Historia de España. La ETA
Jaime Rocha.- Con motivo de las presentaciones de mi última novela «Misiles para la ETA» y los comentarios que suscita, he comprobado la ignorancia de la juventud española sobre esos cincuenta años de nuestra historia que parece que no existieron, ahora parece que solo existió el franquismo, que fue anterior. Si, anterior.
La izquierda, zurdos, y «progresistas» en general, en vez de mirar al futuro, basan su estrategia política exclusivamente en infundir en la población la idea de que o ellos o regresará el franquismo de la mano de la extrema derecha.
Claro que ese pasado al que miran y utilizan, un día sí y otro también, con cien actividades relacionadas con el franquismo en un año, una cada tres días, es muy selectivo, se salta cincuenta años del terror de ETA, para aterrizar en 1975, año en el que Franco murió en una cama del Hospital de La Paz, sí, un hospital público construido durante la dictadura.
Cuando se conmemoraban los veinticinco años de paz, tras el final de la terrible guerra civil, se inauguraban hospitales como el citado, se entregaban barriadas enteras de viviendas, las barriadas de La Paz, en toda España. Eso es celebrar, abriendo hospitales públicos, entregando viviendas sociales… las cien celebraciones de este año 2025, francamente, no sé en qué ayudan a la sociedad.
La ETA es verdad que nace durante el franquismo, es una escisión de jóvenes del Partido Nacionalista Vasco fundado por Sabino Arana en 1895, es un movimiento nacionalista católico, Arana decía: «No se puede ser buen vasco si no se es católico» y «Los maketos (tontos, apelativo común a todos los que, por la industrialización, llegaron a las provincias vascas), no son creyentes, son inmorales, blasfemos, criminales…despreciables»
ETA nace, como he dicho, de una escisión de las juventudes del PNV en 1959 y comete su primer asesinato matando al guardiacivil de tráfico José Pardines en un control de carreteas el 7 de junio de 1968 y el 2 de agosto del mismo año al policía nacional Melitón Manzanas. Algunas fuentes señalan que la primera víctima mortal de ETA fue la niña de 18 meses María Begoña Urroz Ibarrola, alcanzada por una bomba colocada el 28 de junio de 1960 en la estación de Amara, de San Sebastián.
Nace como movimiento armado en «guerra» contra el franquismo invasor y hasta la muerte de Franco comete 43 asesinatos. Con la llegada de la transición a la democracia hay una amnistía general y todos los etarras detenidos son puestos en libertad.
En diciembre de 1970, se celebra el Juicio de Burgos contra 16 miembros de la banda, Seis de los procesados fueron condenados a muerte y las penas impuestas al resto sumaban un total de 519 años de prisión. Franco conmutó las penas de muerte por reclusión mayor y con la amnistía se 1977 salieron de la cárcel. Con seis años de cárcel pagaron sus crímenes.
Pero aquello de que eran luchadores, «gudaris» se denominan, contra la opresión franquista no era más que un intento de justificación de sus crímenes. Pero es durante la democracia cuando la banda terrorista comete 810 asesinatos de militares, policías, guardias civiles, empresarios, mujeres y niños. Miles de heridos y muchos miles de vascos, mas de cien mil, no independentistas, que se ven obligados a emigrar a otras provincias españolas ante el acoso, cobro del «impuesto revolucionario» y vejaciones a los que son sometidos con pintadas en las calles amenazándolos de muerte.
Ningún gobierno español cayó en la trampa de mandar a las Fuerzas Armadas a luchar contra el terrorismo, lo que si hizo Gran Bretaña en la lucha contra el terrorismo del IRA. La lucha contra los asesinos la llevaron acabo las Fuerzas de Seguridad y los Servicios de Inteligencia, en alguna operación con la colaboración fundamental de los de países occidentales, como narro en la novela citada.
¿Y que pasa ahora? Pues que se intenta blanquear a los etarras y sus adláteres, que son llamados «hombres de paz» por algunos políticos y para nada se habla de los cincuenta años de terror, no se menciona en colegios y universidades y como consecuencia, vuestra juventud lo ignora absolutamente.
Me escribe alguien que luchó activa y eficazmente contra la ETA en los «años de plomo» cuando mataban a cien personas por año: “Es importantísimo recuperar el pulso del relato frente a ETA y a toda la morralla (RAE: Multitud de gente de escaso valor) Social Comunista, con toda esa transición dulcificada que quieren hacer ver de cara a ETA.
Los amigos de allí me cuentan que ya está volviendo a imponerse la versión de una ETA antifranquista que sólo entrego las armas cuando hubieron acabado, después de la transición, con los mandos policiales y la estructura franquista enquistada entre las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado.
Se están volviendo a disfrazar de héroes, con cientos de asociaciones, colectivos, grupos de apoyo etc. afines a ETA donde están colocando a todos los etarras que van saliendo de las cárceles. Asociaciones vecinales en los que crean puestos expresamente para colocarlos a ellos.
*Jaime Rocha es capitán de Navío (R) y exagente del CNI