El político Toni Comín (Barcelona, 1971), eurodiputado de Junts, ha sido denunciado por un antiguo colaborador de Junts frente a la Eurocámara por acoso sexual y psicológico. El exasesor del político independentista relata hostigamiento laboral, amenazas, broncas, tocamientos, insinuaciones y proposiciones sexuales. En un comunicado, Comín, además de negar los hechos y anunciar que adoptará las “acciones necesarias” para demostrar su honorabilidad, inocencia y “corrección”, advierte que la denuncia podría ser un delito de odio por homofobia. Señala, por último, como sospechosa la coincidencia de esta denuncia, que él considera “falsa”, con su candidatura para presidir el “Consejo de la República” impulsada desde Bélgica por Puigdemont.

“Algunos de los hechos a los que hace referencia la noticia se refieren, de forma completamente tergiversada, a bromas y comentarios más o menos oportunos, en el marco de una relación de confianza y amistad construida durante el mandato”, dice Comín. El denunciante, sin embargo, describe tocamientos, insinuaciones, interrogatorios sobre la vida sexual con su mujer y propuestas de tríos.

Hasta el momento, de la vida personal de Comín había trascendido su relación con el escenógrafo Sergi Corbera, ocho años menor, y la adopción conjunta de su hija Laia. Es el menor de cuatro hermanos e hijo del político Alfonso Comín, fallecido en 1980 a los 46 años, y su mujer, María Lluïsa Oliveres. Tras un proceso de adopción que se prolongó cuatro años, en julio de 2012 por fin pudo tener en casa a su única hija, a la que llama “mi princesa de chocolate”. “Cuando nos la dieron fue muy bonito. Las enfermeras nos dijeron que la niña era una fuera de serie y tenían razón. Lo dice todo el mundo”, declaró al semanario El Singular.

Aunque guarda su vida privada con discreción, nunca ha ocultado su homosexualidad y no duda en alzar su voz como defensor del colectivo LGTBIQ+. Sergi Corbera, además de escenógrafo es ingeniero geólogo, aunque ahora se dedica al teatro y la publicidad como director de arte. En agosto de 2018 decidió dejar Barcelona con su hija para reunirse en Bélgica con su pareja, a quien define como “compañero de vida, de penas y de alegrías”. En octubre de 2017, Comín, implicado en el procés, huyó de la justicia española y encontró refugio en la ciudad universitaria de Lovaina. Allí fallecieron su hermano Pere, en 2018, y su madre, en 2023.

El político independentista fue miembro del centro de estudios Cristianismo y Justicia hasta 2017 y de la fundación de Alfonso Comín creada en honor a su padre, político profundamente vinculado a la izquierda. Tras su enlace, en 1961, el matrimonio formado por Alfonso y María Luisa, convirtió su residencia malagueña, en la Barriada Girón, en centro de peregrinaje de los miembros de la Juventud Obrera Católica. Su abuelo paterno Jesús, conocido como “Comín, bebía y jodín”, fue diputado en las elecciones de 1933, jefe regional carlista en Aragón y miembro activo del catolicismo militante.

Autor de varios ensayos, virtuoso del piano e incondicional de Mozart, a Comín siempre se le consideró como arquetipo de pijo independentista. Durante su etapa universitaria en la Universidad Autónoma de Barcelona Filosofía y Letras y Ciencias Políticas, trabajó como organista en un monasterio cercano a su casa en Barcelona donde toca la marcha nupcial a los novios que pasaban por el altar.