Con dignidad, gratitud y honor
Mi muy querido Armando: Aún con lágrimas en los ojos, he terminado de ver el programa La Ratonera que cierra el ciclo hasta el mes de septiembre y despide en la visión pública, al maestro de periodistas Enrique de Diego. Pero lejos de ser tristes, son emotivamente gratas las profundas emociones que nos habéis hecho sentir, no sólo tus contertulios, entre los que se encuentra nuestro querido Caballero Legionario Guillermo Rocafort, sino tú mismo y de manera especial para las gentes de la plataforma de las Clases Medias y Regeneración, quien ha sido también editor de AD, el genial soldado de España, Enrique de Diego. He de darte las gracias y así y en homenaje a aquellos que habéis citado lo hago con esta carta.
Gracias en nombre de las buenas gentes, de las corajudas gentes que servimos con dignidad, a las órdenes de Enrique de Diego, en el intento de salvar a España. Ese fe nuestro delito, esa es nuestra bandera. Uno de los artífices, precisamente de la plataforma de las Clases Medias que junto con D. Enrique dio de alta esa asociación de la sociedad civil en el año 2007, fue Guillermo Rocafort, por el que tenemos además gran cariño. Hablo en nombre de muchos o de unos pocos, como tantas veces se ha dicho que fuimos. Hablo en nombre de los sin nombre, de esos soldados desconocidos, y ¿sabes? no nos importa, jamás nos importó no tener nombre, aunque algunos sí fuimos nombrados por el puntual y siempre voluntario, desempeño en primera línea. No imaginas el consuelo que ha sido para todos nosotros que Enrique de Diego tuviera cabida en el proyecto AD, pues aunque muchos crean que solo se le oía a él, detrás, en silencio, en muchos casos obligado silencio, estábamos siendo representados los más expoliados de estas clases medias y trabajadoras. Porque si algo hizo el sr. De Diego por todos nosotros fue ser nuestra voz y ese peso de responsabilidad voluntaria será, Dios es justo y sabe, reconocido al fin.
Luego de la plataforma Clases Medias surgió el partido Regeneración, y si algo nos quedará para ofreceros a todos, vaya por delante que fue una batalla que volveríamos a acometer otra vez y otra, es que sepáis que nos compensó. Los resultados pusieron muy nerviosos a la casta, porque no se trataba de la cifra de 4200 votos, si no de haberlo hecho posible. No voy a detallar cada jornada, cada minuto y evento y acto realizado, -tantas concentraciones, tantos frentes que abrimos, los primeros contra Sindicatos lacayos y Patronal comprada-, porque lo único que tiene sentido es que quisimos hacerlo, y si hemos aprendido algo es otra verdad de esas que duele, de esas que Enrique de Diego acuña como nadie, abrimos ojos, privatizamos mentes, y la casta parasitaria –término acertado y descriptivo acuñado por el sr. De Diego-, acusó el golpe “he ahí un puñado de hombres y mujeres libres”, y eso se paga. Sabíamos los riesgos y me congratulo de asegurar que fue nuestro gesto el que aventó lo que se esconde en las cloacas del sistema. Como una piedra en un estanque que va haciendo primero pequeños círculos concéntricos y que tiempo más tarde llega hasta la orilla en una circunferencia gigantesca. Lo hicimos pero entendimos que había que poner en marcha un medio de comunicación. Y fue duro comprobar que esa necesidad no vería la luz.
