La Real Sociedad volvió a ganar al Barcelona en Anoeta por segunda vez en las tres últimas temporadas y, con dos goles del uruguayo Chory Castro, dio la vuelta a un 0-2 para infligir su primera derrota de la presente Liga al líder. De nuevo el conjunto barcelonista desperdició dos tantos de ventaja en San Sebastián y para colmo de males, con un hombre menos por expulsión de Gerard Piqué, acabó por sufrir su primera derrota liguera del curso con un tanto en la prolongación de Agirretxe.

Tras dos minutos en los que el Barça dejó gustarse a su rival los azulgranas se pusieron serios y pudieron marcar en el minuto 3, en una mano a mano de Leo Messi con el chileno Claudio Bravo que el astro argentino, inexplicablemente, envió fuera. No perdonó dos veces el jugador barcelonista porque dos minutos más tarde un saque de puerta de Bravo llegó a Iniesta, este inició un ataque fulgurante que culminó Messi con un zurdazo sutil. No tardó el Barcelona en ampliar su ventaja con un tanto de Pedro e incluso dispuso de oportunidades para ampliar el marcador, pero no lo logró y la Real apeló al orgullo en busca de la reacción.

El conjunto donostiarra disfrutó en esta primera mitad de ocasiones para haber empatado el choque, primero con Xabi Prieto y luego con un disparo que rozó el palo del francés Griezmann. El estresante dominio blaugrana en la primera mitad no se consumó en más goles porque Messi estaba despistado y en una salida en falso de Claudio Bravo elevó el balón y lo estrelló en el poste. Acto seguido llegó el tanto de la Real en una rápida combinación que terminó con el balón en las botas del uruguayo Castro, quien cruzó el balón e hizo estéril el esfuerzo de Valdés.

La Real salió a por todas en la segunda mitad y se benefició de una inocente falta de Piqué, que vio la segunda amarilla y su equipo se quedó con un hombre menos.

Las cosas se le pusieron todavía mejor a la Real Sociedad, que igualó en el minuto 63 gracias a un disparo de Chory Castro que desvió el argentino Javier Mascherano y despistó a Víctor Valdés. El Barcelona, pese a su inferioridad numérica, mantuvo su juego de toque, pero careció de llegada ante una Real Sociedad envalentonada aunque algo cansada.

Todo parecía que iba a terminar en el segundo empate de la Liga del Barcelona, pero en la prolongación Agirretxe hizo el tercer tanto local entre la euforia de una grada que anticipaba así la celebración de la gran fiesta de San Sebastián y propiciaba la primera derrota del cuadro de Tito Vilanova en el curso.