la actualidad para entorpecer las pesquisas, según informan fuentes policiales.
El caso de la trama de los hidrocarburos sigue bajo secreto de sumario, decretado por parte del titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz. El volcado de los dispositivos móviles de los detenidos está revelando una gran información y el juez podría ordenar abrir piezas separadas a tenor de los datos obtenidos.
Todo ello a pesar de que los encausados guardaban unas grandes medidas de seguridad para evitar que los investigadores pudieran interceptar sus comunicaciones. Fuentes del caso señalan a LA RAZÓN que Claudio Rivas y el contable de Villafuel S.L., Francisco Javier Cillán Contreras mantenían gran parte de sus conversaciones a través de Signal y Zangi. Así, también se ponían en contacto con Luis Alberto Escolano.
El papel de Cillán Contreras es predominante ya que al manejar las cuentas de las sociedades tenía en su poder datos muy valiosos para la investigación. Los agentes de la UCO detuvieron a este hombre y le incautaron sus dispositivos móviles que, a día de hoy se siguen analizando. También se le aprehendió una memoria externa donde tenía documentación importante sobre el entramado.
Los investigadores de la Guardia Civil conocen de primera mano que los detenidos tenían en Zangi su principal refugio. Esta es una aplicación de llamadas y mensajería instantánea gratuita similar a WhatsApp. Esta compañía, que tiene su sede en Silicon Valley, en Estados Unidos, asegura que su producto consume la menor cantidad posible para sus clientes por seguridad y para ofrecer un servicio más rápido.
Zangi y Signal
“A diferencia de otros, Zangi Messenger no almacena ni divulga su información personal ni sus mensajes a nadie, porque en primer lugar no tenemos acceso a sus mensajes”, promociona la aplicación en su dominio. “Zangi se ha negado a recopilar o tener acceso a sus datos, eliminando así la posibilidad de seguimiento, entrada de intrusos o puertas traseras que conduzcan a sus datos personales”, se vanaglorian.
Esta plataforma aplica “un cifrado de grado militar de varios niveles, lo que garantiza la total confidencialidad y autenticidad de llamadas y mensajes, incluso en las redes más vulnerables u hostiles”. Su hermetismo propicia que cada vez más crezcan sus nuevos clientes, que buscan una línea segura para desarrollar sus actuaciones.
A pesar de todas estas cautelas que guardaban los investigados, la UCO podría acceder a todas las conversaciones y mensajes que mantenían entre ellos. El motivo es que las mismas se guardan en los dispositivos móviles y si alguno de los usuarios no borró los mismos aparecerán reflejados en las diligencias. Los agentes de la Guardia Civil aún están desarrollando el volcado de estos terminales que fueron incautados en las intervenciones.
Fuentes del caso subrayan que en las próximas semanas se podría abrir de forma parcial las diligencias para que las defensas de los detenidos puedan estudiar las acusaciones y las pruebas que pesan sobre ellos. Una medida que ha sido solicitada de forma reiterada por los abogados personados en la causa.
Otra de las aplicaciones que utilizaba de forma asidua la trama es Signal. Un chat que es de sobra conocido por los agentes, especialmente por los que se dedican a estudiar a las organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico. WhatsApp y Telegram pasaron a mejor vida desde hace tiempo para las bandas.
Las aplicaciones encriptadas
Muchos de estos mensajes cifrados solo los pueden llegar a comprender el emisor y el recepto de los mismos. Las llamadas no quedan registradas y también se puede hacer un borrado masivo de la información que tienen los distintos usuarios. Esta última plataforma está perdiendo adeptos en los últimos años.
Y es que los narcos están desarrollando software personalizado que han creado los hacker previo pago para ello. Uno de los últimos desmantelados por la Policía Nacional fue el denominado “Matrix”. Los investigadores detuvieron a sus creadores y han conseguido apoderarse de una gran cantidad de información que podrá dar un impulso a las investigaciones activas.
Precisamente, la caída de SKY ECC fue una de las claves, en todo el continente, para apresar a los líderes de la Mocro Maffia que tenían en esta red un canal de comunicación seguro para negociar los traslados de droga y hablar con sus lugartenientes. Las autoridades holandesas consiguieron este logro y compartieron los datos con sus compañeros comunitarios.
Uno de los mensajes que más llamaron la atención de estos agentes es que los jefes de esta organización criminal contaban con un amplio número en su plantilla de funcionarios en los puertos comprados. En tan solo unos minutos y con pocos mensajes podían gestionar las llegadas de la droga en contenedores.