Breves apuntaciones veraniegas
1 . El cambio de Rubalcaba. La mayor parte de los líderes y los militantes del PSOE quieren sustituir a Rubalcaba por otra persona más joven y menos gastada, siempre que sea capaz de abrir y llevar a buen fin un proceso de renovación del partido. La crisis presente se agudizará a partir del próximo septiembre.
2. El cambio de la Iglesia Católica
Examinando desde una perspectiva política cuanto ha ocurrido entre los dirigentes y los fieles de la Iglesia Católica en los últimos seis meses, casi todos estaremos de acuerdo en que venimos asistiendo a un espectacular ejercicio de renovación interna de una comunidad de dimensión supertemporal, renovación causante de un positivo impacto en la opinión pública mundial, sumamente favorable para esa Iglesia y su máximo dirigente, muy por encima de cualquier expectativa.
3. El cambio necesario
Casi todo el mundo está de acuerdo en que la crisis de los partidos políticos españoles depende en su práctica totalidad de la crisis socioeconómica y política de España, dependiente a su vez de la análoga crisis europea, asimismo ligada a su matriz o fraterna crisis mundial… En lo que no hay acuerdo es en cuál sea el mejor modo de salir de semejante barullo. La mayoría de la gente y sobre todo la mayor parte de nuestros políticos quieren hacernos creer que de tan descomunal lío se sale cruzándose de brazos o haciendo lo menos posible -postura liberal- o interviniendo en favor de los bancos -postura capitalista- o en contra de ellos -tesis socialdemócrata, socialista o simplemente marxista-.
Casi nadie, que yo sepa, se atreve a decir que esta crisis denuncia el total fracaso de un sistema político y socioeconómico que no da más de sí, o que sólo puede dar de sí un poco más de lo que nos venía dando. Lo que la mayor parte del mundo necesita es disponer de una creencia que sirva de base, sostén e impulso a su vida individual y colectiva; una creencia que le permita enorgullecerse de su capacidad laboral e intelectual. Es decir, lo fundamental y básico es convencer a los demás y convencernos nosotros de que es el trabajo y no el dinero lo que proporciona prestigio y futuro.
Esta convicción la necesitan más las clases medias y trabajadoras que las élites. Cuanto más abajo se está en cualquier organización o red social, menos fuerte y entrelazada es la base que nos soporta, y mayor la necesidad de un plan estratégico formal en favor de la supervivencia laboral o incluso física de la persona individual o colectiva necesitada. Lo malo es que sin un previo e inteligible mapa social resulta difícil redactar y realizar ese plan estratégico.
4. El mapa necesario
España necesita con urgencia un mapa socioeconómico inteligible. Los españoles necesitamos que personas estudiosas e inteligentes nos proporcionen cuanto antes un plan estratégico formal para nuestra supervivencia como simples individuos y sobre todo como actores y protagonistas de una historia colectiva. No nos basta con que nos digan que para salir de la crisis política, social y económica que sufrimos basta con aceptar durante algún tiempo el vivir con austeridad, la máxima rebaja de salarios y el recorte del gasto público.
5. El cambio del PP
Sí, también el PP debe cambiar, y parece que va a hacerlo en este proximo otoño. Dios mediante, dentro de unos meses veremos como ese cambio, el del PSOE, y el de otros partidos mas o menos protagonistas del actual sistema sociopolítico y económico vigente en España desde 1978, será superficial y no profundo. No será, no es ya, el cambio que necesitamos.
6. El Partido Republicano Español
Si yo tuviera 50 años menos de los que ahora tengo, me lanzaría a las plazas públicas propugnando un sistema socioeconómico y político fundamentado en el predominio y el prestigio del trabajo individual y colectivo, construido y perfeccionado sobre las familias naturales y las inteligentemente creadas para concretas tareas o empresas comunes, conscientemente apartado de cualquier tipo de familia predeterminada por unos apellidos más o menos históricos… Un PRE que con sus siglas ya vocea que busca el mejor futuro común…
Esto es lo que esperamos todos un cambio radical, en el que dejemos de estar al servicio del esclavismo financiero. Que la unica politica que sabe hacer la casta mafiosa amen de robarnos. Una industria basada en bienes tangibles y no en los mercados especulativos y financieros. Unas autonomias que deben desaparecer totalmente, basta de mantener a tanto vago. Un fomento equitativo y justo de los impuestos y no darles prebendas solamente a las multinacionales. Salirse del circulo de prestamos internacionales ya que si creamos bienes tangibles no tendremos necesidad de financiacion especulativa. Y muchas otras cosas mas, pero para… Leer más »