En defensa del Valle de los Caídos
Ignacio Pozo.- El Valle de los Caídos tiene como misión rezar por la unidad entre españoles, proponer el perdón cristiano y fundamentar la reconciliación cívica. Decía San Juan XXIII, “en las cumbres del Guadarrama el signo de la Cruz Redentora, que extiende sus brazos piadosos como alas protectoras, bajo las cuales los muertos gozan el eterno descanso” Hermosa evocación de lo que significa esa Cruz que preside una historia de amor y de esperanza. La comunidad benedictina en ese lugar ora para pedir ese don que no se consensúa con pactos y que sólo Dios concede a quien humildemente lo pide en la plegaria.
La Cruz es lo que evoca, los monjes benedictinos lo cantan en la abadía. Es el Valle de los Caídos, no una zanja de bandidos donde se magrea la verdad y la belleza se mancha, como escribía el arzobispo de Oviedo, don Jesús Sanz.
Por eso, utilizar a los muertos inhumándolos a hurtadillas, o queriendo vencer batallas perdidas es propio de gentes desalmadas, progres y de la peor calaña a la las izquierdas nos tiene acostumbrados históricamente.
Llegado a este punto, cabe señalar que las negociaciones entre la jerarquía de la Iglesia Católica y el Gobierno de Pedro Sánchez sobre la “resignificación” del Valle de los Caídos, supone un anatema en sí mismo, un acto vandálico propio de talibanes y de cobardía ingrata. El Valle tiene un significado espiritual y de hermanamiento de los muertos en nuestra incruenta guerra civil, que el bando vencedor, haciendo de una generosidad cristiana enorme, brindó a los vencidos equiparándolos en su sacrificio por España. Un acto así no se conoce en ningún otro lugar del mundo y de la historia. Todo ello, tiene todos los indicios propios de este gobierno, que no es antirreligioso sino anticatólico, de ser una acción propia de talibanes con el objeto de esconder sus corruptelas familiares y de destacados miembros de su gobierno, así de ocultar sus pactos con independentistas, comunistas y proetarras. De igual forma que hay que reconocer lo anterior, no es menos cierto que históricamente la victoria de Franco sobre la sovietizada España supuso el cese de los asesisatos, torturas, violaciones, saqueos o quemas, de clérigos, monjas, católicos, y edificios destinados al culto.
Si recriminable es la entrega de parte de El Valle al gobierno desde un punto de vista moral, también lo es desde una perspectiva legal, ya que el Gobierno carecen de jurisdicción en el interior de la Basílica, en virtud del Acuerdo España-Santa Sede de 1979, que expresamente señala: “Los lugares de culto tienen garantizada su inviolabilidad con arreglo a las leyes”.
Lo llaman la resignificación del Valle de los Caídos cuando no es más que un atentado contra la fe y contra la memoria de todos los caídos. “Es preferible una iglesia mártirque una iglesia connivevente con el mal por temor a perder un bienestar teporal”, manifesta el padre Santiago Cantera (exprior de la comunidad Benedictina de El Valle)
No quiero terminar este artículo sin mi reconocimiento personal, y como católico al padre Cantera un hombre de Fe y un patriota que se opuso a que gobierno tiránico desenterrara muertos y profanara una Basílica. Por desgracia, estuvo muy solo por sus superiores.
Que su retiro voluntario, fuera de El Valle, le sirva para encontrar el mejor camino para enfrentarse a los enemigos de la Fe y de España. Y hay que recordar a Caifás, sumo sacerdote, cuando dijo: “Vosotros no entendéis ni palabra, no comprendéis que os conviene que uno muera por el pueblo, y que no perezca la nación entera”. Con el Padre Santiago ha ocurrido lo mismo que con Jesús, y quizás, por el mismo motivo: “porque conviene”. Hoy, condenan al Padre Santiago al destierro, en un exilio injusto, porque lo ha ordenado el poder político, con el silencio del poder religioso.
Hoy están de celebración los siervos del Mal. Gracias por todo.
*Abogado y colaborador de AD
Hasta que no llegó su “hora” al Señor nadie le tocó un pelo: ¡Nadie! Nadie le tocó un pelo porque Él no se dejó, ni cuando le intentaron despeñar, ni cuando le intentaron apedrear: ¡Nadie! Y cuando el Señor se hartó, con dos cuerdas a modo de látigo sacó a todos del templo…: Claro, es que era el Señor y el Señor es mucho Señor. Si cierto, y estas señoras son muchas señoras: El 6 de noviembre del 2021, mujeres católicas expulsaron a latigazos a feministas por profanar la Catedral de San Lorenzo Mártir en Santa Cruz de la Sierra,… Leer más »
Algun dia llegará, que las fuerzas del Mal, serán vencidas por el Bien. Pero aun no sabemos cuándo. Quizá hagan falta algunas “Oraciones” de Alguien?