Para las gentes de la plataforma de las Clases Medias y de Regeneración, este año periodístico que fue desde julio de 2012 hasta hoy mismo 1 de agosto de 2013, ha sido un regalo tener a Enrique de Diego en AD, porque ya no tenía cabida más que en ese oasis de libertad que representas, el único periodista que lejos de ser solo una voz que crea opinión –y tú te sumas a su altura por tanto como te hemos visto hacer y leído en estos meses, así que eres otra loable excepción-, se bajó a la arena de la calle, se calzó la espada del micro y se armo con el ariete de su voz a la cabeza de una gesta que guardamos con orgullo en nuestros corazones. Porque Enrique de Diego es uno más –aunque sea el mejor- de nosotros, porque nos enseñó que cada uno podía ser artífice de la solución para esta Nación GRANDE. No sé si los seguidores de AD pueden ser capaces de entender que los miembros de la PCCMM y Regeneración contamos con el bagaje de unas honoríficas cicatrices ganadas a pulso, por vosotros, y que en la serenidad de un ostracismo que nos tiene ahora en el silencio porque tras conseguir que el sistema haya sido puesto en cuestión, hemos de ganarnos el pan de cada día, pero que nadie se equivoque, nosotros estamos siempre dispuestos. De algún modo como los hombres y mujeres dedicados a elevar cada día oraciones al Señor, en la clausura, en el anonimato de velar por los demás, vivimos con la conciencia tranquila sabiendo que ya que tenemos la experiencia, tenemos la razón y en cada conversación con conocidos y familiares, nuestra opinión ha sentado cátedra. Los miembros de la PCCMM y Regeneración seguimos luchando en la cercanía de lo cotidiano y os dejamos el regalo de haber ahora conocido, gracias a ti, querido Armando, a uno de los patriotas más grande que ha nacido en esta España doliente pero orgullosa.
España merece todo, por España fui con aquel dorsal número 1 en las elecciones al ayuntamiento de Madrid en 2011, como me habéis citado en los últimos programas tú y Enrique de Diego. Eso es lo que me enseñaron mis padres y he intentado devolverlo a costa incluso de tener que pagar peaje en este año 2013, condenada por mis más cercanos, recriminándome mi participación en tan noble acción. Lo pago con gusto, otros, y en especial Enrique de Diego han pagado mucho más. Por eso, cuando la casta parasitaria le condena al ostracismo en 2012, fue vital poder buscar desde donde seguir haciéndose oír y tras tener que cerrar el programa Clases Medias de radio libertad (107,0FM), fue una honor que tú, Armando, contaras con el maestro De Diego.
Armando, querido amigo, también tú me diste cabida en AD y como he dicho antes, no era a mí, si no a la corajuda gente que está- oh sí, sigue estando- a mi lado. Todos ellos, con lo que he hablado en la últimas semanas reiteran el orgullo y la dignidad de lo que hicieron, que dicen todos que mereció le pena, y como es debido hacer nos llena el corazón gritar el lema que acuñó el señor De Diego:
Fuerza y Honor
Viva España
Con dignidad recibe mi abrazo,
PD. Seguiremos a AD. Contad con nuestra gratitud
Carmen, que Dios te bendiga a to y a tod@s los valientes colaboradores de AD.
¡Arriba España!
*a ti
Un fuerte abrazo, Carmen.
Carmen, muchas gracias a ti, a Enrique de Diego y a Armando por darnos esperanza a los patriotas españoles.
¡Arriba España!
¡España una!
¡España grande!
¡España libre!
Te saluda:Joaquín Llamas Hermoso, de Melilla.
Buen escrito has lanzado a los vientos, mensagero de amor y verdad. Adelante, Carmen! Mucha suerte
“Con dignidad, gratitud y honor” Mal nacido quien no es agradecido. Bandolero del sur y mi primo Robin Hood estamos contigo, somos de la familia de la gente de bien que no tira la toalla y sigue en la lucha por la supervivencia, con dignidad, con gratitud y con honor. El mismo que esta mujer ha demostrado en este artículo lleno de cariño y amor a los demás, de reconocimiento a todo lo que huela a verdad y sinceridad. Somos empáticos con esta carta, porque venimos de los mismos principios. Humanismo que transforme toda esta farsa que nos rodea y… Leer más »
Que Dios os bendiga.
Esta mujer es definitivamente un referente para los muchos que seguimos AD en Andalucía.
Saludos desde el sur, Septiembre nos trae aires de esperanza y energía para seguir luchando por regenerar España
Que Dios te bendiga a tí tamién.
Gracias por publicarlo. Hasta muy pronto.
Que dios os bendiga a la plataforma de las clases medias por haberlo intentado. Solo nos queda convencer a Guillermo para presidente del gobierno.
Y a Enrique de Diego para presidente de la verdadera I República de España, la que nunca hemos tenido.
¡qué buena mujer!, de las que no quedan. Ya nos gustaría poder escucharla y leerla más a menudo por AD.
Ahora tienen que luchar otros, mientras que Dios te bendiga.