Mi hermana Bea
Esta semana no tengo ánimo para escribir. Mi hermana se ha ido y estamos todos intentando encontrar un hueco donde encajar esta pérdida. No voy a escribir un panegírico ni a contaros cuánto me duele; es algo demasiado importante como para expresarlo aquí con palabras. Podréis imaginar lo que es perder a una única hermana con la que tenía una relación tan especial. La despedimos el lunes arropados por un inmenso número de personas queridas y también de flores. No imaginaba que se agradecieran tanto esos apoyos y esos detalles, pero consuela y ayuda a pasar los primeros momentos. Después vienen el aterrizaje y la ausencia.
También encontré un cierto consuelo en el recogimiento de una iglesia bella, antigua, y con gran significado emotivo tras el horror del entierro. Dos psicólogas infantiles nos aconsejaron que lleváramos al funeral a su hijo y a los sobrinos, que tienen entre once y trece años. El hijo de mi hermano me preguntó si iba a ser una misa especial. Yo había elegido una única canción con un significado singular para que sonara durante la comunión, pero cuando el niño me dijo eso, se me ocurrió hacer algo para que tuvieran la mente entretenida y pudieran dedicarle algo a Beatriz. Los llevé conmigo para que me ayudaran a colocar las flores junto al altar. Su niño, que tiene 11 años, tocó el piano durante el ofertorio, y después de la comunión, mi Alfonso, el niño de mi hermano, y otro sobrino por parte de mi cuñado, leyeron algo que escribí para ellos antes de la misa. Fue algo improvisado y no tuvieron tiempo para ensayar, pero leyeron cada uno su párrafo como tres campeones, despacio y saboreando las palabras, como les susurré antes de que se dirigieran al atril.
La tierra de las mariposas tenía dos prados separados por la brisa del oeste. En uno de esos prados había arbustos y árboles de fruta que ellas hacían crecer con el polen que trasportaban. El otro prado estaba cubierto de flores de muchos colores que les ofrecían a las mariposas su aroma y sus caricias, y se inclinaban sobre ellas para que tomaran su néctar sin esfuerzo. A ese lugar iban las mariposas a descansar cuando había terminado su labor.
Pero no todas las mariposas eran iguales. Las azules, las amarillas y las del color del caramelo, eran las encargadas de polinizar los árboles y por eso permanecían en el prado mucho tiempo, hasta acabar su tarea. Pero las mariposas blancas, las que libaban las lilas y las flores de la madreselva eran llevadas al prado del descanso antes que las demás.
Cuando al final del verano ya no había más flores que besar, el viento del oeste se convertía en brisa y las llevaba volando suavemente al prado del descanso. Allí esperaban a sus compañeras que se unirían a ellas cuando el otoño diera paso al invierno. El viento del oeste acaba de llevarse a una mariposa blanca y ahora descansa tranquila en el prado de las flores de colores.
Un abrazo a todos.
*Presidenta de Galicia Bilingüe
Gloria, te acompaño en el sentimiento de todo corazón, a ti y a toda tu familia.
Y Bea, Que En Paz Descanse.
Descanse en paz.
Su hermana ya agradece este precioso artículo a su memoria.Un fuerte abrazo y gracias por compartirlo.
Cuando alguien querido se va, deja un gran vacío que solo el tiempo puede aliviar un poco. También pienso en el niño. Hay que continuar el camino, eso, mitiga un poco el dolor.
Mis condolencias.
Espero que a su hermana la tierra le sea ligera, pero no se preocupe, ella ya está en un mundo mejor, pero eso es lo que debemos de creer, ha recibido el premio a la vida, ha despertado de un sueño, en fin, ánimo y adelante.
Mis condolencias y un afectuoso saludo a toda la familia.
Gloria, gracias por compartir con nosotros tus vivencias. Hasta frente a la muerte nos das ejemplo.
Como sé que no podrás olvidar, esta gran pérdida, también sé que la superarás. Se sobrelleva, y se te ve una mujer fuerte e integra, acostumbrada a luchar ante las adversidades y aunque ésta es otro tipo de batalla, la vida nos seguirá poniendo pruebas.
Siento lo de tu hermana y en estas fechas (en las que yo no las siento con el mayor de los regocijos) soy consciente que quedará como un recuerdo imborrable para tí y tus familiares más próximos.
Le mando muchos ánimos. Bonita la historia de las mariposas.
La crisálida de esa mariposa, será un Ángel en el cielo. mi pésame a la familia.
Gloria, descanse en paz su hermana. Le presento mis condolencias. Ánimos para la familia y en especial para su hijo. Un saludo.