La joven marroquí protagonista del enésimo escándalo de Berlusconi.

El Vaticano rompió amarras con la sólida alianza que mantuvo durante años con el premier Silvio Berlusconi, que supo resistir a todos los embates de los escándalos sexuales y de corrupción protagonizados por il Cavaliere . Pero esta vez ha sido “troppo” (demasiado). Las denuncias de prostitución de decenas de chicas y de relaciones de sexo con la menor marroquí Ruby Robacorazones, más el abuso de poder para hacerla liberar por la policía y la justicia en mayo último tras ser detenida por un robo, hicieron hablar ayer al número dos del Papa, el secretario de Estado cardenal Tarcisio Bertone. El “primer ministro” vaticano eligió apoyar con firmeza al presidente de la República, Giorgio Napolitano. Dijo que también la Iglesia “sigue con preocupación estos acontecimientos”.

Reclamó “más moralidad” en la vida pública

Bertone hizo publicar entera hace unos días en el diario del Papa L’Osservatore Romano la declaración del presidente Napolitano, que se hacía eco del “turbamiento” del pueblo italiano ante el estallido del “Rubygate”, como lo llama la prensa, que amenaza como nunca poner fin a la carrera política de Berlusconi. Dijo que estaba de acuerdo con el Jefe del Estado, convertido en el principal punto de referencia de la institucionalidad.

“Moralidad, justicia y legalidad son los principios de una sociedad que quiere crecer y espera respuestas positivas a los problemas de nuestro tiempo”. El cardenal Bertone aclaró que “la Santa Sede tiene sus canales de comunicación”, o sea que ya ha intervenido discretamente ante Berlusconi para hacerle saber que el Vaticano y el Papa no le renuevan la confianza que le habían ratificado el mes pasado, cuando habían resonado los primeros truenos del caso.

La prensa católica cañonea desde hace días contra el espectáculo “de degradación”, como afirmó el semanario Familia Cristiana , la revista más difundida de Italia. A las protestas se unió el diario de Milán Avvenire , propiedad de los obispos italianos.

Berlusconi ha reaccionado lanzando proclamas guerreras en videos difundidos por sus redes de televisión contra los fiscales que lo acusan. Anunció que no irá ni hoy, ni mañana ni pasado a la cita fijada ante la justicia en Milán. Sus abogados niegan la jurisdicción de la comisión parlamentaria que se ocupa de estos casos.

El premier protesta su total inocencia y pide castigar a los fiscales apoyados “por la izquierda”. La movilización para salvar a il Cavaliere incluye a la misma Ruby. La chica marroquí, que ha cumplido 18 años hace unos meses, fue entrevistada por un canal propiedad naturalmente de Berlusconi. Juró que el premier “nunca me tocó ni con un dedo”, aunque en las interceptaciones dice que mantuvieron relaciones sexuales y que le pidió 5 millones de euros para callar.

Pero el hecho político del día lo protagonizó el ex presidente de la Fiat y titular de la Ferrari, Luca de Montezemolo. Luca, que arrastra a muchos empresarios, dijo que los dos años y medio del gobierno Berlusconi han sido “un período desastroso que concluye en el modo peor” . Advirtió que el equilibrio de paz social puede perderse “con inquietudes radicales en el cuerpo más profundo del país”. Si se agregan “los conflictos entre instituciones”, agregó, aludiendo al choque entre Berlusconi, los magistrados, el presidente de la República y ahora el Vaticano, “el efecto podría ser catastrófico”.

Los escándalos sexuales son el explosivo trasfondo de una economía estancada. En los próximos tres años Italia recuperará menos de la mitad de lo que perdió en 2008–2009 en la crisis global. La riqueza individual está en el nivel del año 2000. Ayer, las inquietudes crecieron después de que el Banco Central Europeo se refirió por primera vez a “tensiones” en los títulos italianos de la deuda pública, que se acerca a los dos billones de euros.Una pésima noticia.