La crisis reduce el número de autónomos y complica el futuro a los emprendedores
Tres años de crisis y de «sangría» de autónomos. Así lo denuncia el presidente de la Federación de Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, quien reclama medidas rápidas y efectivas para respaldar la actividad de un colectivo muy numeroso y tradicionalmente generador de empleo en España.
Los datos de 2010 dejan claro que no solo los asalariados sufren los problemas que atraviesa la economía nacional. El pasado ejercicio desaparecieron del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) otros 58.088 trabajadores por cuenta propia, lo que supone un descenso interanual del1,8%.
«Estas cifras son un claro reflejo de que la situación actual sigue siendo crítica; no cabe duda de que ha sido un mal año para los autónomos y de que, mientras no seamos capaces de parar esto y de generar nuevas y sólidas iniciativas emprendedoras, el país seguirá perdiendo empresas y, con ello, aumentando las cifras del paro», sentencia Amor. El colectivo denuncia una enorme dificultad de acceso al crédito. Una barrera insalvable para miles de personas que, deseándolo, no pueden abrir su propio negocio. El golpe, es cierto, resulta muchos menos violento que el de años anteriores, aunque el ‘vía crucis’ es largo y pesa lo suyo. En 2009, por ejemplo, la reducción alcanzó el 4,7%, con 156.851 emprendedores menos.
Desequilibrios
La radiografía del trabajo autónomo evidencia muchos desequilibrios y comportamientos irregulares. Como el que queda patente al apreciar que Ceuta y Melilla fueron las únicas provincias españolas en las que creció el número de autónomos, o el que se aprecia cuando se analizan los datos por autonomías, ya que solo cuatro regiones (Cataluña, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Galicia) representan más de la mitad (en concreto, el 53,8%) de todas las bajas del pasado año.
El balance de ATA deja una nota de género interesante. El ritmo de destrucción de empleo autónomo en 2010 entre los varones fue del 2,5% interanual (51.626 emprendedores menos), cuatro veces más que entre las mujeres, grupo en el que se dieron de baja del RETA ‘solo’ 6.462, lo que significa un retroceso del 0,6%. La federación subraya el hecho de que de entre el decrecimiento total durante el pasado ejercicio el 88,9% correspondiera al colectivo masculino.
Como sucede en el régimen general, la Agricultura y la Industria y Transporte han sido los grandes afectados por la crisis, con 10.898 y 5.371 autónomos menos en el año. El comercio (0,3% menos) y las actividades administrativas (3,7%) también sufrieron notables descensos de afiliación.
El elevado número de bajas fue paliado en parte por el crecimiento en sectores como las actividades profesionales, las sanitarias, la educación, la información y comunicación, las financieras y de seguros y la hostelería.
La federación de autónomos, que aplaude el reciente cambio legal para poder capitalizar el 100% de la prestación por desempleo para constituirse como empresario, no celebra, sin embargo otras muchas medidas del Ejecutivo.
En un reciente estudio elaborado por ATA, el 80% de los autónomos «suspende» al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su política económica. Dicen los emprendedores que las perspectivas para este año no son mejores, y que un 88% del colectivo prevé que no contratará a nadie en este ejercicio que ahora empieza.
Un 77% se muestra convencido de que el paro seguirá creciendo, y casi la mitad cree que la crisis será aún más dura en los próximos meses. El crédito se mantiene como uno de los grandes lastres del sector pues, dice el trabajo, la banca niega el 33% de las solicitudes.