Assange denuncia estar sufriendo «una situación orwelliana»
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, ha denunciado una campaña de las autoridades estadounidenses, que están intentando recoger informaciones para lanzar un procedimiento judicial contra él, y ha considerado que su arresto domiciliario en una zona rural de Inglaterra es “una situación orwelliana”.
“Estoy vigilado de forma permanente”, se ha quejado Assange en una entrevista emitida hoy por la emisora ‘France Info’, y aunque ha reconocido estar “acostumbrado a este tipo de presión (…) la situación actual es tal vez la más dramática que he vivido hasta ahora”, ha afirmado. En todo caso, ha asegurado que “pase lo que pase, seguiremos. El número de publicaciones diarias se ha intensificado estos últimos tiempos y va a seguir aumentando”.
Assange ha asegurado sentirse respaldado porque en todo el mundo “nuestros simpatizantes y nuestros defensores continúan luchando por nosotros”. “No soy el único amenazado, todos los miembros de nuestro equipo lo están”, ha comentado y se ha referido al caso de un joven analista en prisión desde hace 230 días en una cárcel de Virginia a la espera de un proceso contra él de la justicia estadounidense.
El fundador de Wikileaks, al que Suecia pretende extraditar desde el Reino Unido para juzgarlo por delitos sexuales, ha criticado que las autoridades estadounidenses estén tratando de reunir informaciones de sus seguidores en Twitter sobre él mismo y sobre otras personas implicadas en la difusión de un vídeo acerca de la muerte de una veintena de personas, incluidos dos periodistas de Reuters, en Bagdad en 2007.
“Se trata de una tentativa evidente destinada a forzar a la gente a que dé informaciones para lanzar procedimientos judiciales contra mí y contra mi equipo”, ha indicado antes de añadir que el propósito de Washington es extraditarlo y que para ello se ha recurrido también al espionaje. Assange, que vive en una residencia rural a unos 200 kilómetros de Londres, ha comparecido brevemente hoy ante la justicia británica, que le ha impuesto un control diario en la comisaría de policía de Beccles.
“Feliz” con la vista
En la vista, el juez de distrito Nicholas Evans ha aliviado parcialmente las condiciones de la libertad bajo fianza, permitiendo a Assange que el 6 y el 7 de febrero permanezca en Londres para la celebración de la vista para su extradición que tendrá lugar el 7 y el 8 y no tenga que desplazarse desde Norfolk, donde reside. El objetivo de la vista era comprobar que ambas partes están al tanto de todos los aspectos del caso y preparadas para la vista del mes próximo.
Uno de los abogados de Assange, Geoffrey Robertson, ha afirmado que la defensa está preparada y de hecho, según informa el diario ‘The Guardian’, podría dar a conocer hoy mismo, a través de Wikileaks, los argumentos que empleará para refutar la extradición. Por su parte, la representante de las autoridades suecas en la vista, Hannah Pye, ha asegurado que no tiene ninguna objeción a que la vista se celebre como estaba previsto dentro de cuatro semanas, informa Sky News.
Al término de la vista, Assange ha hecho unas breves declaraciones a la prensa en las que se ha mostrado “feliz” por el resultado de la misma. “He pedido al tribunal que haga llegar a la prensa nuestro esquema argumental”, ha indicado. Por otra parte, ha dejado claro que “el trabajo de Wikileaks sigue inalterable” y que están “acelerando la publicación de los materiales relativos al ‘cablegate'”.